Cap 4

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-¡Deidara! ¡Levántate que se te hace tarde!- grito desde el segundo piso.

En ese momento abrió sus ojos perezosamente.

-Ya voy...- se levanto y fue a cambiarse.

¿No podría levantarle con más amor? 

Al abrir su armario no encontró su pantalón, fue a buscar a la ropa sucia si estaba por ahí, pero nada... bajo con su pijama para preguntarle a Sasori sobre su pantalón.

-Oye, Sasori, ¿donde está mi pantalón?- preguntó Deidara.

-Lo lleve a la tintorería, más tarde me lo entregan, ¿porque? ¿Lo necesitas?

-¡Obvio! No seas idiota, entonces con que iré al colegio.- se cruzo de brazos.

-¿Y tu repuesto?

-¡Se rompió el año pasado!

-¿Y porque nunca me lo dijiste?

-¡Pues porque nunca me falto un pantalón!

-¡¿No tienes otro?!

-¡No!

-Mierda...

-Bueno, hay uno... pero me queda chiquito...

-No importa, póntelo.

-¡Claro! ¡Como tú no te lo pondrás!

-¡Después te llevo tu pantalón! En el recreo te lo llevaré, apúrate que se te hace tarde.- respondió Sasori.

-¡Más te vale!- volteo los ojos.- ¿Y me vas a llevar o que?- respondió con molestia.

-Ehhh supongo, hoy Itachi vendrá a por mi y creo que nos llevará con el y Sasuke, es que tenemos proyectos...- se disculpo.

¡Genial! Estar cerca de Itachi con unos pantalones apretados. ¡Cualquiera pensaría que es un urgido por usar esa ropa! Diablos... ¿porque le pasan cosas como esas? 

Ya se imaginada todo tipo de comentarios burlones hacia su persona, si fuera tan fácil mandarlos al diablo a todos, en ese instante deseo ser Hidan, ya que el peliplata ha hecho cosas estupidas en público y los manda al diablo. Cosa que Kakuzu lo soporta... pero a diferencia de él, solo tiene un hermano enano que se hace el interesante.

Los mandará al diablo a todos, incluso si Sasuke lo molesta, lo mandará al mismísimo diablo, tendrá que preparar insultos por si se le acaban...

Deidara planeaba usar cualquier ropa solo para ocultar lo apretado que estaba, podría ponerse una casaca al rededor de sus caderas, pero eso se vería muy afeminado...

-¡Deidara! ¡Ya nos vamos!- gritó desde el primer piso, porque Deidara estaba dando vueltas en su habitación.

-¡YA!- le gritó molesto y desesperado al no encontrar la casaca del colegio.

-¡APÚRATE O TE DEJO!

-¡YA BAJO!- en serio estaba molesto, agarró cualquier casaca y se la puso.

Ni bien bajar su hermano le reclamó.

-¡¿Tanto te demoras?! ¡Y todavía que no estas con la casaca del colegio!

-¡Cállate! No se donde demonios está.- avanzó ignorando los reclamos de su hermano.

Al salir vio el carro de Itachi estacionado, solo en ese momento se ruborizo al pensar que Itachi lo vería en aquellas prendas tan ajustadas... Santo dios... ¿porque me haces esto? 

Caminó rápido hacía el auto con la miraba baja, no quería cruzarse de miradas con Itachi o su hermano por la vergüenza que sentía en aquellos momentos. 

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