NOBLESSE - La Amante - Frankenstein

El recuerdo

Dime lo que sientes,
El dolor no se olvidará,
Revela tus sentimientos,
Tu corazón te delatará,
No puedes huir de mi,
Soy tu amante.

Somos uno, ¿recuerdas?

- ¡jefe!

- ¿eh? ¿Tao?

"¿distraído de nuevo, Víctor?"

Tao - disculpe, jefe, jajaja, ¿dónde ponemos esto?

Todos estaban en el sótano limpiando, al parecer, aún con lo grandes que son se metían en problemas, él, más que ser su jefe, parecía el padre de familia, con lo responsable y estricto que es él, no duda en aplicar regaños y castigos.

Frankenstein - ah, sí, pónganlos allá

Los chicos de mi querido hombre acataron sus órdenes, él estaba pensando en nuestro pasado últimamente, no creyó volver a recordarme en un momento como este.

Frankenstein - amo, ¿sucede algo?

Raizel - Frankenstein, noto melancolía en ti, ¿está todo bien?

Sin dudas el maestro de mi amor perdido lo quería bastante, gracias a él seguía viviendo y él lo daba todo por su amo, ¿por qué no hice lo mismo? Yo quería compartir ese destino con él, pero como los mismos humanos dicen, "hasta que la muerte los separe".

Frankenstein - sí, jaja, no se preocupe, amo

Raizel - ...

Su maestro se limitó a suspirar, sabía que mi amado no le diría nada, así que aceptó esa contestación como respuesta; no lo hagas, Víctor, por favor, es precisamente guardar remordimiento lo que te ha llevado al borde de la locura en tu vida, tal como sucedió con nosotros, ¿recuerdas? No lo repitas.

Tao - aún no entiendo por qué tenemos que limpiar todo esto

Takio - fue tu culpa por convencernos a husmear el sótano, si no fuera por ti, el jefe no nos hubiera descubierto

Regis - les recuerdo que nosotros también estamos aquí limpiando este desastre

Tao - perdón, jaja, el sótano es un lugar inexplorable, ni siquiera sabía que existía hasta hace poco, me mataba la curiosidad

Rael - no puedo creer que me hayas convencido de hacer una tontería como esa

Los chicos de mi amado son curiosos, ¿no? Son unos niños mimados y la mejor familia para tener en casa, hay mucha presencia masculina en su casa, excepto por la señorita peliblanca que el líder del clan Kertia añoraría tener.

Seira - ¿mm?

¿Sucede algo, linda? Ohh, eso... parece que te encontraste con nuestro recuadro, a Víctor no le va a agradar esto.

Rael - ¿pasa algo, Seira? ¿necesitas que te ayude?

Seira - mmm...

Rael - ¿qué miras? ... ¿eh?

No... niños, no se atrevan, si Víctor los ve, no sé cómo reaccionaría.