Narra Miley
Sí,Merle Dixon era el sujeto que desde que salimos del edificio no pensó en cerrar su boca.Su parloteo nunca pensaba acabar,bueno,solo se quejaba diciendo que un policia lo dejo esposado en el edificio.
-Bonita,ya hable demasiado y nisiquiera mi hermanita me soporta tanto ya que dice que cierre la boca.
Escuche gran parte de sus quejas al policia y al grupo en el que él y su hermana pertenecían,pero de todas formas no sentía la necesidad de hablar,ya que lo único que podía hacer ahora era solo escucharlo.
-¿Qué hace en este puto infierno una lindura como tú? ¿buscas a tu amor de secundaria? -pregunto con burla- me impresiona ver a una niña defendiendose con su katana.
-No soy una niña y no busco un maldito novio. -respondí rodando los ojos.
-Vaya,hablas hermosura.
Si,solo rodé los ojos ante su única respuesta absurda.
Ah decir verdad no dijo nada coherente desde que abrio la boca hace diez minutos.Logramos bajar del edificio y ya tenia preparada mi despedida,obviamente tomaríamos caminos separados,no tenía tiempo para seguir oyendo sus quejas del mundo.
-¿Y qué buscas bonita? Porque no creo que solo estés aquí de paseo.
-¿Que no te vas a ir con tu grupo?
-Oh no,lo siento pero no,no tengo pensado volver con esos idiotas.
-¿Y tu hermana que?
-No sabe cuidarse pero un buen susto le vendría bien para hacerse hombre.
-Anciano,yo tengo que seguir con mi camino.
-¿Anciano? Lo siento hermosa,seré todo lo que quieras menos eso.
-Escucha Merle,estoy buscando a personas y no quiero una carga más.
-Eso tendría que estar diciendo yo nena,pero me viste y ahora me aguantas.Podría ser de mucha ayuda.
-No lo creó,sigue con tu caminó.
-Tu caminó ahora es mi caminó nena.
No puede ser,ahora no puedo quitármelo de encima.Maldita sea mi bondad en las personas y en este anciano.
-¿Entonces a quien buscas nena?
-¿No te cansas de hablar?
-Mi sabiduría me da a entender que evitas mis preguntas.
¿Estaría bien decirle lo que busco a un extraño?
Tenía un aspecto duro pero si fuera un loco ya me hubiera matado.
-A mi hermano y a mi hija.
-¿En serio? ¿una hija? -pregunto sorprendido- bonita,no te ves tan grande que digamos como para ser madre,pero si eres de esas que le encanta la polla entonces lo entiendo.
-Tal vez no tenga la edad necesaria pero es mi hija.
-¿De dónde eres? Tienes un asentó latino.
-Soy Argentina.
-S-señorita Argentina.
Su asentó español no fue tan malo pero tampoco el mejor.
Su sonrisa arrogante y su mal intentó de español me causo una pequeña sonrisa.
-Ahora veo que es verdad lo que dicen de las latinas,se ve que son bastante voluptuosas.
-Ya veo lo que dicen de los ancianos de aquí.
