O2

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Tenía unos zapatos deportivos color negro, una pantaloneta del mismo color y una camisa blanca, nada puede salir mal, ¿verdad?


⚜۩ . ۩⚜


Había salido de la casa de sus abuelos en puntitas y ahora se estaba metiendo por la ventana de una mansión que ni conocía, probablemente había un señor de cincuenta años con una altura de 2 metros esperando por él, pero por una razón se sentía ansioso por encontrar al dueño o simplemente su corazón estaba latiendo rápido por el peligro de ser encontrado, no lo sabía. Siempre fue un Omega decidido en lo que hacía y algo miedoso también, así que con pasos lentos y suaves llego hasta las escaleras, ya había revisado la planta de abajo y se sorprendió cuando cayó al piso de esa mansión, alzo la miraba y observo que nada era lo que parecía, porque adentro era una maravilla, todo estaba limpio y bien cuidado, colores elegantes en las paredes y el piso era de una madera resistente y fina, lo único que le molestaba era que estaba a oscuras.

Subió de un escalón a otro de la manera más lenta posible tratando de no hacer ruido, escucho algo y rápidamente se tapó los oídos mientras se escondía detrás de una ancha cortina color vino, solo saco la parte de sus ojos para ver, comprobó que no había nadie y soltó un pequeño suspiro de alivio.

Rápidamente un olor invadió sus fosas nasales y quedo encantado.

Menta con pino

Su Omega despertó, comenzó a morder y rasguñar, estaba inquieto, BaekHyun se asustó, quería huir, pero su Omega se lo impedía.

; Solo una miradita, este olor me gusta, quiero saber de quién es.

— No sea tonto, vámonos de aquí. — Decía BaekHyun un poco preocupado.

; ¡Te lo prometo!, solo será una vez, no pasara nada, entremos y miremos de quien es el olor, aparte es muy tarde y el estará dormido.

— Solo una vez y nos vamos... ¡Deja de rasguñarme! — Su Omega había dejado de escucharlo.

BaekHyun se acercó a la habitación y puso sus finos dedos en el marco de la puerta para abrirla un poco y poder ver con "claridad", se adentró con pasos suaves y sutiles a la gigantesca habitación, diviso entre la oscuridad un bulto en la cama, se fue acercando cuidadosamente, grande fue su sorpresa al ver que eran puras almohadas.

— Sabes que es ¿Propiedad privada?

BaekHyun estaba en problemas...

— Mmmh... S-Solo escuche u-un ruido y...quise venir a... ¿ver? M-Me llamo Byun BaekHyun. — El Omega se fue girando hacia dónde provenía esa voz gruesa y ronca.

—Te hice una pregunta. — Esa voz era tan excitante.

—Y-yo sí sé que es. —El conejito del joven Omega se revolvió y rasguño aún más. — mgh, d-disculpe.

— ¿Olor? — El Omega no podía ver muy bien, el tipo estaba en la oscuridad de la habitación, pero aun así pudo escuchar lo que el Alfa dijo.

— ¿Disculpe? — BaekHyun olfateo un poco más y abrió los ojos cuando se dio cuenta de que el Alfa estaba soltando feromonas. — U-usted está... —sin darse cuenta el conejo del Omega también comenzó a soltar varias feromonas.

—Tu olor. —El Alfa que BaekHyun vio en la oscuridad se estaba acercando hacia él y a su vez, el menor retrocedía con cada paso que daba el alto. — Tu er... -

— N-No se acerque. — El Omega pego un pequeño grito cuando su espalda toco la pared de aquella habitación. — Deténgase.

El Alfa hizo oídos sordos y siguió, BaekHyun en un intento por huir observo una ventana a lado de él, corrió lo más que pudo, pero sintió unas grandes y fuertes manos agarrarlo por la cintura, guirarlo violentamente y pegar su torso a la pared, sintiendo un bulto enorme en su culo.

El Alfa volteo a BaekHyun y puso otra vez su espalda contra la pared, enterró su nariz en el suave cuello del Omega e inhalo todo lo que pudo antes de que BaekHyun lo empujara.

El Omega al fin pudo ver su cara gracias a la luz de la luna

Sus ojos

Sus ojos tenían un amarillo intenso y las pupilas se encontraban dilatadas por la excitación de tomar al joven Omega. BaekHyun se tomó un poco de tiempo para observar detalladamente el rostro de aquel fuerte Alfa de nombre desconocido; Tiene unos labios gruesos, unos brazos grandes y fuertes al igual que todo su cuerpo, su altura es asombrosa, calculando debería ser dos metros y su cabello esta revuelto.

Las manos cada vez lo agarraban con más fuerza y le gustaba la forma en como lo hacía.

¿Qué está pasando con BaekHyun?

—Byun BaekHyun. — El Alfa volvía a poner su nariz en el blanquecino cuello del Omega. — Omega...Mi Omega

— Mgh... ¿Q-Que estás diciendo?...estás loco. — Las grandes manos del Alfa se posaron en el redondo trasero de BaekHyun y lo apretó levemente, haciendo que el pequeño comience a soltar lubricante natural, el menor puso sus manos en el fuerte pecho del alto para intentar apartarlo— Ah~... T-Tú no eres mi Alfa.

Por qué estas en...¿Silla de ruedas? [ChanBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora