Capítulo 21

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Micaela

-Toma cuñadita, vas a ser mi cuñadita porque estas chiquita - dijo riendo y estirando el bote de gomitas

-Que terrible chiste- dije riendo - Pero entonces tú vas a ser mi cuñadote porque estas muy grande

-Como disculpa por mi terrible chiste toma - me dió el bote

-Lo acepto como ofrenda, gracias

-De nada - me sonrió y abrió las puertas del auto con el control

De entrada nos recibió la fragancia de Fabby que estaba impregnada en el carro, es muy fuerte pero sin ser demasiado como esas que son desagradables por el olor tan concentrado, más bien está es dulce. El conductor encendió el carro y nos dirigimos a su casa. En el camino disfrutábamos el sabor de las ricas gomitas de manitas color rosa con azucar, sabor a fresa con cereza.

-Ya te has ganado a la cuñada - reí - Te ganaste que le ruegue a mi hermana que te contacte muy pronto, a nadie le ruego pero por ti lo haré

-Gracias cuñadita - me miró divertido mientras masticaba una gomita

Cuando llegamos bajamos del auto y con nosotros las cosas que compramos, unos chicos estaban afuera fumando y entre ellos estaba Javier con su cerveza en mano y el cigarro en la otra, ver cómo salía el humo de sus labios provocó que se me antojara uno.

-Chicos ¿en dónde estaban? - pregunto cuando estábamos enfrente de él

-Fuimos al super

-¿Qué traes ahí? - señaló el bote

-Gomitas, ¿quiéres?

-Claro - tomo una

-Agarra más - dije ofreciéndole a los otros chicos pero ellos no quisieron

-Nunca las había probado, están muy buenas - tomo un puñito

-Mucho - dije comiendo una y viendo el cigarro

-¿Quieres? - pregunto estirandome su cigarro

-Si - lo tome

-¿Fumas? - Fabby me miro

-Si, ya sé - le dí una calada sintiendo como la ansiedad de mi cuerpo bajaba - Mal hábito

-Muy malo pero no lo puedo dejar - coincidió Javier

-Ni yo, llevo meses diciendo que ya no lo haría - reí con él

Seguimos haciendo comentarios de ese tipo mientras el cigarro se consumía

-Voy a allá adentro ¿vienes?

-Ahorita los alcanzo - Javi tiro la colilla

-Esta bien - dijimos y entramos a la casa

Fiumos al patio directamente, pusimos la botana en la mesa y nos sentamos con los chicos a platicar.

-Ya llegue - le dije a Alejo al oído

-Se tardaron - me agarró de la mano

-Es que compramos muchas cosas - entrelase nuestros dedos

-Cuñadita mira - Fabián me dió su teléfono y en la pantalla estaba el número de mi hermana

-Te dije que te iba a contactar rápido - le di el celular

-Fue más rápido de lo que pensé

-Sabia que no se iba a quedar con la duda de si eras tú - tome la mano de Alejo

-¿De qué me perdí? - pregunto Bastián

-Te acuerdas lo que hace rato te dije, de Micaela, el beso y todo eso - Fabián respondió, su comentario fuera de contexto suena mal

Cuando dijo eso sentí la mano de Alejo ponerse dura y su mirada se clavo en mí.

-¿Qué? - pregunto Antuhan sorprendido

-En mis recuerdos me había besado con Micaela

-¿Cómo que en tus recuerdos, Fabián? - Alejo lo miró serio

-O sea no era ella pero si paso

-Solo los está confundiendo - hable y todas las miradas se centraron en mí - Hace muchos años sucedió una ¿Situación? Con mi hermana y Fabián en una fiesta

-Con situación te refieres a que se besaron - Bastián afirmó mis palabras

-Si, según Fabián soy muy parecida a mi hermana y por eso pensaba que era yo, pero ya le conté lo que hace años me dijo mi hermana y coincide con su historia - la mano de Alejo regreso a su estado normal

-Ya me había asustado - dijo Alejo desde luego me puse roja

-Nos tienen que contar eso - Antuhan frunció el seño

-Les contamos ahorita por ya tengo mucha hambre - dijo Fabby se sobó la barriga

-Necesito una explicación - Alejo rió nervioso

Empezaron a repartir los tacos, que por cierto estaban muy ricos, los disfrutamos en medio de una plática divertida por la confusión de hace unos minutos. Terminamos de comer y propusieron jugar fifa, los chicos pusieron una pantalla en el patio para que lo pudieramos ver todos.

Alejo y yo estabamos sentados en unos cojines muy grandes sobre el pasto viendo el partido, comíamos alegremente las gomitas que Fabián me obsequio, Alejo me daba gomitas en la boca al igual que yo a él y eso nos causaba gracia porque parecíamos la pareja de película super cliché.

Cada vez que hacían una falta o fallaban un gol los chicos hacían ruidos extraños que me asustaban pero a la vez me hacian reír. Cuando metieron el primer gol festejamos como locos, claro los que apoyamos a Bastián, porque los que seguían a Iván no les parecía la idea de ir perdiendo, ya cuando metiron el segundo estabamos mucho más felices. Al final del partido todos nos mordiamos las uñas pues ya eran los penales, el primero lo fallaron los dos equipos pero el segundo Ivan lo metió lo cual le dio la victoria.

(...)

Ya todos se habían ido solo quedabamos Bastián, Fabián, Javi, Antuhan, Isra, Ivan, Karol, Alejo y yo.
Sacamos unas cobijas, algunas las pusimos en el pasto y con otras nos tapamos porque la noche comenzaba a sentirse fría pero nos negabamos a meternos a la casa. Estabamos acostados de esta forma Ivan, Karol, Antuhan, Javi, Alejo, yo, Bastián y Fabby. Todos contaban alguna patoaventura sobre algún concierto, cuando eran niños, en alguna cita, había diversidad de historias graciosas por parte de todos.

Yo les conte que una vez cuando fui a un concierto llegue a VIP estando en la zona más lejana de todas, literal los veía como unas micropersonitas, logre escabuirme de los guardias y llegue a VIP, al momento de pasar al M&G, les dije que se me había caído mi pase en la entrada, y me dejaron pasar, realmente fue una aventura muy loca.

Estuvimos mucho tiempo contando historias y riendo. Isra, Fabby, Anthu, Karol y Javier perdieron la batalla y se quedaron dormidos. Yo estaba apunto de perderla pero Bastián me hacia muchas preguntas.

-Aquí entre nosostros, ¿qué tal ya sabes, lo hace Alejo? - dijo Bastián viendome a los ojos, reí ante su pregunta que provocó que los colores se me subieran al rostro

-Callate wey - Alejo rió y le intento dar un manotazo

-No lo se - conteste rápidamente y la verdad

-Ya dime se va a quedar entre nosostros - insistió en un susurro

-Es que es verdad, estaba muy ebria para recordarlo

-Alejo conejo, cuentanos que paso esa noche - Bastián lo molestó

-No te voy a contar algo de sexo si me dices conejo - rió el mencionado

Tropezando con el destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora