Se trata de un AU en el que nuestros jóvenes eves trabajan a tiempo omóplato en un restaurante, en el que casualmente 1 día, nuestro grupo favorito de hermanos de animan a entrar al local, sin saber que su vida se volvería más intrigante desde ese...
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Antes de iniciar, quiero agradecer a quienes aún leen este libro, gracias por esperarme y perdón por ser tan lenta para actualizar. A cambio les deje un cap muy pero muy largo y creo que ya solo está a 1 o 2 capítulos de terminar.
Eran aproximadamente las 2am en aquella gran mansión, y una persona aún se encontraba ahí cuando de repente dos personas bajaron corriendo preocupados por si realmente la persona que imaginaban estaba ahí... y no habían fallado... El señor Kou se encontraba sentado con el rostro cubierto de pastel, mientras parecía cortar lo que quedaba en pequeños trozos para luego servirse en un plato.
—Kou permanecía pensativo mientras miraba directamente hacia su plato de pastel—Sí que soy estúpido, si ya está en mi rostro por que no solo lo comí con una cuchara en lugar de servirme en un plato.— Volvió a razonar aquello pero al final solo pensó "Al diablo con esto" para finalmente dejar de lado su cuchara y comer directamente de la bandeja del pastel.
Luego de presenciar aquello, tanto Ildio como Niccoló terminaron sintiéndose culpables. Esto era algo lamentable de ver, al menos desde sus puntos de vista.
—¿K-Kou-San?—tartamudeo Niccoló acercándose de a poco, nunca espero encontrarlo de ese modo pese a que era un posible escenario.
—Kou volteó confundido al reconocer la voz de Niccoló, mirándolos con algo de confusión —Creí que ya estaban durmiendo.—dijo casi sin tomarle importancia mientras se limpiaba un poco del exceso de pastel que tenía en el rostro.
Al verlo directamente a los ojos ambos pudieron sentir como la culpa los abrumaba, pues ellos fueron dos los pocos que recibieron un recordatorio por parte del mismo Kou y aún así no lo habían recordado.
—Niccoló sentía ganas de llorar por aquello, posiblemente era la sensibilidad natural o tal vez era a causa de su situación pero de igual manera no pudo contenerse y al final corrió hasta él y le dio un abrazó disculpándose por lo que había pasado— ¡Lo siento! ¡Enserio lo siento! ¡Me lo recordó a mi y aún así ni siquiera le entendí! ¡Realmente no sabe cuánto lo siento!
Después de aquello y aunque Kou lo miraba algo sorprendido por su repentina acción, realmente no le reclamo a Niccoló, simplemente se limpio el rostro y lo miro con una sonrisa que podía transmitir calma.
—Finalmente le dio algunas caricias en la cabeza dejando que se calmara de a poco— Tranquilo. No estoy molesto contigo. No es un deber para ti recordar estas fechas.
—¡Pero sí es mi deber desde que me uní a su familia!— recordó Niccoló elevando un poco su tono de voz.
—Bueno, yo considero que el solo hecho de que estés llevando a mi nieto, ya es un regalo muy bueno para mi. Sé que es una carga muy pesada y aún así aceptas cargar con eso. Creo que es lo único que necesito para ser feliz—aclaro calmadamente, realmente no había ni una pizca de molestia hacia Niccoló.
