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Capítulo 8: Punto de Ruptura

Capítulo VIII: Exámenes Chunins. 2° Parte: Punto de Ruptura

Resumen:

Es la segunda etapa de los Exámenes Chunins, y el Equipo 7 se encuentra en el Bosque de la Muerte. Las cosas se vuelven demasiado para nuestra pobre Sakura, y se queda sin opciones.

Durante y después de los Exámenes Chunins; el entrenamiento de Sakura había llegado a su punto más peligroso hasta la fecha, ya que el plan de Naruto parecía llegar a un punto crítico. A lo largo de ese período de tiempo; diminutos vibradores se dirigieron a los pezones y el clítoris de la concha, la sensación contra ellos provocaron que las zonas erógenas de la kunoichi se endurecieran por la excitación. Ella también tenía un consolador vibrador colocado en su vagina, la tula de 25 centímetros de largo golpeando repetidamente el interior de Sakura. Imitaría el palpitar, el tamaño y el poder del propio Naruto, abriendo el agujero de la pelirrosa; Naruto con la esperanza de que hiciera que su concha se ajustara perfectamente a su verga. Todo empeoró por el simple hecho de que Sakura, por diseño de Naruto; tenía un sello especial colocado en su cuerpo, evitando cualquier tipo de orgasmo cuando la chica alcanzaba los niveles máximos de placer. El sello funcionó, de esa manera, similar a una jaula en el pene para un chico; su cuerpo sería objeto de burlas, pero no era posible ninguna forma de liberación. Ahora, mientras su cuerpo ansiaba una liberación que nunca llegaría; Sakura trató de luchar contra ella, de contenerse, sabía lo que significaría si se sometía por el placer; ella deseaba evitarlo. Naruto, aunque no es el shinobi más inteligente del mundo, podía prever tales circunstancias. Sabía que Sakura no se sometería tan fácilmente debido a la maldición del placer; por lo que se resignó a acelerar un poco más las cosas cuando comenzó la Segunda Etapa de los Exámenes Chunins, los equipos que pasaban se dirigían al Bosque de la Muerte.

"Esto va a ser difícil... ¿Luchar con esas cosas puestas y dentro de mí? ¡Apenas puedo hablar, y mucho menos luchar así!". -Pensó Sakura, encontrando difícil formular una manera para que ella pudiera combatir efectivamente en este momento. Mientras estaban parados fuera del Bosque de la Muerte; Sasuke le habló de manera autoritaria, diciendo.- "No sé qué te pasó contigo, Sakura; pero deja de hablar. No te necesito a ti y a ese idiota que me retiene". --La cara de la pelirrosa se puso aún más roja ante los comentarios de Sasuke; asintiendo con la cabeza mientras mantenía sus labios cubiertos a la defensiva. Deseó poder explicarle, para asegurarse de que Sasuke no pensara mal de ella; simplemente no estaba segura de cómo hacerlo con seguridad mientras esos juguetes pulsaban contra sus zonas sensibles.

En lo que pareció ser muy poco tiempo, los solicitantes fueron presentados a la supervisora Anko Mitarashi; firmaron las renuncias sobre su posible muerte durante esta parte de los Exámenes Chunins y se estaban preparando para ingresar al Bosque de la Muerte. Por supuesto, con esos juguetes atornillando el cuerpo de Sakura y su capacidad de concentración; la pelirrosa no podía firmar su nombre con demasiada facilidad. Cada empuje del consolador, y la onda expansiva de placer en el cuerpo de Sakura; dejaría su cuerpo balanceándose, incapaz de escribir con claridad. Sin embargo, se las arregló para hacerlo, y finalmente fue vista con el resto de su equipo cuando recibieron el pergamino del Cielo.- "Me imagino que tendré que modificar algo de la historia para esta línea de tiempo, con respecto a esta etapa de los Exámenes Chunins. Pero supongo que no dolerá si obtengo lo que quiero de todo esto". -Postuló Naruto, mirando a Sakura mientras ella parecía retorcerse y gemir en agonía... bueno, agonía y placer. Muy pronto, el chico rubio se aventuró en el Bosque de la Muerte con su equipo, sus compañeros de Konoha y el resto de las aldeas. Viajar por las ramas de los árboles que saltaba resultó desastroso para la pobre Sakura; ya que cada aterrizaje parecía empujar ese consolador más intensamente contra la entrada de su útero; haciendo que esta tortura fuera mucho peor en la concha.- "¡Mierda!. ¡Mierda!. ¡Mierda!. Esto es un infierno total. Pero es para ti, Sasuke. Será para ti". -Pensó Sakura, suaves gemidos escapaban de sus labios con cada aterrizaje. Afortunadamente, parecía que Sasuke no estaba al tanto de esos sonidos obscenos. Naruto, por otro lado, se mantuvo cerca de ella; para poder escuchar esos gemidos sin problema. Bueno, eso y así el rubio pudo activar ese sello en su mano una vez más; potenciando esos juguetes aún más de lo que ya estaban. Como sucedió, Sakura pudo sentir su autocontrol llevándose al límite; encontrando un gran desafío para contenerse. Todo ese placer interminable, la falta de capacidad para llegar al orgasmo, y hacerlo cuando alguien podía escuchar sus gemidos; era demasiado para la pelirrosa. Con una determinación odiosa de terminar con estos juegos; Sakura se detuvo de repente, manteniendo la cabeza gacha mientras apretó los puños.- "¡Carajo! Ya no puedo manejar esto...". -Pensó ella, sintiendo una sensación de derrota cuando admitió para sí misma que este no era un escenario que se pudiera ganar.