"𝐌𝐘 𝐁𝐄𝐀𝐓𝐈𝐅𝐔𝐋𝐋 𝐏𝐄𝐑𝐅𝐄𝐂𝐓𝐈𝐎𝐍" [ᴷᴼᴼᴷᵛ]

40- "Esto me gusta"

Cada día que pasaba se hacía más ameno el estar encerrado bajo aquellas cuatro paredes, al igual de la visitas de las personas que le querían. Aquellas hacían todo lo posible para que el chico estuviera entretenido dejando atrás esos pensamientos tan malos, porque mentiría si dijera que la soledad no le aterraba, es más, le aterraba tanto que no era consciente de sus actos y al día siguiente amanecía preguntando que había pasado y porqué tenía aquellas heridas en su cuerpo. Pues los rasguños en sus brazos causados por sus uñas hace unos días no fue la única autolesión que se hizo Taehyung.

Unos cuantos días atrás, el omega se preguntaba el porqué tenía un gran moretón a un costado de su vientre. Cuando el chico supo la causa se asustó, estaba aterrado, ¿cómo podía hacerse ese daño a él mismo cuando veía la oportunidad? Lo peor de todo es que el chico nunca era consciente de esos actos, era como si su mente se nublase y su consciencia se desconectara.

Su familia y amigos acordaron en no dejar ningún momento solo al omega, es por eso que tras la llegada de uno de sus hermanos, alfa y cachorro desaparecieron de la habitación para que este último no lo abrumara estar todo el día en el hospital. También fue porque Taehyung se lo pidió, pues no quería que Yeonjun lo viera de aquella manera siempre que viniera.

Hace unos minutos, su doctor vino para hacerle la última prueba de su diagnóstico. Si estas pruebas eran buenas y todo estaba en su sitio, el peligris podía volver a casa y reincorporarse a sus clases de universidad. Tal vez Taehyung no estaba muy ansioso de volver a aquellas clases, pero si estaba ansioso de volver a casa y dormir por horas en su grande y cómoda cama junto a Yeonjun ¿y porqué no? también junto a Jungkook. Porque aquel día en el que Jungkook le dijo que deseaba ser el padre de su hijo, su corazón pudo oírse por toda la habitación.

Aquel corazón que permaneció roto por demasiado tiempo y el cual se iba pegando pieza por pieza a la perfección, como si hubiera salido de fábrica. Aquel corazón que volvió a enamorarse y seguía enamorado de la misma persona. Su felicidad no pudo contenerse y esa noche lloró junto a Jungkook cuando ambos lobos sintieron paz después de mucho tiempo, aquella noche en la que durmieron juntos en esa pequeña camilla de hospital sin separarse en uno del otro, ni si quiera dejando un hueco de espacio. Durmieron enredando sus piernas y enredando sus brazos al rededor del contrario, con sus feromonas revolucionadas por toda la habitación y hundiéndose en el exquisito olor que desprendía cada uno. Noche en la que se dijeron infinitos "te amo", en las que las caricias no cesaban y con ellos, besos tímidos que duraban por minutos, como si fueran los últimos que se darían.

La relación entre omega y alfa volvió a su estado normal. El menor disfrutaba de los halagos y cumplidos del azabache mientras que este disfrutaba la compañía de su omega, lo mimaba, lo cortejaba cada segundo y -sobretodo- lo amaba. En esas acciones el azabache le demostraba lo mucho que le quería y Taehyung, siéndole totalmente sumiso al alfa del mayor, le demostraba que seguía aceptándolo. Porque amar ya lo hacía y se lo hacía ver por cada beso que le daba.

La puerta fue abierta por la cual pudo colarse un niño pequeño de cabellitos oscuros, corrió hacia uno de los bordes de la camilla siendo tomado por las manos de su padre y colocándolo sobre sus piernas mientras el niño le hablaba en lenguaje de señas. Al cabo de unos minutos un alfa se les unió, aquel alfa que seguía ahí parado al lado del omega y con una mano en el hombro más lejano del contrario mientras observaban al niño. El restante allí presente observaba el como su hermano le traducía al azabache lo bien que lo había pasado Yeonjun en el parque con él y que quería volver. Cerrando así su libro de lectura, Seokjin siguió observando la escena y deseó con toda su alma poder capturar aquel tan bonito momento que estaban creando aquella pareja junto al cachorro.

Porque ahora si eran una familia y podían decir aquello a los cuatro vientos.

El día concluyó con un omega explicándole a Jungkook el como comunicarse por lengua de señas cuando este le exigía hacerlo. Era obvio que el alfa querría aprender esa lengua y más ahora que Yeonjun era su hijo, aunque no fuera de sangre era el cachorro de su omega y como Taehyung era su omega... Yeonjun ahora sería su hijo.