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Capítulo 7: Miseria en el Placer

Capítulo VII: Los Exámenes Chunins. 1° Parte: Miseria en el placer

Resumen:

Llegaron los Exámenes Chunins y Naruto llama a Sakura para que le ponga nuevos "juguetes". Solo cuando comienzan a dirigirse a los Exámenes Chunins, Sakura se da cuenta de lo mal que se van a poner las cosas.

"¿Qué es lo que quiere?". —Pensó Sakura, encontrando una nota que le habían dejado precariamente el día de sus Exámenes Chunins. Era temprano, mucho antes de reunirse con los otros equipos y ser probado con técnicas de recopilación de información. Naruto, claramente, tenía algo depravado en mente para esta kunoichi de cabello rosado; quien se puso cada vez más nerviosa mientras se dirigía al apartamento del chico rubio.— "Es mejor que su entrenamiento no arruine mi exámen; ese idiota". —Pensó para sí misma, llevando el viaje a su ero-sensei a su casa; mordiéndose el labio mientras pensaba en todos los horribles planes que Naruto podría tener en marcha para ella. Para cuando ella llegó, Naruto estaba completamente preparado para sus planes; tenía todas sus herramientas al alcance y tenía Clones de las Sombras al acecho, suponiendo que Sakura resistiera sus órdenes. Vale la pena estar preparado, como dice el refrán. La invitó a pasar con una sonrisa de suficiencia en el rostro, pero no tenía tiempo para juegos.— "Los exámenes comenzarán pronto, así que tendremos que hacer esto breve". —Con esas palabras, Naruto llegaría a una mesa cercana, agarrando algunos artículos antes de girarse para mirarla, verificando dos veces para asegurarse de que cerró la puerta. Bien, nadie vería o escucharía esto... él pensó.— "Entonces, Sakura, estos...",—comenzó, mostrándole los artículos, — "son una especie de masajeador. Destinado a masajear tus zonas erógenas; tendrás que ponértelos, así que tienes que desvestirte". —Para ser perfectamente honesta, Sakura tuvo una leve indicación de lo que el rubio había querido decir, sabiendo un poco qué eran esas herramientas con forma de huevo. Ella quería a nadie decir, pero la idea persistente de...— "¿y si me ayudará a ganar más de Sasuke?", — mantuvo a Sakura obediente. Se quitó el vestido qipao y la ropa interior, exponiendo sus senos del tamaño de una naranja y la parte inferior del cuerpo creciendo del ero-sensei de ella.— "Llevarás tres de estos". —le informó Naruto, colocando uno en cada uno de sus pezones y otro en el clítoris de Sakura, forzando a Sakura a gemir. Poseían propiedades adhesivas, lo que les permitía adherirse a su cuerpo de manera inofensiva.

Solo que, en este punto, Naruto sacó otro elemento, un elemento bastante fálico, para ser específico.— "¡¿Qué mierda es eso?!" —Sakura cuestionó, perdiendo la compostura por el último juguete que sacó Naruto. No es que tuviera cero pista en cuanto a su propósito u origen.— "Bueno, seguro que Sasuke querrá hacerlo contigo todo el tiempo cuando estén juntos; así que ¿por qué no acostumbrarte a tener un pene dentro de ti todo el tiempo?" —Propuso Naruto, el juguete casi coincidía en tamaño con el rubio; mordiéndose los labios, respondió.— "Supongo que tiene un poco de sentido". —Naruto pensó para sí mismo.— "¡Qué tonta!" —  sorprendido de que Sakura pudiera ser tan fácil de manipular; incluso si eso hacía su plan mucho más fácil. Después de todo, es tan fácil engañar a alguien tan ciegamente enamorada. Él la ayudaría a insertar con cuidado el gran juguete; gemidos y una cara enrojecida que mostraba cuánto disfrutaba Sakura de tener su concha abierta de esa manera. Y así, Naruto aplaudió, su atuendo ahora terminado, y los Clones de las Sombras ocultos se dispersan.— "Está bien, todo lo que queda es que te vistas", —le ordenó, mirando a la pelirrosa retorcerse mientras se ponía los calzones, el vestido qipao con el sujetador sobre su cuerpo en desarrollo.— "Ay carajo, Naruto... ¡Vas a pagar por esto!" —Murmuró, saliendo cojeando de su apartamento mientras el rubio le sonreía con picardía mientras la seguía. Mientras el dúo caminaba, pasaron y saludaron a los otros equipos en su aldea, con Sakura mirando fijamente a una Ino Yamanaka; la misma Ino con la que Sakura peleó por Sasuke. Cuando finalmente se agruparon con Sasuke, Sakura se adelantó para saludarlo, sonriendo mientras hablaba.— "¡Oye Sas- Ah!" —Mientras Sasuke la miraba confundido; Naruto sonrió, las herramientas parecían funcionar bien. Había activado el sello que controlaba esos juguetes al infundir chakra en su mano, la repentina oleada de masajes forzó una reacción de Sakura. La pelirrosa cubrió su boca, su rostro enrojecido le hizo saber a Naruto que los vibradores y el consolador aún estaban activos.   

