MÍOS

IV.

Aunque Keno se veía relajado, por dentro se preguntaba una y otra vez qué diablos había hecho. Pretendía que escuchaba lo que Eve le contaba, pero realmente no sabía que era lo que le decía. Algo de su novio y sus viajes seguramente.

Si tenía que ser sincero consigo mismo, sentía que estaba empezando a ser mal tercio de una pareja que ya se había consolidado, aunque todavía fuera un secreto para el equipo contrario, Rosique y la producción. Javi se había pegado a él en cuanto entró. No había sido difícil para él abrirse al tapatío. Siempre se consideró alguien sociable y más si la persona le agradaba y Javier le había agradado desde el primer momento. Pero Pascal le había gustado.

Pascal tenía una mirada penetrante y misteriosa. No sabías que pensaba cuando miraba a alguien. Si te juzgaba, si se reía internamente de ti, si le agradabas y no lo demostraba... Y eso le gustó. Pero una punzada de algo que no supo interpretar en aquel momento, cruzó su estómago cuando vio a Javi darle un cariñoso beso en la frente y taparlo bien. Se veía íntimo y romántico. Y ahí supo que eso sólo significaba que aquellos dos mantenían una relación. Sólo por reconfirmar, le preguntó a sus amigos y ellos le dijeron todo sin problema. 

Entre sus tantas pláticas con Javi, supo que él estaba nervioso y preocupado porque parece que en producción ya se empezaban a imaginar que entre las torres gemelas estaba pasando algo no amistoso. Javi pensaba que lo mejor era que mantuvieran distancia por algunos días hasta que todo se calmara, pero parecía que a la mínima intención de alejarse, se volvían más unidos que antes.

Keno supo que no había ninguna posibilidad con Pascal cuando este le dio una mirada furiosa mientras platicaba con Javi. Lo veía como una amenaza y Keno no tenía intenciones de serlo. Pero algo estaba pasando y no tenía mucha idea de qué era.

Javier se comportaba con él de una forma diferente a los demás. Lo tocaba cada que podía. Lo abrazaba por la cintura y lo pegaba a él. Aunque al principio no le tomó importancia a eso, pensando que era algo habitual en el hombre, el hecho de que Pascal estuviera celoso lo hizo creer algo que de verdad no quería.

Cuando los vio llegar a ambos, después de perderse por un buen rato la noche que perdieron el premio colosal, se veían sonrojados y satisfechos y se cambiaron de ropa enseguida que entraron a la cabaña a pesar de que ya lo habían hecho y sólo eso sirvió para que estuviera -casi- seguro que sólo era imaginación suya que Javi tuviese otras intenciones con el. Incluso al día siguiente, a pesar de que Javi volvió a sus extrañas atenciones, Pascal llegó todo sonrisas y besó al tapatío.

En la contrareloj masculina, Keno no se separó ni un minuto de Pascal y Pascal no huyó ni lo alejó. Estuvieron platicando, dándose consejos y siendo demasiado amistosos por primera vez. Keno quería que su compañero supiera qué él no era una amenaza en su relación con Javier, pero entre más estaban juntos, Keno más fascinado se sentía y llegando el final de la prueba, no pudo evitarlo. Cuando el silbato sonó dando por ganador a Pascal, se subió a él por atrás y lo abrazó con fuerza. El fuerte olor que despedía, a sudor, agua clorada y adrenalina pudo con su razón y le besó el cuello. No estaba seguro si alguien lo había visto y no quería saberlo. Tampoco estaba seguro de qué pensaría Pascal de eso. Quería creer que no sintió nada por la emoción del momento. Y aunque Pascal lo vio extrañado mientras los llevaban al siguiente circuito, todo siguió como si nada y Keno respiró tranquilo por algunos días.

La salida de Cecy fue algo inesperado para el equipo.  Todos estaban ya resignados a que Valery fuese la siguiente en salir. Para Keno fue un golpe un poco fuerte. A pesar de conocer desde antes a ambas chicas, a Cecy la estimaba más. Wushu había estado subiendo a raudales su nivel a diferencia de Val quien después de la primera semana había ido en descenso. Eso sin mencionar que Val parecía querer algo con Keno y él fingía demencia para evitar algún corazón roto.