capítulo 07

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He estoy en la clínica de la empresa, esperando que me toque mí turno, para qué me ponga la inyección de anticonceptivo, estoy nerviosa.

Dorca Hernández, escucho la secretaría decir mí nombre y me apresuró a responder, soy yo señorita, pues pase, la esperan.

Entre al consultorio y veo aún doctor bastante ,guapo por cierto, señorita Hernández, suba a la camilla dice el doctor, y me inyecta, está inyección sólo tendrá efecto por un mes, así que sí usted quiere seguir cuidandose, de no quedar embarazada tenga esto en cuenta.

Yo escucho atentamente, pero confienzo que esto, es muy vergonzoso, si el doctor supiera que después de esto, no necesitaré esa inyección, gracias a Dios, sólo la he usado está vez y no creó que la vaya a usar mensualmente, mí vida sexual es una porquería.

Me despido de el doctor y me voy a la oficina de la empresa, señorita Dorca, me dice el gerente mañana en la noche será, la desvirgación, tiene que estar preparada, Dios creí que la palabra desvirgación no existía, sí asiento, después de que todo pasé, le depositaremos el dinero a su cuenta, yo asiento de nuevo, vaya a su casa y descanse mañana será un día largo.

        Joshual.

Ya me hice todo los análisis y cómo era de esperarse, todo salió perfectamente, no estoy enfermo.

Se que mañana, será un día muy prometedor.

Llamo a casa de mí madre, para decirle que me encuentro bien, llamo y por fin mí madre atiende la llamada.

Ciao, dice mí madre, Ciao mamma, o hijos estaba preocupada por ti, casi me subo en un helicóptero, para ir a buscarte, mamma, soy un hombre bastante adulto para saber manejar mis asuntos, figlio, eres un niño para mí, pues no lo soy, te he demostrado lo capaz que soy, lo sé, pero de todas formas tengo que cuidarte, mamma, nos vemos luego.

Mí mamma, tan intensa cómo siempre, no es por qué quiera cuidarme y protegerme, lo hace por qué le encanta tener el control de la vida de sus hijos, estoy cansado de sus berrinches, la soporto por qué es mí madre.

Dejo de pensar en eso, y me voy  a dar una ducha, prendo mí computador, y trabajo un poco.

Mañana será otro día.

Dorca.

No podía dormir, gracias adiós me tomé una pastilla para poder dormir, y lo hice gracias a Dios, descansé, me baño, me visto y al hospital a ver a mí madre.

Llego a la clínica y voy directo hacia, la habitación de mami, y a esta Margoth, Margareth, Damarina, junto a mí madre, están hablando animada mente, y yo entro, hola familia, hola hija estaba preocupada por ti, por mí, sí, no te hubiera visto en casi una semana, ah perdón madre es que ahora estoy trabajando, la universidad, hacerme cargo de, Damarina y Leudy, perdón por no ser filial madre, qué dices, es sólo que te extrañe mí amor, madre a mí no me dices eso dice Leudy, quien acaba de llegar, y todo reímos, es por qué te veo a diario.

Hagan silencio dice Margareth o nos van a sacar de aquí, esto es un hospital, por Dios, siempre tan exagerada cómo siempre, dice Margoth a Margareth, eres una payasa Margoth, y entra una doctora quiero hablar con alguien de ustedes, que sea adulto, o está bien doctora dice Margareth, hablemos y salen, yo invento la excusa cliché para irme a escuchar, voy al baño dijo y salgo.

Y escucho a Margareth hablar con la doctora, doctora no tenemos dinero para empezar la quimioterapia, somos pobres, pero usted puede empezar y hacemos un acuerdo de pago, por cuota, me dan mucha pena su situación económica, pero no puedo empezar con la quimioterapia así, sin dinero no se va a poder, tendrán que llevarla a otro hospital.

Puesto qué aquí, no sómos banco, señorita Hernández, que cruel es usted doctora, a caso dejará usted que mí madre muera.

Esos no son mis problemas, tiene que discutir eso con Dios,el es quién sabe cuándo ella partirá de esta tierra.

Se marcha y deja a mí hermana llorando, se limpia las lágrimas y vuelve a la habitación.

Esa hija de perra, desgraciada, ahora más que nunca, necesito vender mí virginidad, no puedo creer que esa doctora sea así, más bien parece la esposa de Hades esa hija de puta, espero que nunca ella necesite algo de mí, no sé el mundo da muchas vueltas, hoy no tengo nada pero, algún día puedo tener y ella puede necesitar de mí.

Desde que terminé de vender mí virginidad, vendré a pagar y a sacar a mí madre de este hospital,pero antes pienso darle una lección a esa perra, hablaré con el director de la clínica y la acusaré, ella se a ganado el desprecio que siento hacía ella.

Hola,  espero que le este gustando está historia, me estoy esforzando para que sea una buena historia.

Nos vemos pronto.

virginidad a la Venta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora