Mentirosa Mentirosa

Capítulo 9: Un guía es lo que se necesita

El cuarteto estaba de pie en frente de este hombre con apariencia desaliñada

- "Necesito tu ayuda, Jhon" – contestó Zatanna mirándolo a los ojos – "¿Desde cuándo me llamas joven Zatara? No había escuchado eso en años" – agregó entrecerrando los ojos – "Puedes dejar las formalidades, ellas son de confianza, la rubia de ahí es..."

- "La pequeña prima de Clarkie, si, lo noté" – le interrumpió el mago apuntando al símbolo en el traje de la kriptoniana

- "¡Soy mayor que él, cambié sus pañales!" – respondió Kara, ofendida por haber sido llamada "pequeña"

Lena sonrió y le tomó la mano para calmarla, algo parecido a un puchero apareció en el rostro de la rubia, Lena sonrió aún más y Alex rodó los ojos

- "Si si como sea" – intervino Zatanna - "Como dije antes, necesito tu ayuda Jhon" – Zatanna los devolvió al tema principal

- "Te metiste en problemas otra vez Zee? – Dijo dándole una última calada a su cigarro, luego apagándolo en el suelo

- "No exactamente, pero..." – Constantine la detuvo cuando le habló directamente a Kara

- "Tú, kriptoniana" – dijo apuntándola – "¿me explicas como es que tu energía irradia residuos de magia arcaica? – Zatanna se sorprendió con la rapidez con que Constantine lo descubrió, aunque en realidad no se sorprendía tanto, era por algo que había elegido a Jhon para pedirle ayuda – "asumo que en realidad quien necesita la ayuda eres tú y fuiste a pedir la de Zatanna en primer lugar"– le dijo mientras sacaba un cigarrillo nuevo y no dejaba de mirarla fijamente, con suma curiosidad mientras lo encendía – "La parte interesante de todo es... ¿Cómo te hechizaste?, no es como si la magia arcaica fuera algo que se encuentra a la vuelta de la esquina"

Lena apretó mas su agarre de la mano de la rubia, pero antes que la pelinegra pudiera explicar, Zatanna interrumpió

- "¿Podemos pasar, por favor?, la historia es un tanto particular y me gustaría tomar un poco de té inglés si no te molesta" – Constantine las miró y extendió su brazo en un gesto de invitación a su casa

Se dirigieron en silencio hasta la entrada, donde el mago las hizo detenerse, tomó un trozo de una carta parecida a las de Tarot que se encontrada en la entrada, lo dividió en 4 trozos mas pequeños y le entregó 1 a cada visitante mientras conjuraba unas palabras. Alex, Lena y Kara se giraron inmediatamente a ver a Zatanna quien las miro y asintió tranquilizadoramente

- "No se preocupen, son hechizos protectores, y a la vez le confirman a Constantine que nuestras intenciones no son dañinas" – respondió tranquilizadoramente la maga

Todas asintieron y pusieron el trozo de carta en sus bolsillos y entraron a la morada. Todo parecía normal, pero desde el momento en que cruzó el umbral de la puerta, Lena sintió como un hormigueo le recorría todo su cuerpo seguido de un leve mareo, la sensación hizo que se detuviera nada mas entrar, Kara al notar que la pelinegra no las seguía se giró y preocupada volvió a buscarla

- "¡Lena!, ¿Estás bien?" – preguntó cuando llegó a su lado tomándola de la espalda viendo que casi se caía

Lena al darse cuenta que al parecer ella fue la única en sentirlo no quiso preocupar a nadie, aquí estaban para ayudar a Kara, si eso ya habría tiempo después para comer, que seguramente por eso se había mareado

- "Si, no pasa nada, solo fue un leve mareo, debe ser donde no he comido nada en mucho tiempo" – Constantine y Zatanna se giraron al oír a Lena, ambos se miraron como teniendo una conversación telepática, al final Constantine se volvió hacia en interior de su casa no sin antes murmurar muy despacio pero no lo suficiente como para que Kara no pudiera oírle