Capítulo 18: ¡Huyamos! [Parte IV]

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Bueno, que tal si regresamos al presente ahora.

Después de escapar de ese pueblo, tal y como imaginaba. Una orden de captura fue puesta sobre nosotros.

Durante los dos días que estuvimos corriendo por el bosque, Rika y yo nos aseguramos de no toparnos con nadie. Para nuestra mala suerte, las cosas no terminaron nada bien cuando estábamos pasando cerca de una ciudad.

Mientras nos movíamos entre el bosque, fuimos avistados por un grupo de aventureros. Al principio estuvieron desconcertados al vernos, pero su actitud se volvió hostil al ver a Rika. Ellos comenzaron a atacarnos sin piedad. Pensé que ambos moriríamos en ese entonces, de no ser por el manto de las sombras no habríamos podido salir de allí.

Por fin había experimentado una batalla contra humanos desde que llegue aquí. Mi impresión fue que no es sencillo. A diferencia de los monstruos que solo atacan desenfrenadamente, los humanos luchan con precaución.

No nos dieron oportunidad alguna de contraatacar. Tuvimos que retirarnos y tratar de alejarnos de la ciudad lo antes posible.

No obstante, quería evitar otro encuentro así en el futuro. Por lo cual Rika y yo planeamos asaltar a los aventureros durante la noche y ver si en sus pertenencias tuvieran algún mapa que nos sirviera.

Para nuestra mala suerte, los aventureros habían llamado refuerzos. Fuimos detectados rápidamente y obligados a huir durante toda la noche.

He aquí donde nos quedamos la última vez. Siendo perseguidos por soldados en medio del bosque.

La situación no es nada favorable para nosotros, los soldados que nos persiguen, todos y cada uno de ellos están en el Rango 2, incluso los aventureros están a ese nivel.

Los enemigos detrás de nosotros son casi veinte personas. Rika y yo tenemos dificultades para huir o escondernos. Cada vez que intentamos usar Sigilo, una flecha sale de la nada y golpea el lugar donde nos escondimos.

Lo cual me llevo a pensar que entre ellos hay alguien capaz de rastrearnos.

Con el número de enemigos por encima de nosotros y con dificultades de escondernos, lo único que nos queda es huir. Aunque siendo sincero, las cosas no han salido bien para nada. Estamos en una difícil situación.

"¡Tenemos que darnos prisa! ¡Nos están pisando los talones!"

"¡Esto es lo más rápido que puedo ir hermano!" (Rika)

Nos estaban alcanzando. Se las han arreglado para estar al nivel de nuestra velocidad.

La única manera en que Rika y yo podamos escapar es que usemos los mantos de las sombras, pero aún no se recargan desde la última vez que los usamos. Me parece extraño, antes se recargaba más rápido pero ahora está tardando más de lo normal.

"¡Los tengo!" (???)

Frente a mí, apareció un sujeto algo extraño. Su espada curva corto el lugar donde antes estaba parado. Si no fuera por mi velocidad y evasión no creo haber podido evitar ese golpe.

"Vamos, vamos Pícaro-san, muéstrame de que eres capaz" (???)

Este sujeto, está riendo.

No sé si le guste luchar o que se divierta abrumándome.

Sus habilidades con la espada son increíbles. No sé mucho sobre este tema, pero cada corte que me lanza tiene una precisión y fuerza aterradoras, me siento aliviado el poder esquivar estos ataques.

"Tch, eres muy escurridizo" (???)

"¡Oye, no pierdas de vista a la otra!" (???)

Al darse cuenta de su error, el sujeto empezó a darse la vuelta. Él había desviado toda su atención de Rika, solo estaba centrado en mí, lo cual ahora le va a costar caro.

Estoy en un mundo diferente...! Y con mi hermana!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora