01.

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| 16 años  |

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— ¡Hey, shinso! ¿Quieres ir a ver una película?

— Está bien.

El transferido chico no necesitaba amigos y mucho menos distracciones, pero el eléctrico joven era igual a un sol y nadie podría evitarlo cuando sonreía de esa manera.

—¿Quieres ir a tomar helado, bebé?

—Claro, tú pagas.

Y cuando pudieron darse cuenta ya era muy tarde, Shinso y Kaminari se volvieron unidos e incluso jugaban a estar en una relación y llamarse por apodos cariñosos.

— ¿Quieres ir al cine, cariño?

—  Sabía que no te resistirías a mis encantos.

Los mejores amigos también se coquetean ¿Cierto?

— ¿Tuviste una pesadilla? ¿Quieres venir a dormir conmigo, Denki?

— Gracias por cuidarme, toshi.

Los mejores amigos duermen juntos ¿Ciertos?

— ¿Es una cita?

— Todas lo son.

Los mejores amigos salen juntos todo el tiempo para reforzar la amistad ¿No?

— No deberías enamorarte de mí, cariño.

— Hay un límite para todo, aún no excedo el mío.

Porque los mejores amigos no se tratan de esa forma, sin embargo a Denki no le importo cuando sus sentimientos comenzaron a mezclarse por que eran sutilmente correspondidos o eso quería creer.

El morado y dorado siempre fueron una buena combinación.


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| 18 años |

 

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Él eligió quererlo y asumir las consecuencias.

Eligió que sea él quién llene sus días de sonrisas, eligió temblar por él, con él.

Eligió su voz, eligió conservar momentos que dejaron huellas en él.

Eligió sacarse la coraza, obedecer impulsos y volar sin protección.

Eligió arriesgarse.

Lo eligió a él.

Su tonto corazón lo eligió y no pudo hacer nada al respecto.

El no pidió sentirse así, él se fue metiendo poco a poco y ahora no sabía que hacer.

Con la necesidad de pensarlo, sentirlo y de amarlo.

Por qué ellos eran amigos, pero de vez en cuando sus corazones se aceleraban, los amores pueden ser secretos pero los ojos no pueden brillar si no hay alguien detrás.

Shinso ¿Podemos hablar?

Kaminari, necesito hablar contigo.

Los ojos dorados brillaron mientras asentía, el de hebras moradas ignoro el hecho de su corazón latiendo muy rápido al sincronizar sus preguntas y afirmaciones.

18.  | ShinkamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora