𝐿𝑜𝑣𝑒 𝑖𝑛 𝐼𝑜𝑤𝑎. || 𝙢𝙖𝙩𝙞𝙖𝙨 𝙘𝙖𝙣𝙙𝙞𝙖.

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Narra T/N.
La fiesta comenzaba a las 10 p.m, al volver a casa le pregunté a mi abuela si podía ir junto con Elena y Tomás, ella les tiene una confianza increíble así que aceptó con la condición de que midiera cuanto bebía.

Ya cerca de las 10 me bañé y me puse *conjunto q tú consideres correcto para una fiesta a donde solo vas a beber gratis 😎🙏🏻*, mientras me maquillaba oí que alguien tocó la puerta, fuí a abrir y era Tomás.

- Aún no termino de maquillarme, pasa a mi cuarto y espérame -dije. Tomás no preguntó ni dijo nada y subió conmigo.

Seguía arreglándome y veía de reojo a Tomás por el espejo, se veía muy lindo con lo que traía y su perfume de hombre inundaba mi habitación (el perfume de hombre es mi debilidad, lo siento 😈)

- T/N, quisiera decirte algo...
Lo miré por mi espejo unos segundos y regresé a maquillarme.
- Dime.
- Pensé mucho en decirte esto, porque me siento bastante nervioso pero me armé de valor porque estoy decidido ahora -comenzó haciendo espacios entre palabras y terminó decidiéndolo con un tono seguro.
- La verdad es que me gustas mucho, no puedo dejar de pensar en tu sonrisa, en tu cara, en tus ojos, en tu risa... No espero que me correspondas, solo quiero que seas honesta conmigo sobre lo que sientes -.

Me detuve por un momento. Tomás era uno de mis mejores amigos y resulta que sentía algo por mi... Yo no siento lo mismo por él y tenía que ser honesta. Asi que voltee a verlo y allí estaba, sentado en la orilla de mi cama, mirándome mientras jugaba con sus dedos por los nervios.

- Tomás... Me siento halagada pero, yo no siento lo mismo... No quiero involucrarme con nadie más después de lo que me pasó en México... Yo-

Tomás se levantó y se paró en frente de mi puerta, volteo a verme y dijo "Está bien, lo entiendo y lo suponía. Gracias por escucharme... Te esperaré afuera de tu casa, si? Saldré a fumar" y salió.
Sentí un gran sentimiento de tristeza e incomodidad, pero no podía hacer nada más que ser honesta.

Cuando terminé agarré mi bolso y salí, Elena ya estaba afuera con Tomás y lo estaba abrazando. No sabía si interrumpir o esperar a que terminaran pero no era necesario, Elena se separó de él y volteó a verme.

- Ya éstas lista? Ya nos vamos -dijo Elena, yo solo asentí.

Nos subimos al auto de Tom y en el camino solo hubo silencio, simulé estar haciendo algo importante en mi teléfono para evitar ver a alguno de los dos.

Llegamos a una casa con un gran jardín, muy bonito, Tomás tardó en buscar un lugar para estacionarse pero lo encontró. Cuando entramos había mucha gente allí, no podía escuchar casi nada por la música tan alta y no sabía a donde voltear, había muchas parejas manoseándose y besándose, no tardé en incomodarme.

La música bajó un poco y un chico de cabello negro recibió a Tomás y después abrazó a Elena, luego volteó a verme a mí.

- Así que tu eres T/N? Estos dos no paran de hablar de vos -dijo mientras se reía. Me transmitía mucha confianza por alguna razón.
- Me llamo Rodrigo pero puedes decirme Rod, un gusto conocerte. -y me tomó de la mano para hacer un saludo. Le sonreí.

- Bue, quieren una cerveza o algo? -Rod se dirigió de nuevo a Tomás y Elena, no pude escuchar más de la conversación y voltee a mi alrededor. Lo ví.

Había un chico sentado en una mesa con otra chica de cabello negro con mechones rojos. Dios... No puedo describir lo que sentí en ese momento.
Pude notar como el chico soltó una risa... Me cautivó completamente.
Al parecer me quedé embobada viéndolo ya que Elena me soltó un codazo.

- Hey!
- Solo así me haces caso, Rod nos ofreció pasar a la cocina por bebida. -Elena me miró por unos segundos, y después me tomó de la cara.
- Boluda éstas bien? Éstas toda roja -mientras lo decía volteo a donde me había quedado picada y vió al chico de cabello negro que me dejó helada. Después me volteó a ver con una sonrisa.

- Te gusta Mati?
- Mati?
- Matias Candia, está en nuestra universidad junto con Rod. Si es bastante lindo.
- No tenía idea...
- Nunca te había visto así, es una pena que ya tenga novia -cuando dijo eso me sentí desanimada, pero ni siquiera lo conocía, no me dejé llevar por eso.
- La chica que está con él?
- Si, Zoe, llevan poco pero él se ve muy enamorado, lo siento.
- Está bien, no es como que esté buscando algo con alguien. Solo vine a divertirme.

Elena se rió y puso su brazo en mis hombros, después me llevó a la cocina con los demás.

La noche transcurrió normal, estuvimos bebiendo y riendo, desde la cocina podía ver a Matias de vez en cuando, no sé porque este chico me atrae tanto pero seguro solo es atracción física, pensé. Al fin y al cabo tiene todo lo que considero "mi tipo" en un chico.

En una de esas veces que voltee a verlo me quedé pensando, y no me di cuenta que él volteó a verme también. Me puse muy nerviosa.

Me moví del lugar donde estaba con la excusa de que iba a servirme más debida, aunque mi vaso estuviera casi lleno.

Me calmé y me repetía la frase "no seas tímida, no seas tímida, no seas tímida". Regresé y el de nuevo volteó. Esta vez no me puse nerviosa, no me moví, solo le sonreí.
Sonrisa que él ignoró y siguió hablando con la chica.

Pero está bien, entiendo que estaba con su novia en ese momento. No voltee a verlo más en el resto de la fiesta.