It's Shanell, Bitch!

#4

- Pensé que era comida de gatos - miraba con desconfianza la bandeja de comida frente a mi. Eran unos guisantes amarillos , un pedazo de carne  gris y puré de papa cafe.

Kelsy rio por lo bajo. Al fin era la hora de comida pero estaba bastante segura de que pasare otro día sin comer en este lugar. 

- Pero tienes que comer - dijo Kelsy mientras se devoraba todo en su charola. - se que te tienes que ver delgada para poder aparecer en revistas y pasarelas, pero morirás de hambre si no te alimentas. 

Suspire y mire a los alrededores. La cafetería estaba llena de mesas redondas con 6 sillas cada una. Todos en un uniforme horrible, las chicas una falda azul oscura, una camisa de botones y un blazer del color de la falda. Los chicos casi lo mismo a excepción que ellos usan pantalón. 

Mi vista se poso en Kelsy cuando vi un par de chicas sentarse a cada lado de ella, de inmediato se tenso y su mirada se lleno de panico. 

Una de las chicas era rubia, un rubio sucio para ser honesta, pero tenia unos ojos azules, su cabello era lacio y le llegaba a la mitad de la espalda. La otra era de cabello negro corto y con ojos marrones. 

- Kelsy, ¿No vas a presentarnos a tu nueva amiga? - la rubia me miro sonriendo y yo hice una mueca.

- C-claro, Ciara- tartamudeo sin atreverse a mirarlas y me apunto con la mano - ella... es Shanell...

- Un gusto - dijo Ciara tendiendo su mano hacia mi y no pude evitar mirar sus uñas mordidas y mal pintadas - nosotras somos las que mandamos aquí y la verdad nos gustaría que te unieras a nosotras - apunto a su amiga con la mano que deje tendida - ella es Michel y ella es Alexa - ni me había dado cuenta de la tercera chica para detrás de ellas.

- Creo que es muda - la tal Alexa rodeo la mesa y se sentó a mi lado. Me limite a mirarla - ¿Que? ¿De donde vienes no te educaron?

- Mira esa mochila - a Michel le brillaron los ojos - es una Louis Vuitton.

- No la toques - le lance una mirada mortal a Michel que intento tomarla.

- Uy, ni que fuera original - resoplo y yo alce una ceja.

Mire su cabellera rojiza y rizada. Estaba segura de que tenia un serio problema con los peines ya que parecía mas un nido de pájaros que cabello. Su rostro estaba lleno de pecas y no dejaba de verme con sus ojos marrones mientras mascaba un chicle como si fuera una vaca.

- Esa mochila es mas original que tu existencia en este mundo - el veneno era obvio en mi voz. 

- Ella no quiso decir eso, Michel. Ella es nueva apenas es su primer dia... - Kelsy se apresuro a decir pero Ciara le lanzo una mirada que la hizo callar. 

- Deberías de cuidar tu boca - me dijo Ciara mientras metía un dedo en el puré de papa de Kelsy y empezaba a jugar con el - Nosotras nos acercamos de buena fe, ¿y así nos pagas? 

- Repite lo que dijiste - me reto Michel.

Sonreí y me gire hacia ella, colocando ambos codos en la mesa.

- Supongo que tienes orejas debajo de ese montón de cabello ya que no escuchaste bien. Así que te lo diré mas fuerte y mas despacio, Leeloo - me aclare la garganta -  Dije, que mi mochila, es mas original, que tu existencia en este mundo. 

Sus ojos parecían estar apunto de salirse de sus cuentas y vi como se le abrieron las fosas nasales para bufar como un toro. 

- ¿Cómo acabas de llamarme? - se levanto y Kelsy me miraba con total pánico mientras sacudía la cabeza - ¡Repítelo!

- Existe algo llamado hisopos y te ayudan a quitar toda la cerilla que tienes en tus oídos porque al parecer te están dejando sorda, y agradece que te llame Leeloo porque ella si se medio peina en la película del quinto elemento. 

Todo el alboroto de la cafetería había  desaparecido, dejando un tenso silencio a nuestros al rededores. 

- Estas muerta - me tomo del cuello de la camisa y me alzo.

- ¡No me toques, pandrosa, que me pegas los piojos! - la empuje con fuerza lejos de mi y antes de que pudiera hacerme lo que sea una voz resonó en el lugar.

- ¡Que escandalo es este, Michel! - una mujer de color apareció en nuestro campo de visión - Si vuelves a tocar a la señorita Lagerfeld te expulsare de inmediato. 

- Pero ella empezó - se defendió Michel. 

- ¡Ya me escuchaste! - la miro a traves de sus anteojos - si tu, o cualquiera de ustedes dos - señalo a Ciara y Alexa con su uña puntiaguda - se les ocurre hacerle algo, se las verán conmigo. ¿Oyeron?

Las tres chicas se miraron entre si y asintieron a regañadientes. Ciara y Alexa se levantaron y me lanzaron una mirada cargada de odio antes de salir del lugar. 

- ¿Se encuentra bien, señorita Shanell? Soy la directora Parker - me sonrió a lo que yo copie su gesto.

- Si, estoy bien - acomode mi uniforme y eche mi cabello hacia atrás - se que es una escuela publica pero deberían de revisar si los alumnos tienen expedientes criminales. 

La directora rio de forma nerviosa. 

- No tiene que preocuparse, le prometo que no se repetirá - acomodo sus gafas - no queremos que su padre Máximo Lagerfeld crea que esta en un lugar inseguro, no queremos otra demanda. 

El entendimiento me dio de golpe. Vaya, amenazo a esta pobre mujer con acabar con el lugar si algo me pasaba.