Capitulo 55: Viva México

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Pasaron siete días desde aquel asesinato hacia el demonio que había causando Akko, era las 5:30 a.m. y Diana se encontraba dormida, ya había recuperado la movilidad de sus piernas, aún que tenía que usar muletas para mantenerse de pie.

Está vez Diana estaba dormida con las cobijas fuera, pues por alguna extraña razón tenía mucho calor, tanto que hasta había dejado la ventana abierta, solo que no contaba con el sueño que estaba experimentando; se encontraba encadenada en una silla frente a un horno, el cual se encontraba encendido, con la temperatura muy alta, tanto que ni siquiera podía abrir los ojos por el sudor, pero eso no impedía que viera lo que parecía ser una mano encima de la parrilla, Diana se veía asustada hasta que vio un líquido recorrer la mano, parecía venir de arriba, por lo que Diana volteo la mirada hacia arriba y vio que se trataba de Akko vertiendo una botella de aceite, sin quitar la mirada hacia ella.

- Akko: ¿Tienes hambre de enseñanza?

Diana no podía hablar por el miedo que le hacía sentir Akko, como si estuviera en el mismísimo infierno.

- Akko: Te enseñaré a respetar.

De un brinco, Akko se colocó detrás de Diana y abriendo el horno con lo que parecía ser una pata de araña de parte de Akko, aventó sin ningún esfuerzo a Diana dentro del horno, sin poder salir mientras que pegaba gritos de dolor, sintiendo como las llamas atravesaban su cuerpo, para terminar despertando muy asustada.

- Diana: (suspiros descontrolados) Ya no puedo más, tengo que encontrar esa maldita casa, aún que me cueste la vida.

Una vez que Diana se comenzó a calmar, se dio cuenta de que por el susto se había orinado ensimá, por lo que avergonzada, intenta lavar las sábanas sin que Hannah y Barbara se enterarán, mientras estaba en el baño lavando todo, se le encontraba llorando, desesperada por terminar con todo lo que había causado, hasta que unos misteriosos golpes se comenzaron a escuchar en la coladera de la regadera, por lo que confundida, intenta ver si se encontraba alguien, claramente estaba oscuro y no podía ver nada, hasta que vio una luciérnaga de color verde, la cual se comenzó a acercar poco a poco hacia Diana.

- Diana: ¿Una luciérnaga?

La luciérnaga llega a la superficie y procede a transformarse en una mariposa, la cual comenzó a volver a la mano de Diana, por lo que una vez que se fijo en sus hermosas alas, Diana se encontró más calmada, hasta que escucho a alguien tocar la puerta.

- Barbara: Diana, ¿Estás ocupada?

- Diana: Emm... Si, pero ya voy a salir, ustedes adelanten sén mientras, yo tardaré un poco.

- Barbara: Pero nosotras también necesitamos asearnos.

- Diana: Vayan a ver si Lotte y Sucy les permiten lavarse.

- Barbara: ¿Ok...?

Barbara se va y deja sola a Diana, quien continúa lavando todo ahora con una actitud positiva, y una vez que terminó, procedió a lavarse para arreglarse con su uniforme, sin embargo, al salir del baño, pudo ver qué Hannah y Barbara le dejaron un atuendo muy peculiar, el cual tenía una nota que procedió a leer.

- Diana: «Ximena nos pidió que te dejáramos este vestido para el día de hoy, dice que si necesitas un peinado tradicional de México, puedes pasar con ella para que te lo haga, y que solo puedes ir a la fiesta con la condición de no ofender su país, te esperamos en el gran salón, atentamente; Hannah y Barbara».

En ese momento, Diana se acuerda del día de la independencia de México que Ximena llevaba semanas preparando llegando al punto de enseñarle Español a la maestra Finnelan, por lo que sintiendo un poco de preocupación por causar una buena impresión con esa tradición mexicana, se propuso a vestirse con lo que le dejaron. Mientras que todos estaban terminando de arreglar la decoración, la cual era dirigida por Ximena, quien se había hecho un outfit muy clásico de la cultura mexicana, acompañado de un conjunto de listones verdes, blancas y rojas.

Little Witch Academia: la impostoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora