Tu alma gemela soy yo

VIII. Después de la tormenta...

Los días empiezan a pasar, después las semanas y Valentina siente que las cosas van bien.

La gente la mira, porque la gente siempre lo va a hacer. Intenta no prestar atención y trata de llevar sus días lo más tranquilos posible.

Es la chica nueva, por lo que no es sorpresa que llame la atención. Y para finales de la primera semana ya tiene al menos 5 invitaciones a salir. Ella los rechaza muy cortésmente y esta consciente de que ese tinte provoca que esté en la mira.

- Deberías de decirles que eres gay. Le dice una voz justo después de rechazar a otro chico, voltea y se encuentra con una chica morena alta, con playera del equipo de natación, que esta parada junto a ella. - Yo lo hice.

Valentina la mira por un momento.

- ¿Y te funcionó?

La morena resopla - No, no funcionó.

Valentina sonríe - Tratando de obtener información ¿verdad?

- Me intrigas. Responde levantándose de hombros.

- ¿Yo?

- Tal vez sea el cabello.

Valentina sonríe ampliamente.

- Es nuevo.

- Se nota.

Valentina guarda sus libros en su casillero y deja preparados los que va a necesitar después del almuerzo. Siempre a sido una estudiante ejemplar y a pesar de lo difícil que ha sido este ultimo año, ha logrado mantener sus buenas notas.

La chica no se ha movido de a lado de Valentina, esta la mira de reojo sintiéndose un poco intimidada.

- ¿Hay algo en particular que quieres saber?

- Podemos empezar por tu nombre.

- Vaya, es una sorpresa que no lo sepas todavía.

- ¿Me lo vas a decir?

- ¿Tu me lo vas a decir?

- Nayeli Arellano.

- Valentina Carvajal.

Nayeli sonríe y Valentina no sabe como interpretarlo. Esta chica la esta haciendo sentir incomoda y cree necesario decir algo para que sepa exactamente como son las cosas.

- No estoy disponible. Le aclara Valentina.

- Si me queda claro. Dice la chica con una sonrisa triste. - Teóricamente yo tampoco, es complicado. No se bien que onda.

Valentina la mira empáticamente, y puede ver claramente el dolor que expresan los ojos de la chica.

- ¿Mala experiencia?

- Todas lo son ¿No?

Valentina entiende de malas experiencias, probablemente mejor que muchos, pero no conoce para nada a esta chica, así que no piensa contar sus secretos más profundos cuando ni siquiera logra hablarlos bien con Juliana.

- Siéntate con nosotros en la cafetería.

- ¿Nosotros?

- Conmigo y mi... par... amiga. Dice un poco incomoda. - Ha estado preguntando mucho por ti.

Valentina piensa detenidamente si aceptar o no, y finalmente acepta. Algo de esta chica le intriga, no sabe exactamente que, pero sabe que es importante, sea lo que sea.