¿Quién diría que ahora era alguien sumamente feliz?
Después de haberse graduado terminando por entrar en un equipo oficial Jackels se habían vuelto rápidamente en su familia
Iba de camino a su departamento tras haber comprado unos onigiris a Osamu, adoraba la comida del gemelo de su compañero de equipo siendo que hacía los mejores onigiris que podrían existir
Entró al hogar quitándose sus zapatos en el recibidor dejando sus llaves colgadas cerca de la puerta percibiendo un buen aroma a comida casera. Sonrió caminando hasta la cocina dejando los onigiris en la mesa mirando de reojo a su acompañante
-Huele increíble, ¿qué cocinas? Traje onigiris-habló curioso abrazando por la espalda a su novio mirando por sobre su hombro la comida que estaba preparando
-Algo de carne con vegetales, comer muchos onigiris podría hacerte enfermar-le aclaró sintiendo como el rubio solo asentía a sus palabras haciéndole caso
-¿Cómo te fue hoy?-
-Bastante bien, ¿cómo te fue en el entrenamiento?-
-Sakusa golpe a Atsumu durante media hora por haberlo abrazado, nada de que preocuparse-resaltó riendo recordando la situación
Prepararon la mesa para poder disfrutar la comida tranquilamente hablando de diversos temas de su día, algo que impresionaba a muchos era la relación de esos dos chicos siendo que a pesar de haber pasado unos años seguían estando igual de enamorados que siempre
Si, habían peleas de por medio, pero toda relación las experimentaba
Iwaizumi se apoyó de Nikkō cuando tomaron asiento en el sofá para ver una película, el cabello del rubio estaba ligeramente mojado por haberse bañado recién hacía unos momentos
Después de haberse mudado a Japón, donde ambos comenzaron sus estudios, después de graduarse de la universidad ambos compraron un departamento juntos para pasar el resto de sus días
Seguían en contacto con sus amigos obviamente, la relación con Oikawa se había ido al caño después de haberse ido a Argentina junto a Maki
Pero nadie se vio afectado por su ida, mucho menos la pareja actual
-Terminó-musitó apagando la televisión para mirar a su costado al castaño oscuro que dormía plácidamente
Se encargó de cargarlo para ir hacia la cama torpemente así dejándolo allí para que pudiera descansar, se acomodó también sonriendo cuando automáticamente Hajime se apegó a su cuerpo
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El partido iba en llamas, la selección japonesa actual estaba dando lo mejor. Aunque Argentina estaba ganando por mucho, aún así se divertían de algún modo
Iwaizumi que era el actual entrenador de aquel equipo que representaba a Japón estaba mirándolos desde su asiento en la chanca dándole ánimos a todos
Adoraba poder ver desde cerca como su novio remataba. El juego terminó siendo los ganadores Argentina, podrían haber cierto sentimiento de derrota pero de todos modos aún así estaban feliz de haber jugado una vez contra Oikawa Tōru, alias el Toto
Los jugadores se alistaron para después salir de los vestidores tranquilamente, Nikkō fue hasta donde estaba Iwaizumi acercándose para tomar su mano ganando una sonrisa de parte del moreno
-Lo hiciste genial-habló el moreno acercando un poco sus rostros para juntar sus labios unos momentos
-Gracias a ti-respondió con una sonrisa
Ambos se encaminaron detrás del equipo para ir a un sitio a comer
Por otro lado Oikawa, ahora soltero porque Maki lo dejó por un argentino, mira como los que algunas vez fueron su amigos e incluso pareja se iban felizmente
En su propia burbuja de felicidad
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Me gusta y me gustara siempre la vida que tengo ahora con la persona que me gusta
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Este es el fanfic más corto que he hecho, para quienes esperaban una historia con final Feliz les prometo que en otro momento verán unas historia con Oikawa final felizMe gusto mucho esta historia en lo personal
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A distancia (Oikawa Tōru x Male reader)
Fiksi PenggemarLas cosas en una relación a distancia pueden empeorar ¿no?