Capítulo 5: Bajo la sombra de un cerezo

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Tres días después de lo ocurrido en la obra de teatro podíamos ver a un Jack renovado y relativamente fuera de peligro.

En un principio le iban a dar el alta el mismo día en el que los resultados de los análisis fueron revelados. Pero se quedó en el hospital un día más por dolores en los músculos y en algunas articulaciones. Todo debido a que en los días anteriores su alimentación no había sido la mejor y esto le genero esos dolores. No era nada grave pero decidieron que lo mejor era que se quede allí un día más para nutrir nuevamente su cuerpo y poder darle la dieta correcta. Está dieta consistía en alimentos bajos en grasas, poca azúcar y poca sal. Nada de gaseosas, salvó que fueran sin azúcar aunque era recomendable evitarlas.

En cuanto a la medicación asignada no había mucho que destacar. Se le fueron dados medicamentos para aliviar los dolores que pudiera llegar a contraer, además de un medicamento especial llamado "Betabloqueante".
Una pastilla por la mañana, otra por la tarde y una por la noche. Siguiendo estas instrucciones relativamente podría llevar una vida normal.

Legosi se había vuelto un reloj andante. Había adquirido la manía de llevar un reloj en la muñeca para poder saber siempre la hora y así cerciorarse de que Jack tomará las pastillas a tiempo. Además de eso llevaba programadas 5 alarmas en su teléfono (3 para los "Betabloqueantes" y 2 para las pastillas que calmaban el dolor) y no contento con todo esto había adquirido el hábito de preguntar todo el tiempo a Jack si tomo su medicación, en especial porque una de estas pastillas debía tomarla durante sus clases especiales, ergo, cuando no estaban juntos. Según Jack solo faltaba que Legosi se tatuara el horario en el brazo.

El resto del grupo también había tomado otros hábitos. Por ejemplo, habían empezado a ser más ordenados para así impedir que Jack se viera forzado a organizar la habitación, pues el perro no soportaba el desorden y cada que veía algo fuera de su lugar no dudaba en ir a acomodarlo.
"El maníaco de la limpieza" le decían algunas veces. En fin. Eso ayudaba a que pudiera estar más relajado.

Lo demás no cambio mucho. La única clase en la que no debía asistir obligatoriamente era gimnasia. Lo único que debía hacer era compensar todo con trabajos prácticos y podría adeudar la materia.

Era obvio que estaban pasando por un momento difícil. Pero Jack y sus amigos estaban decididos a superarlo.

***

Como de costumbre los 6 caninos se sentaban  juntos en la misma mesa de siempre, una mesa que fue estrategicamente escogida por Jack. Según el la mesa estaba ubicada lo más cerca de la cocina, por lo cual la comida llegaba más caliente. Además estaba ubicada en un lugar en el que el barullo no era muy fuerte por lo que podían conversar tranquilamente. Como punto extra la mesa estaba en el camino de una corriente de aire que entraba por una ventana del costado, lo cual era agradable en el verano. Collot decía que Jack estaba demasiado obsesionado con "The big bang theory" y por eso eligió esa mesa.

Era el mediodía y, como mencioné anteriormente, estaban los 6 en la mesa. Bueno, en realidad estaban Legosi, Jack y Voss. Los demás habían ido a comprar el desayuno.

—Veamos... El almuerzo especial de hoy es... ¡Oh si! Tofu frito y arroz frito con una rebanada de pan —exclamó alegre Miguno.

—Eso es genial, pero recuerda lo que acordamos ayer. —dijo Collot mirando disimuladamente a Jack.

—Rayos... Es verdad...

Miguno eliminó toda tentación de comer el ansiado tofu y se encaminó al mostrador para pedir el desayuno.

***

PARTE DE MÍ (Legoshi x Jack)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora