One Piece: Relatos de la Banda [Genderbender]

Verde es el color del amor

¿Por qué sentirme vulnerable?
Al defender lo que es amar
Como explicar lo inexplicable
Confundimos la ilusión con la razón

🍀

-Comprendo bien quién es el enemigo de Robin...-exclamó la Capitana de los Piratas de Sombrero de Paja mientras sus cabellos danzaban en el viento-Sogequeen.

-¿Hmm?

-Quiero que quemes...esa bandera.

-¡Entendido!-respondió la heroína preparando su arma-¡Ahora serán testigos del gran poder de mi nueva arma Kabuto! Hissat Fire Bird's Star.

El chillido de un fénix en el aire resonó en el lugar y voló hacia la cima de la Torre, estrellándose contra la bandera del Gobierno Mundial, la cual, ardió en llamas ante las exclamaciones de asombro de todos.

-¡No puedo creerlo!

-¡Esos piratas quemaron la bandera!

-¿Saben acaso lo que eso significa?

Los ojos de Robin se llenaron de lágrimas y sus labios temblaron mientras apretaba los dientes en un intento por contener el llanto. Su frío corazón no pudo evitar derretirse ante las acciones de la mujer que lo había recibido sin reproche ni resentimiento alguno en su barco.

"Luffyko".

Desvió la mirada de la ardiente bandera del Gobierno Mundial y la posó en la tripulación que se encaraba sin temor con el CP9, observando por unos intantes a la aludida antes de mirar hacia la Vicecapitan del Going Merry.

La espadachina también lo miró y se perdió por unos instantes en esos fieros ojos que decían que iría al fin del mundo si su Capitana se lo pidiera. Esa mirada tan propia de una Vicecapitan, de una mujer oprimida por los hombres, de una espadachina cuya ambisión va a romper con todos los esquemas de debilidad que caracterizan a las de su género.

Esa mirada que tanto lo cautivaba.

-¡WAAAA! ¡¿Qué creen que están haciendo?! ¡No pueden declararle la guerra a todo el mundo!-gritó a su lado el molesto líder del CP9.

No, definitivamente no podían. Era imposible. Un suicidio en toda la extención de la palabra. Pero, ¿cuándo eso ha detenido a la futura Reina Pirata? ¿O la próxima mejor espadachina del mundo? ¿O a la valiente guerrera del mar? ¿A la cocinera que descubrirá el All Blue? ¿A la doctora que curará todas las enfermedades? ¿Al navegante que dibujará el mapa del mundo?

Los sueños de cada uno de ellos eran tan grandes como el de la mujer que eligieron seguir al mar, y su voluntad y determinación también lo eran.

-¡¡QUIERES APOSTAR!!

-¡HI!

Jadeó a punto de comenzar a sollozar al escuchar la respuesta de su Capitana, aquella testaruda y egoísta chica de goma que no entiende un "abandono la banda" por respuesta.

-¡Robin!-gritó Luffi llamando su atención-¡Aún no lo he escuchado de tus labios!

El ceño de toda su tripulación se frunció y sus cuerpos se tensaron, adivinando exactamente lo que su Capitana iba a decir.