Sakura-Harem [One-Shot]🔞

Eras tú [GaaSaku]

Sakura

Me estoy muriendo del aburrimiento, todos lucen felices en este lugar y yo solo puedo empinarme las copas de champán una tras otra.

Ojalá estar borracha.

La novia y el novio bailan en la pista de baile frente al océano y el atardecer los hace ver muy enamorados.

Es un trago amargo para mi, que alguna vez soñé con eso, pero a mi la vida no me sonríe desde que me di cuenta de la infidelidad de mi ex novio.

El muy imbecil creyó que después de comprometerse conmigo lo iba a perdonar. Que se pudra él y su nueva "prometida".

Espero que se le rompa el papel de baño cuando tenga diarrea.

Ya estoy divagando estupideces.

Veo la hora en mi celular y aún es temprano, falta mucho para que esto se acabe.

Pido otra copa en la barra y el vestido me esta picando la espalda.

—Carajo —susurro queriendo frotar mi espalda pero no puedo.

Esto es increíble.

—¿Necesitas ayuda? —pregunta un chico.

—Me dio comezón en la espalda pero no sé que es ¿puedes...?.

—Oh si, claro —musita —tenías una especie de pétalo en tu vestido, creo que ese es el problema.

—Gracias —me giro al fin y me doy cuenta que el chico es pelirojo y ojos claros.

Que atractivo es.

Al parecer es un mesero.

—Fue un placer.

—Me ayudaste mucho, yo sola no podía, y aún con mis uñas largas era imposible —digo, resoplo un poco.

—Por suerte encontraste al chico de los favores, y tú estabas necesitando ayuda. —sube y baja sus hombros.

Me río y él también sonríe.

—Excelente servicio, chico de los favores especiales. —musito.

—O puedes llamarme Gaara, como gustes está bien. —explica.

—Soy Sakura, pero también puedes llamarme la chica alcohólica, aunque no lo soy. —resoplo haciendo una pequeña mueca.

—Creo que no, no lo eres. Solo estás tomando para olvidarte de algo o de alguien y el ambiente de este lugar te inspira a querer hacerlo. —se encoge de hombros.

—¿Como supones eso?. —indago curiosa.

—Pues... te ves como una chica refinada, alguien que no toma por diversión. Entonces ¿una boda y alcohol? Es un poco lógico.

—Sorprendente. —murmuro entre cerrando los ojos.

—Si, me lo han dicho.

El chico se sienta a mi lado y me pongo un poco más relajada.

—¿No te molestaran por estar aquí?.

—Mi turno ya terminó, trabajé en ordenar todo éste lugar —comenta.

—Guau, tienes talento. —digo mirando a mi alrededor.

—Puede que si. —farfulla. —fue un poco trabajoso pero se logró hacer realidad los sueños de la chica.

—Te agradezco eso. —digo y él sonríe asintiendo.

La pista de baile da libre acceso para que las demás personas bailen y las miro con un poco de envidia, ya que son parejas las que se acercan a danzar la melodía suave que esta sonando.