𝟎𝟖/ ¿𝑴𝒊𝒏𝒋𝒆𝒐𝒏𝒈?

3.9K 510 193
                                    

✧༺❄༻✧

Karina entró a su departamento, haciendo silencio al notar que no había ninguna luz encendida, que no se escuchaba ningún ruido.

Miró hacia la cocina para encontrar todo tal como lo había dejado, en la mesa del comedor no había rastro de que alguien la había utilizado.

El lugar estaba tranquilo, demasiado.

- ¿Minjeong? --llamó la peliazul, en su pecho, la idea de que se la habían llevado, de que la habían encontrado, creció y se convirtió en miedo--

Arrojó el bolso de la universidad al suelo, lanzando las llaves a la mesa, mientras un 'No' murmurando se repetía en sus labios.

Entró a su cuarto, para, de nuevo encontrar todo tal como lo había dejado, al menos los primeros segundos, hasta notar las sábanas desordenadas y el bulto que de escondía bajo estas.

-Minjeong... --se acercó a paso acelerado a la cama, levantando las sábanas con brusquedad--

El olor a tristeza y melancolía, que tapaba el olor propio de la chica, la golpeó como si fuera una cachetada.

La Omega se irguió en la cama para intentar tomar las sábanas, pero Karina las arrojó al suelo al ver lo que quería.

- ¡Minjeong! ¿Qué...? ¿Haz hecho un nido?

La Omega no contestó, sin siquiera mirarla, se volvió a girar para volver abrazar la almohada, dándole la espalda mientras escondía el rostro en la misma.

-Minjeong yo...

Karina esperaba que la otra dijera algo, no sabía cómo reaccionar.

Dentro de su pecho, su loba estaba preocupada.

De nuevo, se dió cuenta de cómo Winter podía hacer volver su subconsciente animal.

Ella no sabía cómo actuar, y su loba interior le pedía tomar el control.

Decidiendo hacerle caso a su loba, por primera vez en mucho tiempo, tomó a Winter por la cintura, alzandola un poco a tiempo que este soltaba la almohada para forcejear con ella para que la liberara.

Karina se sentó en la cama, haciendo que Winter se acomodara sobre sus piernas. Quedando frente a frente, Karina acomodó a la Omega para que este apoyara el rostro en su pecho, y ella llevara los labios entre el cuello y el hombro de la menor, en lugar donde, algún día, habría una marca de mordida.

Aún con el collar entre medio, el gesto logró calmar a Winter, era un punto bastante sensible para los Omegas, donde se conectaba más, de una forma física, a su lobo interior.

Y Karina lo había aprendido con el libro de cómo tratar Omegas que creía casi inútil.

A pesar de que tenía lo que quería, Winter no quería disfrutarlo, no quería conformarse con la idea de que eso era sólo momentáneo, y que dentro de un rato, Karina volvería a ser la idiota que la había lastimado horas antes.

Aunque su loba se sintió un poco más consolada.

-Lo siento, Minjeong --dijo Karina, apenas despegando los labios de donde estaba--, como siempre, hago las cosas mal.

Winter no dijo nada.

-Lo único que hice bien fue llevarme una cachorra asustada de un callejón mugriento.

El comentario logró sacar una sonrisa en Winter.

Karina acarició los cabellos, de ese color rubio cálido, de la Omega, notando que estos estaban algo grasosos.

𝗗𝗲𝗹𝘁𝗮 | 𝘄𝗶𝗻𝗿𝗶𝗻𝗮 𝗴!𝗽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora