22

232 34 73
                                    

Diana, Moody y Cole vinieron a verme.

No quería abrirles porque estaba en la cama, en pijama, a pesar de que eran las cuatro de la tarde. Y a ellos no les importó.

Se metieron por la ventana.

Y Cole me tomó en sus brazos para acostarme en el sillón mientras yo entrecerraba mis ojos.

"Te tenemos una sorpresa", dijo Diana, sentándose a mi lado y entregándome un vaso que tenía té.

Moody encendió la televisión y conectó su teléfono. Cole y él se sentaron en el suelo, sonriendome.

"Lo encontramos el otro día", murmuró Moody, casi luciendo apenado. "Gilbert envío el video a mi correo y yo no lo sabía. O si lo sabía, pero lo olvidé. El punto es que, lo trajimos para que lo vieras".

"No sabíamos si querrías verlo", habló Cole, tomando mi mano entre las suyas. "Estabas demasiado triste y temíamos que este video hiciera doler mucho más tu corazón. Pero Gilbert hubiera querido que lo vieras".

Diana me hizo tomar un poco de té antes de que el video apareciera en pantalla.

Estabas tú, pero te veías un poco cansado. Tenías ojeras y pasaste tu mano por tu rostro una y otra vez, como si quisieras mantenerte despierto.

"Creo que tengo miedo", empezaste, suspirando fuertemente. Bajaste tu mirada. "Tengo miedo de que ella se de cuenta de que no soy lo que merece. Es tan buena, es tan amable, es tan perfecta... Sigo preguntándome la razón por la que me ama", ahora, el escenario cambió. La cámara me apuntaba a mi, y yo estaba sentada en el sillón, comiendo helado y viendo uno de mis realities. Miré hacia Gilbert y le sonreí, gritando un «¡Oye! ¡No me grabeeees!». "Entonces recuerdo esa sonrisa que me da a mi, solo a mi y a nadie más. Entiendo que el amor no ve cosas buenas y malas, solo ve como somos. Un gris. No soy perfecto, ni ella lo es (aunque se acerque demasiado a la perfección, eh), pero soy afortunado por tenerla en mi vida. Desde pequeños, cuando llegó a la escuela. Se veía tan triste... Tan infeliz. Ese día, me propuse hacerla reír tanto, que no recordaría la tristeza". Gilbert volvió a aparecer, pero ahora parecía descansado, bien. "Si alguien me preguntara que es lo mas hermoso de mi vida, la nombraría a ella. Y, espero mostrarle este video cuando seamos ancianos y tengamos muchos hijitos. Así que, Moody, estás condenando a cargar con esta dosis de dulzura hasta que seamos viejo. ¡Que no se te ocurra borrarlo o perder tu correo! Y, corte. ¡TE AMO ANNE! ".

Respiré entrecortadamente. Las lágrimas ya se habían hecho presentes. Tenía los ojos de los tres mirándome.

Sonreí. "Yo también te amo, Gilbert", dije, secando mis lágrimas.

Fue la primera sonrisa luego de tres meses y tres semanas. Incluso sin estar aquí, seguías haciéndome reír.

Las personas como tú jamás mueren, amor mío. Se convierten en parte de todo y añaden luz a la vida de nosotros, ayudándonos a sonreír y a ser felices incluso en su ausencia.

Con cada palabra, cada suspiro, cada sonrisa, cada toque y cada caricia, me hiciste mas feliz de lo que fui alguna vez.

Eras, eres y serás, por siempre.

Aunque sé que me va a doler, me va a quebrantar, me va a costar, me va a hacer gritar, lograré vivir con esto. Lograré vivir con tu recuerdo.

Y haré lo posible por nunca dejar de sonreír. Por ti. Voy a vivir por tu vida y la mía, esperando que desde donde estés, te sientas orgulloso.

No nos casamos, no, pero nuestra unión fue más profunda que una tradición creada por la humanidad.

Lo nuestro era divino, hermoso y casi celestial.

Te amo Gilbert, y siempre lo haré.

Ahora viviré para cumplir esas esperanzas y sueños que creí rotos.

Con todo mi amor, ahora dejo de escribir. Recuerda que estas siempre fueron y siempre serán, cartas a ti.

FIN

***

Tenía muchos finales. Y me decidí por este. Espero que les haya gustado. 💜
LES AMO MUCHO💙🌼
–Lux🌠

Cartas a ti (Anne x Gilbert)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora