Maddison Bieber:La situación era muy difícil de llevar con Elisa, pero al menos ya faltaba poco para acabar el trabajo.
Di unos golpecitos en la carpeta con mis dedos, empecé a tararear una canción de papá, y no tardé en empezar a cantar:
🎶 Hoppin' on the red-eye
Hoppin' on the red-eye
I can rest assured knowing you're on the other end of it
Looking forward to the descent, then you're out
See you when I touch down 🎶—¿Podrías callarte? —habló de mala gana.
—Oh vamos, Eli, anímate. Ya casi terminamos el trabajo, ya podemos relajarnos.
🎶You're my champagne
You make me pop off everywhere like confetti
I know it seems strange
I seen you last night and I miss you already
My bed is depressed
My pillow's a victim
Got me in chills while my hands are sweaty 🎶Canté la segunda estrofa esta vez con un poco más de libertad, y animé para que ella cantara la otra.
🎶 And I gotta fly out
Hate you got me strung-out
And I gotta fly out
Hate you got me strung-out, ohh
Only been ten hours but my sanity is gone 🎶Sonreí al escucharla cantar, había logrado crear un buen ambiente entre ambas.
—Tienes una linda voz, dejaste mi voz opacada—fingí vergüenza, a lo que ella río.
—Eres demasiado dramática, mejor terminemos el trabajo, ¿Sí? —Asentí.
Abigail Swift:
Amaba tener el control de cada cosa, mi madre me había enseñado un poco de eso. Organizaba mi habitación, los trabajos de la escuela y a veces hasta asuntos relacionados con el trabajo de mamá, porque a pesar de que quisiera ser organizada, era bastante despistada.
Sí, Taylor Swift me enseñó sobre el orden, pero le faltaba un poco en su vida. Sin embargo, ese no era el asunto.
Cada que tenía un evento informal, me obligaba a llegar cinco minutos antes. No me permitía llegar después de la hora acordada.
—Hey—saludó Charlie sentándose frente a mí.
Habíamos quedado en encontrarnos en la cafetería del centro comercial a cierta hora, y él llegó media hora tarde.
—Llegas tarde —le reclamé —¿Y dónde está Elisa? ¿No viene?
Él frunció el ceño—Dijo que no... Está haciendo un trabajo con Maddie.
Asentí, y quise dejar el tema a un lado, pero él no.
—¿Por qué les cae mal?
Llegué a pensar en la respuesta de esa pregunta durante algunos minutos, hasta que llegué a una conclusión: Maddison no me caía mal.
—No lo hace, sólo apoyo a Elisa.
—No la apoyas, si la apoyaras, le demostrarías que Maddison y Jacob no son malas personas— contradijo.
Tenía razón, y no lo podía aceptar.
Continuará
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Hijos De Famosos
ChickLit¿Qué pasaría si los hijos de ciertos famosos de nuestra época estuvieran viviendo en un mismo entorno?