Como lo hizo con Ino, Sakura miró al chico rubio con desprecio, sabiendo que él era el responsable de esto.— "Caray, Sakura, no te ves tan bien... ¿Seguro que estarás bien para los exámenes?— "Comentó Naruto, refiriéndose tímidamente a su cara roja.— "Sí-sí, idiota- ¡Ah! ¡Seré chuuu!" —Sakura respondió, encontrando difícil controlar sus gemidos cuando necesitaba hablar. Sasuke, que nunca se concentró en nada sexual, no entendió lo que estaba pasando. Solo se centró en las posibles amenazas que tenían ante ellos: Rock Lee y Gaara del Desierto. Parecían ser más importantes que cualquier tontería que le estuviera pasando a Sakura. Naruto, sin embargo, tenía su atención fija en Sakura y sus reacciones a las burlas— "Lo mataré. ¡Mátalo!. ¡Mátalo! Lo juro, ese idiota está muerto". —Sakura pensó para sí misma, enojándose mucho por las burlas sin palabras de Naruto. En cuestión de minutos, serían reunidos en un salón de clases, probados por un Jounin Especial llamado Ibiki Morino. El experto en interrogatorios y torturas les dio preguntas que solo un Chunin sabría; queriendo que hicieran trampa para demostrar que pueden recopilar información cuando sea necesario. Mientras el futuro Hokage fingía no saber nada; observó a Sakura, quien había estado sofocando gemidos para evitar ser detectada.— "Ella lo está reteniendo hasta ahora; pero, eso no es muy divertido, ¿verdad? ¡Hagamos las cosas interesantes de nuevo!" —Naruto pensó, colocando un poco más de chakra en su mano para activar ese sello una vez más.— "¡Ay me vengo! Quiero decir... ¡Me dolió! Lo siento todo el mundo". —Sakura gimió. Las acciones de Naruto hicieron que esos pequeños vibradores con forma de huevo y esa penetración dura y fálica agitaran las cosas a un ritmo más rápido. Las vibraciones en las zonas erógenas de Sakura se hicieron más intensas; mientras que el consolador vibrante agitaba el interior de Sakura como una verga palpitante que se estrelló dentro de ella. Sakura estaba siendo torturada con placer en un lugar muy público; con compañeros shinobis de Konoha, Suna y de otras aldeas, allí para verla. Escuchar esos gemidos definitivamente había provocado sonrojos y reacciones nerviosas en los chicos y chicas mayores y sexualmente más maduros que la rodeaban. Y, aunque nadie dijo nada, Sakura se sintió mortificada cuando apretó los dientes contra sus labios, desesperada por no volver a gritar de placer. — "¿Qué esta mal con él? ¿Qué me pasa? Tengo que calmarme". —Sakura pensó; esafortunadamente, Naruto no se rindió con la tortura sexual. 

Minutos después del arrebato, Sakura sintió que se acercaba al orgasmo; pensando que le iba a dar algo de alivio. Solo que ese momento no llegó en absoluto; era como si su cuerpo sintiera la necesidad, pero su capacidad para llegar al clímax se había interrumpido. Entonces, mientras hacía todo lo posible por trabajar en este exámen escrito; estaba experimentando una agonía sin fin, mientras le dolía la concha y los sensitivos se mantenían erguidos en atención, deseando un dulce alivio. Sakura entró en pánico internamente.— "Este imbécil... él hizo esto, lo sé. Pero, cuando?... Si tengo que seguir lidiando con esto, siento que podría volverme loca. Peor aún, mi conchita podría moldearse a la forma de su verga". —Esos pensamientos y más inundaron la cabeza de Sakura, enterrando su rostro en el exámen escrito. Naruto simplemente apoyó la cabeza en su codo y miró con una mirada de deleite en su rostro. — "El plan para los exámenes era intentar romper su mente, conseguir que fuera con él para tener sexo y estar desesperada por atención. Si eso sucediera, podría conseguir que ella hiciera lo que quisiera. A juzgar por cómo se ve en este momento, tal vez la lleve a un lado una vez que entremos en el Bosque de la Muerte... Veré si puedo divertirme antes de que nuestro equipo sea atacado". —Naruto pensó, sin dejar de fingir que no sabía lo que estaba pasando, tanto con Sakura como con el exámen escrito. La simulación, sin embargo; no duró mucho más, ya que el exámen escrito pronto llegó a su fin. Ibiki hizo lo mismo que en la línea de tiempo de Naruto, admitiendo el propósito de este exámen y aprobando al equipo de Naruto, entre varios otros. Con esa noticia, Naruto y Sasuke se prepararon para el segundo exámen; mientras Sakura experimentaba la interminable miseria del placer, sin esperanza de un clímax. Al menos, no hasta que Naruto lo permita.

Continuará...