Always ||L.S.

CAPÍTULO 15

Louis estaba ahí, en su departamento. Con sus hermosos ojos color cielo, con su característico fleco sobre su frente, su chaqueta de mezclilla y sus pantalones negros ajustados. Mostrándose fuerte, frío y distante.

Louis volvió, y fue ahí cuando Harry supo que no terminaría, sabía que no iba a terminar y eso lo hacía sentir enfermizamente débil, al no rehusarse, a decir no, a no alejarse de sus caricias vacías y carecientes de cariño, porque sabía que Louis no lo querría como él lo quiere.

Pero Louis le daba lo que necesitaba, y en el mes que había pasado con él, se había dado cuenta de eso, que -Louis era una droga-

Su subjetividad e imaginación habían hecho un pacto para terminarlo de volver completamente loco, no lo sabía pero necesitaba verlo nuevamente, pero como una droga, no había otra palabra para caracterizarlo que esa.

Harry necesita Louis le da, necesita no está, necesita discuten ¿Qué se supone que debería hacer? necesita, necesita, necesita, y siente que se muere. Y cuando está dentro del sufragio, Louis vuelve y le da, y se calma, y vuelve a respirar, vuelve a vivir

Eran sentimientos mutuos reprimidos, por un miedo estúpido. Un miedo a salir lastimado por parte de Harry, y por parte de Louis un miedo a ser juzgado, porque era un cobarde.

"Cambia esa cara" volvió hablar Louis al ver el ceño fruncido y confundido de Harry.

"¿Qué cara quieres que ponga? ¿De año nuevo?" Habló Sarcásticamente.

Harry seguía de cuclillas y las niñas solo miraban en silencio la escena tensa en la que se encontraban ambos. Seguramente terminaría en otra discusión innecesaria y no quería que sucediera frente a las niñas.

Como un llamado de auxilio Anne salió de la cocina con un plato lleno de galletas recién horneadas. La madre sintió aquel incomodo momento por lo que actuó de inmediato.

"¡Daysi, Phoebe! Vengan al comedor ¡hornee galletitas!!" Les habló animadamente la pelinegra con la hermosa sonrisa que la caracterizaba

"¡Si! ¿Y luego podemos jugar con Harry?" Preguntó una de las niñas como si le estuviera pidiendo permiso a Anne para que Harry jugara con ellas, ese acto le llenó el corazón de mucha ternura. Parece que todo el carisma y la amabilidad de Jay se las llevaron sus hermanas dejando escaso de eso a Louis.

Las niñas salieron del lugar junto a Anne, haciendo que se quedaran Harry y Louis solos en aquel lugar

"Necesito... hablar contigo" Louis sonaba sincero y ¿arrepentido? Quizás estaba a punto de terminarse de volver loco

"Aquí no. Subamos, nos pueden oír" Habló Harry fríamente sin mirar al castaño a los ojos.

Entonces pensó ¿Louis le daba lo que necesitaba?; una llamada, un mensaje de texto, unas palabras sin sentido, un perdon sin arrepentimiento...O ¿Louis le daba lo que él quería darle? sabiendo que siempre iba aceptar cualquier limosna que venga de él.

"Harry, no voy a discutir" dijo tratando de acercarse al rizado para verlo fijamente. Ante este acto Harry retrocedió y dejó de mirarlo a los ojos

"No confío. Y tampoco quisiera asustar a tus hermanas" Louis suspiro y se encogió de hombros aceptando la propuesta de Harry.

Ya en el cuarto Harry cerró la puerta y Louis se acercó un poco de forma provocativa posando sus manos sobre las caderas del rizado. Harry se separó molesto de inmediato ¿quería hablar? Bien, iban hablar. No quería sexo, definitivamente en la situación en la que estaban eso pasaba a segundo plano.

"Bien, ¿De qué quieres hablar?" Dijo Harry frio mirándolo desafiante a los ojos.

Por su parte Louis suspiró y bajó la mirada empezando a jugar con sus manos nervioso. "Perdón por lo que dije el domingo pasado" no dijo nada más como si olvidar sus horribles palabras fuera tan fácil.