04

158 34 26
                                    

Recordé el funeral.

Estaban todos. Todos llorandote.

Yo estaba lejos.

No quería ver como Sebastian y Mary lloraban. Eso me recordaba que habían perdido a otro hijo.

Estaba soleado. El sol brillaba en lo alto, como si el día fuera perfecto. No llovió.

No llovió por días. Y estábamos en invierno.

Me acerque antes de que te hicieran descender.

Te veías tan hermoso como siempre. Pero había un cambio. No tenías vida.

Las lágrimas bajaron por mis mejillas y no lo soporté más. Caí al suelo, rota, llamando la atención de todos.

Volví a ver esa mirada de lástima. Odiaba que me miraran así.

Y odiaba aún más ver que tú no estabas ahí para sonreírme y pedir que fuéramos amigos.

Odié aún más que no te levantaras y dijeras que todo era una broma.

Odiaba que realmente estuvieras muerto. Lo odiaba. Demonios, lo odio.

Esperaba que todo fuera mentira.

Aún lo espero.

Sin embargo, sé que fue real.

Porque luego del accidente, tuve que ver tu cuerpo en la morgue. Y, mi amor, jamás pensé que tendría que hacer eso.

La vida fue injusta en muchos sentidos. Y la muerte se robó lo que mas amaba.

Cartas a ti (Anne x Gilbert)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora