Sweet Family

25.

Libros, cuadernos, colores, lápices, carpetas y algunas otras cosas llenaban un carrito de compras. Era sábado y la familia Kim llevaba casi dos horas recorriendo los pasillos de aquella tienda, los pequeños se emocionaban con diferentes útiles que no debería usar hasta algunos años adelante, lo que tenía a NamJoon corriendo tras ellos y a Jin, buscándolos para que Yoongi aprobara los diseños de sus cuadernos.

Afortunadamente el tema de cuadernos quedó resuelto, ahora, el tema de la maleta y la pequeña lonchera había creado un debate entre los adultos, Yoongi y Tae, este último insistía en que una maleta que casi doblaba el tamaño de Yoongi era la adecuada, los adultos encontraron una perfecta, pero el color no convencía al pequeño, y Yoongi, quería una linda maleta negra, con un estampado de gatitos, pero nadie le prestaba atención, por lo que la tomó y la dejó-como pudo-en el carrito, acercándose a Jin para halar su pantalón.

--Papi…ya…

--¿Ya qué mi amor?

--Maleta, quiero esa---señaló la que había escogido---me gusta…

--Es muy bonita---sonrió---busquemos la lonchera y el estuche para los colores…

--¿Puedo subir?---señaló el carrito

--Esta bien, pero te quedas quietecito…

--Si señor…---aseguró sonriendo---allá…

--No amor, allá ya fuimos, debemos ir al otro lado…

--Pero papá y TaeTae…---señaló con su pequeño dedito, haciendo pucherito al no poder ir con su papá y hermanito

--No mi cielo, tú tienes que elegir las cosas que faltan…

--Aburrido---puchereó cruzando sus bracitos

--Vamos, ¿Te aburre estar con papi?---preguntó haciendo un puchero---¿Quieres ir con papá y Tae a divertirte?

--No papi. Eres diveltido…

--¿Mucho mucho?

--¡Muchote!---gritó extendiendo sus bracitos

--¿Me das un besito?

--Pero papi también da besito---condicionó

--Trato

Sonrió y se acercó para recibir un tierno y tímido besito en una de sus mejillas, dejó escapar una pequeña risa para luego llenar la pequeña carita de su hijo de muchos besitos, disfrutando las hermosas carcajadas que dejaba escapar Yoongi.

Como lo pidió Jin, Yoongi terminó de elegir lo que hacía falta y en el carrito terminaron varios cuadernos de mas y una pequeña maleta de color rojo con pequeños lunares amarillos y azules.

Las bolsas con las compras reposaban en el baúl de la camioneta, Nam había ido a dejarlas mientras Jin y los niños lo esperaban en la pizzería de siempre. Cuando llegó al lugar, no pudo retener la enorme sonrisa que se dibujo en sus labios al ver como sus dos pequeños hijos se turnaban para dar cariños a su padre, recibiendo dulces besos y tiernos abrazos por parte del mayor. Caminó hasta ellos, reclamando los cariños de su familia que fueron dados de forma inmediata.

El sol estaba en su punto mas alto y en la sala de aquella gran casa el calor era un poco sofocante. La mesa estaba llena de los útiles de Yoongi, separados en dos grupos, los que ya tenían el nombre del pequeño y los que faltaban.

Jin estaba aprovechando que Nam se había llevado a los pequeños a jugar al parque, organizando la pequeña maleta que su hijo tendría que llevar el día siguiente, ya en su habitación el uniforme debidamente organizado y los zapatitos brillantes esperaban en el closet, anunciando el inicio de una nueva etapa en la vida del menor. Una sonrisa un poco nostálgica se dibujó en sus labios, pero, es que aun no creía que su pequeñito entraría a estudiar, y tenía miedo, su lado sobreprotector quería salir, manifestarse diciendo que Yoongi era muy pequeño y que él, como un buen padre podría brindarle la educación necesaria. Quería evitar ver a su pequeño llorar por alguna herida que seguramente aparecería al jugar, o verle triste por tal vez no tener amiguitos, pero del mismo modo, quería verlo llegar feliz, con el uniforme sucio luego de un día de diversión, verlo alegre y decirle lo orgulloso que estaría con cada logro y apoyarlo cuando llegara corriendo buscando su ayuda para alguna tarea.

El sonido de la puerta al abrirse y las pequeñas voces que le llamaban a gritos lo sacaron de sus pensamientos, justo antes que dos pequeños cuerpos se estrellaran con sus piernas, dejando escapar bellas carcajadas que lo llenaban de vida.

--Hola mis amores…

--Hola papi…---saludaron los pequeños al mismos tiempo

--¿Dónde está papá?

--Ya viene…

--Trae un regalo para papi…---gritó Tae, pero rápidamente se cubrió la boquita con sus manitas, acción seguida por Yoon---es secleto…

--Es sorpresa TaeTae…

--Puedes hacerte el sorprendido---la voz de Nam hizo presencia---hola cielo

--Hola Nam…---saludó---dame mi regalo…

--Te compramos un postre y trajimos el almuerzo….

--Gracias, no quería cocinar…

--¡Papi! Mira…---pidió Tae levantando la maga de su camisa, dejando ver una pulserita

--Que linda mi amor….

--Hyun tamben tiene…---informó tomando el bracito de su hermano para mostrar dicho objeto---papá las compó…

--Están hermosas…---sonrió---puedes llevarlos a lavarse las manos, voy a servir…

--Esta bien, pequeños, vamos a lavarnos las manitas…

Luego de almorzar, Jin terminó de organizar todo, escuchando de fondo las dulces risas de sus hijos y su esposo, quienes jugaban en el jardín. Cuando dieron las cinco, Jin fue por los pequeños para darles un baño, les preparó un poco de leche achocolatada y pusieron una película en la sala. Bastaron cuarenta minutos para que los pequeños cayeran dormidos, ambos adultos los llevaron a su cuarto, dejaron un besito en cada cabecita y salieron.

--¿Estás listo para mañana?

--La verdad, no, no Nam, no creo estar listo…---contestó sentándose en la cama---y tú, ¿Estás listo?

--Definitivamente no---dijo sin pensarlo---pero, es algo normal y Yoon y Tae deben hacerlo…

--Lo sé, créeme, pero es mi hijito, Nam, es mi bebé y no es fácil…

--Tienes que estar tranquilo, si Yoon te ve así mañana se va a asustar y no queremos eso, ya debemos estar preparados para Tae…

--Esta bien, tienes razón---asintió---es hora de dormir amor, mañana nuestro pequeño empieza una nueva etapa…

--Y tú y yo estaremos siempre con él…---besó al mayor---relájate, estará bien…

--Eso espero…---murmuró para él---eso espero…

I💜YOU