-🧟♂️ Jungkook y su "supuesto hermano" Taehyung se llevan muy, demasiado, mal. Pero dadas las circunstancias tendran que aprender a convivir ahora que el mundo dejó de ser el que conocían. Y en busca de sobrevivir, muchas cosas pueden enredarlos en...
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Estaba harto de caminar tantas horas seguidas, me dolían los pies y todo el cuerpo. La noche con el pasar de los minutos se hacía cada vez más presente, el olor era realmente repugnante. El frío llegó y consigo trajo unos invitados desagradables. No me veían y eso era realmente una ventaja, pero al hacer un pequeño ruido se ponían alerta. Había caminado casi un kilómetro por la autopista desierta soportando el olor a carne putrefacta, pero ahora que estaba ingresando nuevamente a Busan, todo era el mismísimo infierno.
La gente que aún estaba viva corría por doquier, asustados, otros solo se escondían temiendo ser descubiertos.
Y pensar que hace algunas horas esto estaba tan desierto como el sahara.
Intenté no pensar en los gritos, las sangre, los gruñidos asquerosos de esas cosas, y me enfoqué en pasar desapercibido pues tenía que apresurarme.
—¡N-no, papá!—esa voz la había escuchado antes, paré en seco y me volteé, estaban en el callejón. Era un chico alto, no lograba ver su cara y en realidad eso no fue lo importante, antes de que su padre le hiciera daño le lancé una piedra para llamar su atención.
—¡Eso es, acercate!—no entiendo de dónde había sacado tanta confianza, tal vez porque muy dentro sé que soy bueno en artes marciales. El hombre sediento de carne y sangre caminaba demasiado lento para mi poca paciencia así que le facilite el trabajo y me acerqué yo mismo. No le di tiempo a hacer nada y le enterré un cuchillo en la cien—, hey, chico, ¿estás bien?
—S-si, gracias—pude ver su rostro, y era quien yo creía. Wang Jackson de penúltimo año. Su ropa estaba hecha un completo desastre, al parecer había caído al lodo escapando.
Me siento excluido, porque soy el más limpio entre todos.
—Lo siento por matar a su padre, hyung—el negó con la cabeza, e hizo un ademán con la mano restándole importancia—. ¿No traes con qué defenderte?
—Si—me mostró dos cuchillos—, pero era papá... Salí de casa esta mañana y me encontré con los chicos, y cuando iba de regreso pasó toda esta locura.
La esperanza nació en mí al oír sus palabras, porque quizás él sabía donde se encontraba mi mejor amigo.
—¿De casualidad... has visto a Jimin?
Me temblaron las piernas por el miedo a su respuesta.
—Vi a YoonGi hace un rato—asintió—, pero estaba solo. ¿Quieres... que te diga por donde? No tengo nada más interesante que hacer que tratar de vivir.
Di un asentimiento con la cabeza, y le tomé del brazo. El me sonrió y comenzamos a caminar, cuidando de no hacer tanto ruido ni chocar con nadie..
—Mira—susurró Jackson señalando hacia el frente. Pude ver la espalda de YoonGi, quien sentado en un neumático fumaba un cigarro—. Tengo que irme a buscar a mis hermanas, les deseo suerte.
