𝑷𝑹𝑬𝑱𝑼𝑰𝑪𝑰𝑶𝑺 [𝑭𝒓𝒆𝒅 𝑾𝒆𝒂𝒔𝒍𝒆𝒚]

Prólogo

- Mère, Père. Quiero cambiarme de escuela. - Dijo Lyra a sus padres Lucius y Narcissa. Estos dos alzaron la mirada y la miraron con una expresión inexpresiva, su madre ladeando un poco la cabeza, cada uno sentados en diferentes sillones de la elegante sala de la mansión Malfoy.

- ¿A qué se debe esta repentina petición, Lyra? - Dijo su padre lentamente, su voz fría como era usualmente. Ambos la miraron expectantes, Lyra tragó saliva visiblemente. 

- Quiero estudiar en Hogwarts. - Trato en lo posible de sonar firme y convencida, cosa que se le dificultó gracias a los nervios que sentía por la posible respuesta de sus padres. Estos compartieron una mirada por unos segundos y voltearon a mirar a su hija.

- Camina Lyra. - Exclamó Draco empujando el carrito en donde se encontraba su equipaje, notablemente fastidiado mientras que su hermana miraba la estación King Cross estupefacta con su carrito entre manos. No había tenido oportunidad de ir a tal lugar, ya que siempre iba en camino a su antigua academia en el momento en que Draco venía a la estación para abordar el tren.

Ambos adolescentes cruzaron la pared para llegar a la plataforma Nueve Tres Cuartos. Caminaron entre las personas en aquella ruidosa estación. Lyra notó como la mayoría de los niños, grandes y pequeños, iban acompañados de sus padres. Se mostró indiferente y trató de que no le afectará mucho el hecho de que sus padres decidieron no acompañarla en este día tan importante para ella, pero en el fondo deseaba que estuvieran presentes.

Draco la miró de reojo y notó la mirada perdida de su hermana pero decidió restarle importancia al asunto. Guió a su hermana por la estación hasta que llegó la hora de abordar el tren. Las personas presentes en la plataforma compartían abrazos y palabras de despedida. Lyra caminaba detrás de su hermano, ambos con expresiones neutrales en sus pálidos rostros. Lyra notó a más de una persona susurrando y señalando a su dirección pero lo ignoró. 

Su hermano se montó al tren pero ella se quedó afuera mirando al piso, meditando la situación. Draco al notar su demora rodó los ojos.

- ¿Vienes? - Lyra alzó su mirada y sus ojos se encontraron con los de su hermano. Tomó una profunda bocanada de aire y se montó al tren.

- ¿Qué tan malo puede ser? - Preguntó Lyra accidentalmente en voz alta. Draco hizo una mueca y se volteó para adentrarse al tren, con su hermana siguiéndolo por detrás.