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Parte 7

Hacia rato que se había tirado en el sillón para dormir, Sol y los pequeños ya lo habían hecho, fue a comprobar y la imagen de los tres durmiendo en su cama fue el mejor regalo visual que ha tenido nunca.
Recordarlo le hacia sonreír ante tanta suerte de tenerlos en su vida.
Lo más interesante fue esos pequeños momentos de intimidad que compartió con su Sol, el sonrojo en sus mejillas y el deseo en sus ojos es la combinación perfecta.
En algún momento de sus cavilaciones se quedó dormido. Así se encontraba cuando escucho el grito suave de su Sol, su cuerpo en alerta no tardo nada en llegar a la habitación en el momento que escuchaba el llanto de sus cachorros.
-¿Qué sucede? Expresé en el mismo instante en que enciendo la lámpara de noche.
-Una pesadilla, lo siento. Me dice mientras acuna a Samuel para calmarlo.
Camino al otro lado de la cama y tomo a Roma que no para de llorar.
-shsss shsss, tranquila cariño, todo está bien. Hablo suavemente para que Roma se calme.
Miro a Sol y su cara todavía se muestra preocupada.
-¿Quieres hablar de ello? Le pregunto al ver qué trata de calmarse y no lo logra.
-Solo fue una continuación de lo que sucedió, pero sin su ayuda, esas personas lastimaban a Roma y Samuel. No fue nada agradable porque no podía hacer nada. Su expresión es sería y puedo ver qué no solo grito, sino que también hay lágrimas en su rostro.
-Solo fue un mal sueño, sería raro que no lo hubieras tenido con todo lo que pasó ayer. Trató de hacerla sentir mejor.
-Lo se, solo que me dejó tensa y al despertar no caía en la cuenta de que era un mal sueño. Necesitan volver a comer, suelen tomar una leche antes del amanecer.
-Voy a prepararlas. Lo digo mientras dejo a una calmada Roma.
-Gracias. Escucho mientras salgo de la habitación. Su voz ya se escucha más tranquila.
Preparar las mamaderas me toma el tiempo necesario para volver con ellos.
Como una especie de ritual cada uno alimenta a uno de los niños, la diferencia es que estoy del otro lado de la cama alimentando a Roma y esto no parece importarle a Sol.
Aunque está concentrada en Samuel su mirada está distante. No digo nada, no quiero interrumpir sus pensamientos.
-Volverán a dormir, siempre lo hacen. Escucho que habla de pronto y la miró, su cara muestra preocupación y su ceño fruncido seriedad. También veo que se muerde el labio, se que quiere decir algo.
Sonrío para que pueda hablarme con toda la confianza del mundo.
-¿Podrías quedarte hasta que me vuelva dormir? Me mira con duda.
No voy a negar que su pedido me causa sorpresa.
-Disculpa, sino quieres no hay problema. Solo que después de una pesadilla me cuesta volver a dormir, pero si se que estás aquí estaré más tranquila.
-Seria todo un honor velar por ti hasta que te duermas. Le digo con un poco de picardía para animarla, pero también siento mí pecho inflarse de arrogancia al saber que se siente protegida conmigo, no podía pedir nada más por ahora.
-Gracias una vez más, tengo una lista mental de todo lo que te debo. Me dice con una pequeña sonrisa en sus labios mientras se acomoda para dormir, se gira hacia donde estoy y sostiene la mano de Samuel.
-Pues deberías de borrarla, porque yo no siento que me debas nada. Me encanta ayudarte, en especial con estos hermosos pequeños, y en todo caso yo soy el agradecido por permitirme cuidar de ustedes. La miro a los ojos mientras acomodo a Roma para que descanse junto a su hermano y su tía.
Sol me sonríe mientras cierra sus ojos para volver a dormir.
Roma toma mí mano al girarse y acurrucarse a mí lado, el gesto me llena de alegría y no puedo evitar sonreír. Me pone feliz saber que los tres me aceptan como parte de ellos.
Ha pasado un poco más de diez minutos y se que Sol volvió a dormir profundamente, voy a incorporarme para ir al sillón y Roma se queja, la miro y abre sus ojitos, no quiere que me vaya. Sonrío ante el puchero de la cachorra, pero me acomodo en la cama y ella se acurruca a mí lado y posa su bracito intentando llegar a mí cuello, entiende que así será imposible que me vaya. Sonrío más ampliamente girando hacia ella y quedando con la hermosa visión de su tía y su hermano durmiendo de la misma forma.
No sé si Sol se molestará cuando despierte y me encuentre durmiendo con ellos, pero es un hermoso riesgo que quiero tomar. Ellos son perfectos y ser parte de esto me llena de un amor tan profundo que no permitiré salgan de mí lado jamás.
No puedo evitar estirar mí mano hacia la cara de mí Sol y acariciar su suave piel.
-Gracias a ti. Le digo en un susurro para no despertarla y ella aún dormida sonríe ante mí tacto. Esto me confirma una vez más que todo esto es lo que está bien en el mundo, en el mío al menos.
Desde mañana les demostraré lo indispensable que son para mí. Este trío no se escaparan de mis manos.
Sintiendo la suave respiración de mí familia, porque ya le pertenecían, voy adentrándome al mundo de los sueños, con tanta paz de la que jamás imaginé. confirma una vez más que todo esto es lo que está bien en el mundo, en el mío al menos.

Un nuevo capítulo para ustedes, espero le este gustando la historia.
Estoy escribiendo otra más con nuevas especies, una vez terminada está la publicaré.

Gracias por leerme ❤️