━━ 𝗖𝗿𝗶𝗺𝗶𝗻𝗮𝗹; 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘪𝘰𝘯𝘦 𝘨𝘳𝘢𝘯𝘨𝘦𝘳

cap 25

La primera semana fue la más dura para todos. Hermione, Harry y Narcissa se turnaron para sentarse en la habitación del hospital con una Bellatrix inconsciente. La bruja más joven siempre optaba por el turno de noche, era el momento más tranquilo en la sala y después de hacer su propio trabajo y el de Bella en el ministerio, era lo que quería.

No había habido ningún cambio en la condición de la mujer morena, los escáneres aún se estaban ejecutando, todavía estaba siendo revisada por un médico brujo cada quince minutos y todavía le estaban dando el cóctel de medicamentos diseñados para su dolencia.

Al principio, las transfusiones eran difíciles de ver, la sangre que se extrajo del cuerpo de la mujer era casi tan oscura como su nombre. Siempre fue un alivio ver que un fluido rojo saludable lo reemplazaba. Solo podían esperar y aprovechar que ayudaría.

"¿Mione?" vino una voz desde la puerta el tercer día de la segunda semana. Harry asomó la cabeza para llamar la atención de su amiga cuando ella no lo había visto a través de la ventana, ella había conjurado que solo ellos tres sabían, les permitía ver hacia el pasillo, pero nadie podía ver hacia el interior de la habitación. Lo agregó a la habitación el tercer día de la estadía de Bella. Todos habían sido sorprendidos en la habitación por un médico y les dijeron que si no podían seguir las reglas de uno en uno, no se les permitiría regresar.

cuando ella no había salido después de cinco minutos de él parado allí, asomó la cabeza.

"Hola Harry, ¿qué estás haciendo aquí?" preguntó sorprendida de verlo a esa hora de la mañana.

"No pude dormir, pensé en ir a ver si querías tomar un descanso. Podríamos tomar un café o algo". respondió en voz baja, no porque le preocupara despertar a la morena en la cama, sino para que las enfermeras no vieran que había dos en la habitación.

Ella asintió con la cabeza, colocó el libro que había leído en la mesa junto a la cama y se reunió con él en el pasillo.

"¿Pesadillas otra vez?" preguntó mientras caminaban por el pasillo hacia el café de veinticuatro horas que era exclusivo de esta sala de partículas. Era para las familias a las que se les había permitido quedarse con sus seres queridos toda la noche, los que estaban grave, grave o inexplicablemente enfermos.

"No esta vez." Dijo mientras pagaba los cafés y se sentaba en una de las pocas mesas.

"¿Qué te mantiene despierto entonces?" preguntó ella colocando su mano sobre la de él y apretándola suavemente, fue un gesto reconfortante y él lo agradeció.

"¿Recuerdas el día antes de que... el accidente de Bella?" dijo en voz baja.

"Sí, ¿a qué parte en particular te refieres?" dijo ella preguntándose a dónde iba con esta conversación.

"Bueno, te adelantaste a los Malfoy primero, y ella y yo estuvimos solos por unos minutos." dijo torpemente.

"¿Correcto?" ella dijo. No le gustaba la dirección en la que iba. Si Harry estaba a punto de decirle que algo había pasado entre ellos, ella no sabía qué haría. Apenas había comenzado a aceptar que ella y Bella nunca estarían juntas, ¿cómo reaccionaría al ver a la mujer que amaba del brazo de su mejor amiga cuando despertara ? Si se despertaba, la vocecita desagradable en su cabeza siseaba.

"Ella me dejó algo, para ti." dijo finalmente mientras sacaba un sobre de su bolsillo y lo colocaba frente a ella.

"¿Qué es esto?" dijo recogiéndola y dándose la vuelta. No había nada en él, aparte del sello de cera, una marca del escudo de la familia Black.