Mi esposo tonto no se quiere divorciar.

9_ Un hombre, extremadamente delgado

La doncella asintió tímidamente con la cabeza y miró al príncipe consorte, que estaba parado no muy lejos de ellos, las comisuras de sus labios estaban ligeramente levantadas, esto hizo que su corazón se enfriara.

Ella sentía como si el príncipe consorte hiciera todo esto a propósito...

La distancia entre ellos era bastante corta, por lo que Yan Ke, naturalmente, podía escuchar las palabras que Meng You estaba gritando, basado en su reacción, su Señor... realmente no podía "estar de pie".

Si no, ¿por qué otra razón tendría una reacción tan explosiva cada vez que se menciona la "consumación del matrimonio"?

....

Meng Yu fue provocado con éxito por Yan Ke, y tan pronto como salió por la puerta principal de su residencia, fue convocado al palacio del Emperador.

Mientras caminaba por el palacio, rodeado por las murallas de este, Meng Yu reflexionó sobre la razón por la que su padre lo había convocado.

A pesar de que estaban aliados con el reino Chu por matrimonio, todos sabían que el reino Chu seguía albergando malas intenciones contra su reino. Incluso el reino vecino de Ming, que originalmente era su vasallo, se volvió inquieto desde que se concretó la alianza y comenzó a crear problemas en sus fronteras.

Meng Yu se inclinó y dio sus saludos, -Padre Imperial.

El emperador lo ayudó a levantarse. -¿Sabes por qué este Emperador te ha pedido que vengas aquí?

-He adivinado algunas de las razones.

-El reino de Ming se ha rebelado.

Meng Yu se rió, -Habría sucedido tarde o temprano, ese grupo de bufones estaba esperando la oportunidad de saltar de nuestro barco, probablemente fueron incitados por el reino Chu. Pero eso no importa, incluso si Chu tiene demasiados soldados inactivos como para prestarle al reino Ming, estos soldados probablemente sean jóvenes e inexpertos, no tenemos nada que temer.

El Emperador suspiró, -Entiendo de lo que estás hablando, pero es precisamente por el apoyo del reino Chu que es tan difícil lidiar con la situación. Te acabas de casar con el príncipe heredero del reino Chu, si vas en su contra, ¿qué pensarán los otros reinos?

Meng Yu negó con la cabeza, -¿Por qué el Padre imperial tiene consideración por el reino Chu? Simplemente estamos defendiendo nuestro reino al atacar al rebelde estado vasallo, el reino Ming. El reino Chu es nuestro aliado, por lo que naturalmente, no irán contra nosotros.

Meng Yu sonrió y sus ojos brillaron intensamente.

Ya lo dijo antes, incluso si el reino Chu prestara soldados al reino Ming, solo podrían hacerlo en secreto. Y si era un trato oculto, ¡¿Cómo lo sabrían?! Todo lo que sabían era que el reino Ming se había rebelado, simplemente reprimieron la rebelión, no iban contra el reino Chu.

El emperador escuchó las palabras de Meng Yu y se rió mientras descendía de su trono y palmeaba a su hijo en el hombro. -¡Realmente has crecido!

-No es bueno enviarte al campo de batalla tan pronto después de tu boda, pero solo tú puedes hacerlo.

Los labios de Meng Yu se curvaron en una sonrisa.

-Me atrevo a preguntarle al Padre Imperial, ¿Qué otra cosa podría aumentar aún más la moral de las tropas que el hecho de que el príncipe heredero vaya a la guerra tan pronto después de su matrimonio?

El emperador también se rió, desde hace mucho tiempo que podía ver el talento militar de Meng Yu. Estaba bien versado tanto en artes literarias como en artes marciales, además de que era valiente e ingenioso.