Capítulo 4.
Condujeron durante varios kilómetros hasta que no vieron grupos de caminantes. Al principio de una autopista a las afueras de Atlanta pararon y se reorganizaron en los coches. En la caravana irían Dale junto a Glenn, Andrea, Shane y T-Dog. Rick, Lori, Carol y los dos niños irían en la camioneta. Dani, Daryl y Ariel en el Hummer. Daryl le comentó a Dani que le gustaría coger la moto de su hermano durante unos kilómetros, necesitaba que le diera el aire.
Organizados se volvieron a poner en movimiento, tenían que encontrar un refugio pronto. Condujeron durante varias horas, aunque cada vez encontraban mas vehículos obstaculizando el camino. Llegaron a un punto donde no sabían si la caravana y el coche de Dani podrían pasar. Daryl se acercó al lateral de la caravana que iba en cabeza y le dijo a Dale que le fuera siguiendo, él iría guiándoles entre los coches.
De pronto la caravana comenzó a echar humo y se detuvieron. Dale hablaba sobre un manguito roto y que no sabía donde iba a encontrar un repuesto. Daryl abrió uno de los coches y comenzó a buscar diciendo que podían encontrar lo que necesitaban en alguno de los coches abandonados en la autopista. T-Dog dijo que aprovecharía para intentar conseguir gasolina. Carol y Lori fueron a ver si encontraban algo que les pudiera servir junto a Carl y Sofía. Ariel se quedó junto a Dani que hablaba con su padre. Mientras padre e hija hablaban algo llamó la atención de Rick, levantando el rifle que llevaba observó por la mira, le hizo una seña a Dani y le dio el rifle para que mirara, al ver la horda que se acercaba fueron avisando al resto mediante señas. Dani cogió a Ariel y entró en el Hummer agachándose con la pequeña. No sabía que había ocurrido con Daryl, había visto a su madre, Carol y los niños ocultarse bajo unos coches, pero al resto no le había dado tiempo.
Cuando pasaron todos Dani se bajo del coche, después de comprobar que era seguro bajo a la niña indicándole que no hiciera ruido y fue en busca de Daryl. Vio a su madre que abrazaba a una llorosa Carol.
- ¿Qué ha pasado?
- Sofía – dijo su madre – Se asustó y salió corriendo hacía el bosque.
- Cielos ¿Cuidarás de Ariel? Iré a buscarla.
- Ya han ido tu padre y Daryl cariño. Mejor quédate aquí.
- De acuerdo – dijo la joven aliviada al saber que Daryl estaba bien – Voy a seguir buscando en los coches. Tú quédate con Carol mamá.
Dani dejó a la niña con su madre y fue a buscar algo que les pudiera servir en los coches, necesitaba estar distraída. Al caer la noche su padre y Daryl volvieron. Al principio habían encontrado a Sofía pero se acercaban caminantes, la habían ocultado entre los matorrales y habían intentado alejar a los caminantes de allí, cuando volvieron a por la niña vieron que no estaba, la habían estado buscando hasta que había oscurecido, ahora mismo no podían seguir buscando, lo único que lograrían sería perderse y no encontrarían ningún rastro de la niña. Por la mañana seguirían con la búsqueda. Glenn dijo que el haría la primera guardia sobre la caravana.
Por la mañana se organizaron y fueron en busca de la niña, para desesperación de Carol y del grupo no encontraron ningún rastro de la niña. Encontraron una iglesia abandonada, pero tampoco, solo había un grupo de caminantes dentro con los que acabaron sin dificultad. Para cubrir más terreno decidieron dividirse en dos grupos, Rick, Shane y Carl, que quería buscar a su amiga, fueron una dirección. Daryl, Lori, Andrea, Carol y Dani fueron en la otra. Rick le dio un arma a Lori, Andrea quiso que le dieran otra pero se negaron, la mujer aún no manejaba las armas y no creían que fuera seguro que tuviera uno, cuando comenzó a quejarse Daryl le pasó su automática y le pidió que la montara y desmontara, Andrea dijo que no podía, Daryl le contestó que cuando pudiera hacerlo sin dudar sería el primero en darle un arma, hasta entonces tendría que conformarse con el cuchillo, sería más seguro para ella y el resto del grupo.
