Noticias y un atraco~08

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Gustabo se levantó muy temprano por la mañana, aún no entraba a trabajar sino hasta las 12 del medio día, así que tenía suficiente tiempo para hacer algunas cosas. Estaba por entrar a darse una ducha cuando su cabeza hizo click y recordó que el día anterior no había llamado a su hermano para avisarle que había llegado, debía estar muy preocupado, así que corrió de nuevo a la habitación y buscó su teléfono, estaba apagado, al encenderlo enseguida cayeron varias notificaciones, tanto de mensajes como de llamadas de su hermano. Marcó el número de este y enseguida contestaron.

H- GUSTABOOOOO!!!! ¡¡¡¿DONDE MIERDA ESTABAS?!!!! ¡¡¡¿TE PASÓ ALGO?!!!-Dijo un muy alterado Horacio, había estado muy preocupado al no saber nada de su hermano.

G- Tranquilo Osito, se me olvido llamarte, es que pasaron muchas cosas en un solo día, quiero contarte todo, primero lo primero, ¡¡¡SOY POLICÍA HORACIO!!!- Dijo muy emocionado, aún no podía creérselo y mucho menos le creería su hermano.-

H- Espera, espera, repite lo último, creo que no escuché bien.- Dijo confundido, pero sabía que había escuchado bien y se encontraba al borde del colapso ya que al menos uno de ellos ya había cumplido con su promesa.-

G- ¡QUE SOY MADERO OSITO!

H- ¡GUSTABO! Qué... Cómo... Es Increíble!!- Dijo el de cresta llorando al otro lado de la línea.- Espero yo también poder serlo algún día.-

G- Ya verás que si, de hecho puedo hablar con el supervergardiente para que te haga las opos cuando vengas a Los Santos.- El rubio estaba igual de emocionado que su hermano y ya quería que estuvieran juntos para poder meter a la trena a los gilipollas que querían pasarse de listos siendo el equipo que siempre habían sido. Horacio al escuchar la mención tan extraña de su hermano supo que había un trasfondo en ese apodo tan particular así que decidió preguntar.-

H- Ahora dime Gustabo, ¿Quién es ese Supervergardiente del que hablas.- Dijo en tono insinuante, porque sabía que su hermano no ponía motes por nada. Gustabo se sonrojó porque sabía que su hermano lo conocía tan bien como para saber que hay algo con el Super-

G- Emmm, está bien te cuento como pasó todo.- Y así fue como contó toda la travesía que pasó cuando llegó a Los Santos, todo con lujo de detalles, no se le escapaba nada, hasta que llegó a una parte muy importante y era decirle que su novio estaba vivo, no sabía como decirlo, así que pensó en un plan para que se reencontraran, por tanto cuando contó lo de las opos no dijo el nombre del comisario que estaba allí, lo maquilló con que se le había olvidado el nombre.- Osito, que tal si te vienes pasado mañana, es más seguro que estemos juntos, recuerda que allá tenemos muchos enemigos, además te extraño mucho osito.- Era para una buena causa, solo quería que su osito fuera feliz con la persona que más ama, porque sabe que nadie pudo llegar al corazón de su hermano como lo hizo el ruso. Horacio se lo pensó unos momentos, pero sabía que allá tendría más oportunidades de salir adelante.-

H- ¡Está bien Gustabo! Pero para que esperar, mañana mismo me iré, estoy muy nervioso, TE QUIERO GUSTABO.- El ojiazul soltó una risita, porque sabía que su plan funcionaría a la perfección, pasaron tanto tiempo hablando que el rubio no se percató que solo faltaba media hora para entrar de servicio.-

G- ¡OSTIA! Que se me ha hecho tarde osito, te llamo luego o me avisas para recogerte mañana si, te quiero guarro.-

H- Yo también te quiero Gusnabo.- Y la llamada termino.

Gustabo corrió por todo su departamento arreglándose, no podía llegar tarde en su segundo día de trabajo, cuando faltaban 10 minutos salió de su departamento, estando en el elevador recordó que no tenía su auto así que efectivamente llegaría tarde. Al salir del edificio grande fue su sorpresa al encontrar a Conway apoyado en un patrulla fumando un cigarro de lo más tranquilo, se tomó su tiempo para apreciar a tan bello hombre y luego se acercó a él.

El Demonio que se enamoró de mi - JackstaboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora