Deseo

capitulo IV

Marzo 24, 4:00 pm

Rachel sostiene mi rostro con suavidad mientras yo sin saber cómo reaccionar, solo atino a alejarme de ella.

-Que es lo que te sucede?! - exclamo mientras me llevo la mano a la boca sorprendida - te golpeaste en la cabeza o algo?

Puedo notar por el olor a licor y por su ropa toda desaliñada que viene de ver a un chico. No es la primera vez que la veo llegar así, pero, si es la primera vez que la veo llegar triste, casi a punto de llorar.

-¿Alguien te hizo daño? - me comencé a preocupar -

Justo antes de pedir una respuesta, ella se abalanza hacia mí e intenta besarme otra vez, pero esta vez logro evitarlo dando un paso hacia atrás. La cabeza de Rachel termina en mi pecho donde ella finalmente se rinde ante el sueño. Ella al ser un tanto más grande que yo, su peso casi me derriba, pero consigo estabilizarme y usando la poca fuerza que tengo, logro llevarla a su habitación.

9:00 pm

Mientras termino de preparar la cena, escucho los pasos de mi mejor amiga bajando las escaleras. Me apresuro a dejar todo listo.

-Que bien huele! - la escucho decir mientras se acerca a la cocina - desde que nos conocemos siempre has tenido ese talento en la cocina - dice sarcásticamente.
- ja-ja-ja que graciosa, respondo mientras le acerco el plato de sopa instantánea - ya te sientes mejor?
- Si un poco, aunque no recuerdo mucho de lo que pasó el la tarde.
- espera, ¿De verdad no recuerdas nada?
- nop - dice mientras empieza a tomar la sopa instantánea - ¿Pasó algo importante?
- no, nada - digo un tanto decepcionada.

No tiene caso preguntarle, cuando toma hasta ese punto, es difícil sacarle información, supongo que después logrará recordar algo, y podré saber porqué volvió ebria y llorando tan temprano.
Después de acompañarla en la cena, nos pusimos a ver televisión, aún tenía curiosidad por lo que le pasó, pero no me animé a preguntar.

11:00 pm

Me encuentro en mi habitación intentando dormir, pero no lo consigo, aún recuerdo el beso que me dió Rachel, seguido por las cosas que me pasaron en estos últimos tres días.
¿Cómo es que las cosas cambian así de la nada? Un día estoy feliz disfrutando una vida aparentemente tranquila y al día siguiente descubro que mi mejor amiga siente algo por mi.
El hormigueo en mi vientre hace acto de presencia, pero trato esta vez de tener el control. Sin embargo, me resulta muy difícil, empiezo a recordar la escena en el baño de la oficina, los sonidos lascivos que provenían de mi jefa y su acompañante, el rostro de placer de Alex mientras lamía su duro y palpitante pene, se sentía bien el verlo así de excitado.
Mis piernas empiezan a temblar al momento en que toco mi clítoris con los dedos, quiero hacerlo, lo deseo, es como si algo se apoderara de mi y me controlase por completo.
Finalmente consigo recuperar la razón y quito mi mano de ahí rápidamente, me acomodo para dormir y cierro los ojos deseando volver a mi vida tranquila.

Marzo 25, 10:00 am

Mi día transcurre tranquilamente como cualquier día en la oficina entregando informes, cuando de repente escucho que me llaman desde la oficina de mi jefa.
Me apresuro a llegar rápidamente y estando en el lugar puedo sentir cierta tensión en el ambiente.

- Bueno señorita Lía, como bien sabe hemos estado despidiendo a muchas personas últimamente - mi corazón pega un brinco y me pongo nerviosa.

- me van a despedir! - pienso muy asustada - ¿Se habrá dado cuenta que la ví en el baño la otra vez?

- no soporto a la gente incompetente, así que... - en mi mente ya imaginaba las distintas formas en las que ella me despediría - ...le quiero poner a cargo de capacitar a los de nuevo ingreso.