Cap 14

58 8 4
                                    


Sasuke miró cómo Deidara corría y se iba; después volvió la mirada hacia su hermano, en su rostro se notaba tristeza, estaba herido y se notaba... parece que le afectó mucho lo que le dijo el rubio. No tenía nada más que hacer en toda la noche, así que se paró y fue hacía donde iba Deidara.

-Sasuke, ¿a dónde vas? -preguntó Itachi.

-Con Deidara.

-Podrías decirle -fue interrumpido.

-Si quieres decirle algo, no me uses como tu mensajero, hazlo tú -le miró, Itachi tenía una batalla interna entre ir corriendo hacia el rubio y hablar con él; preguntarle por qué nunca se lo dijo-. Aparte dudo que quiera verte.

Eso era lo que detenía a Itachi, Deidara estaba enfadado con él; tenía razón, había sido idiota al creer que Deidara sólo era un buen amigo.

-Sasuke, cuida a Deidara -Sasori habló, nunca fue tan unido como su hermano en temas sentimentales, sus charlas de esa clase eran una vez al mes. No sabía cómo actuar pero veía seguridad en el menor de los Uchihas. Aún tenía algo que hablar con Itachi, pero prefería hacerlo a solas.

-Bien -dijo para irse hacia la habitación de Deidara.




-Oye, Kurot, ¿Dei está bien? -preguntó Naruto, los dos jóvenes estaban en una tienda de noche, buscando alguna que otra comida instantánea. Había pasado mucho desde que Deidara dió señales de vida.

-Creo que si... me dijo que se iba a quedar en su cuarto y quería estar solo -respondió sin mirar, su vista estaba en su smartphone, el rubio de cabello largo estaba extraño; pero tampoco quería invadir su privacidad.

-¿Te escribió, no?

-Sí, pero no quiero preguntar más, tal vez se incomode -el rubio asintió, no eran muy amigos de Deidara, no sabían hasta dónde podían o no podían preguntar.






-Qué quieres -preguntó hostil.

-Pasar el rato con alguien e insultar a mi hermano, ¿te parece? -mostró las dos latas de cerveza que tenía en la mano. Deidara entrecerró sus ojos, meditó y accedió a dejarle pasar, el azabache se sentó en la silla que estaba en el escritorio del rubio.

El rubio cerró su puerta con seguro, no quería que ninguna pareja hormonal o que alguien le joda en su estado deplorable. Pero pasar el tiempo embriagándose con el hermano menor del que le rompe el corazón... es una buena idea.

Deidara se echó en su cama y alzó la cabeza, se sentó ahora para estirar su mano y pedirle a Sasuke que le diera una cerveza. Este aceptó y se la dió. Los dos la abrieron a la vez y la tomaron.

-Bueno, ¿por dónde empezamos? -preguntó burlón Deidara.

-Por el hecho de que sea un prepotente de mierda, ¿te parece? -respondió del mismo tono.

-Sí, pero tú también lo eres -le señaló con la lata en mano, era como escupir al cielo.

-Acá estamos para hablar mal de Itachi, no de mí -Deidara se mató de risa, esto sí que sería divertido...





-De verdad, Sasori, no lo sabía -Itachi estaba en el patio junto al pelirrojo, que había decidido por hablar con el azabache, no sabía que su hermano tenía aquellos sentimientos por el Uchiha.

-¿No intentaste algo...?

-¡No! Siempre le vi como un amigo, no estoy mintiendo -le respondió.

-¿Qué harás? Tú tienes novia y otra cosa, ¿te gusta Deidara?

-Quiero disculparme con él, debe sentirse fatal... sobre si me gusta, nunca lo había pensado, es tu hermano y bueno...

-Itachi por favor, necesito sinceridad, no me importa si es por tu novia o porque sea o no mi hermano, ¿te gusta o no? -le detuvo, no quería que el azabache le contase las razones por las cuales no debería.

-¡Que no lo sé, ahora mismo estoy recién pensando en todo! -estaba exaltado, Deidara le ayudaba en todo y apoyaba de la misma manera. Pero... no sentía aquel amor, le gustaba que Deidara sintiera algo por él, ¿pero él?

¡Un joven de diecisiete años le estaba haciendo dudar de su sexualidad! ¡De su vida! Adoraba a Izumi, pero Deidara siempre estuvo para él y se sentía alagado que le gustase al rubio. Pero, ¡esto le confundía!

-Por qué dudas tanto, dijiste que no te gustaba antes, ¿acaso?

-No lo sé Sasori, no lo sé, necesito pensar todo, necesito tener un descanso y saber qué siento por Deidara.

No podía sentir amor de la noche a la mañana y lo sabía, pero Deidara era importante para él y que haya estado enamorado suyo, era complicado.






Lo que estaban haciendo estaba mal y lo sabía, los dos sabían que suplantar a la persona que quieres está mal. Fingir ser otra persona para que tu acompañante se sienta mejor... eso era absurdo y sólo se estarían causando daño psicológicos, pero ellos dos son imbeciles, son jóvenes idiotas después de todo. Y pagarían las consecuencias.

No podía creer que se estaba dejando domar por Sasuke Uchiha, ¡en sus cuatros sentidos nunca lo hubiese hecho! Pero... pensar que era Itachi y el parecido que tenían.

El azabache tampoco estaba mejor que el rubio, pensando que la persona que besaba debajo suyo tan apasionadamente era su adorable Naruto, ¡estaba mal! Todo eso gritaba caos pero no importaba, esa noche quiso desahogarse con alguien y Deidara también estaba dispuesto a aceptarlo.

Después de preguntas estúpidas y el uso de alcohol hizo que empezaran a toquetearse y siguieran con besos. Deidara pidiéndole a Sasuke que le perdonara por querer acostarse con él pensando en Itachi, pero el azabache respondió que estaba haciendo lo mismo, pero pensando en Naruto. Ambos entraron en un acuerdo de hacerlo.

Ahora mismo estaban en la recámara del rubio fingiendo ser otros y complacer los deseos del opuesto. Por la fiesta no se escuchaban los leves gemidos del rubio y cuando terminaron de hacer aquel acto.

Ambos exhaustos se echaron en la cama, habían decidido compartirla toda la noche y mañana, era sábado... que se jodan todos, pensaban.

Deidara se levantaría con una resaca y dolor horrible corporal; también con un autoestima regado por el piso. Era su primera vez, lo había disfrutado pero era mejor imaginarse que Itachi era el que le besaba hasta que no pudiera más, que le agarraba fuertemente de las caderas para que no se alejara de él. Que le abrazaba con tanta fuerza, porque le "amaba". Que el hombre que le poseía era aquel idiota que había insultado en la noche. Que sujetara con fuerza sus cabellos azabaches porque no quería que le dejara, no quería estar lejos de él, quería sentirse amado por el hombre que tanto le hacía sonreír bobamente.

Sasuke se imaginaba que había solucionado sus problemas con Naruto, ahora el que gemía debajo suyo era su adorable rubio. Le besaba y abrazaba para que no se fuera de sus brazos otra vez. No quería estar sólo otra vez. Amaría el cuerpo de Deidara como si fuese el de su adorable rubio. Que le perdonase de una vez por todas, eso deseaba. Cuando sujetaba su cabello y le abrazaba den respuesta, sólo se imaginaba a su rubio. Eso hizo que ambos jóvenes tuvieran una preciosa noche apasionada de amor no correspondido... 



Suficiente maratón, ¿quieren que siga actualizando o me detengo? 😟

Siempre te apoyaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora