CAPÍTULO EXTRA: mi deseo de año nuevo.
Año 2005
Estaba oscuro afuera, y la brisa decembrina en mi ciudad normalmente no era tan fría, pero curiosamente ese año sí estaba helando. Por lo que tenía un suéter sobre mi ropa de fiesta.
Mi madre tenía la costumbre de que en cada año nuevo había que recibirlo con prendas completamente nuevas, desde la ropa para la cena hasta el pijama que nos pondríamos para dormir.
Mirando las estrellas en el cielo, me sentí pequeña, primero porque lo era, apenas tenía 17 años cumplidos hace poco, y segundo, por la inmensidad del universo. Tanta vida, los continentes, los países, tantas personas, billones de ellas, aun con eso que dicen que hay 7 personas exactamente iguales a ti, y solo había ahí afuera alguien destinado para mí.
Todos mis conocidos parecían haber encontrado su otra mitad, hasta mis padres, solo que no en ellos, sino en terceros, y eso estaba bien. Muchos pensarán que tal vez me estoy ahogando en un vaso de agua, pero la verdad es que mi futuro me aterra, el no saber las cosas me hace sentir insegura, el no entender hacia donde se dirige mi vida. O si la estoy encaminando bien.
Son tantas decisiones tomadas en tan poco tiempo, tantas personas que se han alejado, que mi vida se siente como más desequilibrada que antes.
Creo que elegí una carrera en la que no siente ninguna compatibilidad, ¿las finanzas son lo mío? O ¿debería intentar alguna otra cosa? Me siento perdida.
Óscar y yo ya no nos hablamos definitivamente, discutimos. Al parecer su nueva novia lo hizo elegir, y él parece haberlo hecho.
Lo único que le pido a la vida es un poco de estabilidad y dirección.
La brisa movió mi pelo, y sentí frío. Mucho más frío, me encogí en mi lugar. Parada en medio de las flores del jardín de la casa de mi abuela materna.
Algo que no veo casi nunca paso ante mis ojos, una estrella fugaz.
Cerré mis ojos y pedí un deseo.
Dame un poco de orientación y deseo conocer a esa persona que se volverá tan especial en mi vida, y si ya está en ella, haz que se me haga más fácil verla.
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Maia
Teen Fiction"... El destino, dicen, da vueltas y más vueltas, siempre acabando en el mismo lugar, haciendo que nos encontremos con las mismas personas ya sean queridas, o no, seguramente. Pero lo que realmente nos aseguran, es que, todo pasa por algo." Maia, un...
