Capitulo 80

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Capitulo 80: El ojo maldito

El grupo ahora conformado por 4 integrantes saltaba de rama en rama hacia la aldea de Konoha, Guren avanzaba bastante serena y con una sonrisa Sintra en su rostro lanzando miradas al rubio que avanzaba al frente del grupo, le miraba con mucha devoción cosa que solo incomodaba a Tayuya y a Kin; por su parte la mujer les lanzaba miradas ocasionales serias y duras, no había odio o rencor en esos ojos mas bien parecía irritada por la manera en que se hacían gestos hacia ella -(ellas son algo descorteses al señalar así espero que aprendan modales si estarán con mi señor deben comportarse bien)- pensaba la usuaria de cristal sin saber el caos que estaba por conocer en la residencia del rubio.

La llegada a Konoha fue tranquila y sin aspavientos, y mientras las chicas se iban a la mansión el rubio acompañado de Guren se dirigía a la torre donde rindió su informe de manera asombrosa Sarutobi tomo muy bien la llegada de Guren quizá tuvo algo que ver la información de que a la salamandra espía ella le ayudaba eso y su lealtad ciega al rubio le inspiraban confianza sin mencionar su aire de profesionalismo que deseaba infectara a Naruto; mientras tanto un par de ofendidas chicas regaban el chisme...que diga la información de la servidora del rubio incluido el detallito de cargar a sus hijos en su vientre detalle que no le agrado a ninguna de ellas excepto claro a Natsumi que solamente sonreía alejada de todo el alboroto -(valla lío en el que te están metiendo eh Naruto_kun)- pensaba la youko mientras tomaba asiento para la futura función de box, las puertas de la casa se abrieron y el rubio entro muy tranquilo seguido de la mujer, lo tomaron del brazo y voló por toda la sala hasta caer en el sillón con la cabeza hacia el suelo, frente a Guren una molesta Tsunade la encaraba como la primera línea ofensiva -así que tu eres la que desea darle hijos a Naruto_kun- sus palabras iban apoyadas por una sonrisa forzada y una vena pulsante en su frente -si el me lo pide será un honor pasar cada día de mi vida gestándole un hijo aunque eso signifique pasar el resto de mis días embarazada- bien eso era compromiso y tenían que reconocérselo -eso nunca pasara después de todo aquí yo seré la primera en tener un hijo con Naruto_kun- sus palabras eran decisivas aunque todas la miraban molesta después de todo el ser la primera en tener un hijo del rubio era algo que todas soñaban -que tus pechos sean enormes no te da derecho de decidir eso a todo esto quien se supone que eres rubia malhumorada- la vena pulso con mas fuerza mientras cerraba los ojos y contaba hasta diez no sirvió de nada solo se enojo aun mas -yo soy la esposa de Naruto_kun ¡Tsunade Ishura!- y lanzo un puñetazo que golpeo a Guren en la cara y la destrozo en una lluvia de cristales, la mujer broto del suelo despedazando la duela -(nooo era lo único que no se había arruinado)- lloraba el rubio mirando su suelo destrozado, debajo de la ojimiel cristales gruesos brotaron atrapándola -ja esto no me detendrá tonta- e hizo fuerza pero nada paso volvió a intentar y nada ocurrió - se que eres Tsunade la sanin legendaria poseedora de una fuerza incomparable basada en tu gran chakra y su extraordinario control, no te esfuerces es un cristal especial que absorbe el chakra mientras mas fuerza uses mas resistente se volverá-

Todas se le dejaron ir bueno no todas algunas prefirieron tomarlo por el sentido diplomático; Shizune, Samui, Mikoto, Tsunami, Amaru, Kin que sabe lo que le conviene, las bijus que encontraban mas divertido ver todo ese caos; al final gracias a muchos clones y a la falta de sentido común debido al coraje que sentían todas fueron sometidas de una o de otra manera; Tsume y Hana estaban con collares y cadenas de cristal atadas a la pared con un letrero grabado sobre ellas "perras malas" -como terminamos así kasan- pregunto Hana a su madre que no dejaba de gruñirle a Guren tratando de alcanzarla pese al collar que ahora mismo luchaba por quitarse -olvídalo- si esa era una respuesta no intencional a sus dudas; mas allá un par de pelirrojas estaban atadas por enormes anillos de cristal espalda con espalda y sujetas al suelo en una base como de maceta -porque de pronto me siento una planta- se quejo Kasumi mientras Kushina amordazada lanzaba insultos sin parar; en el suelo en una caja de cristal Yugito luchaba por salir -sáquenme no merezco esto sáquenme de aquí- sobre la caja se leía "gata agresiva, araña mucho no se acerque"; por su parte Haku estaba en una caja de cristal mirando todo con una cara de muy pocos amigos despedazando una figura de hielo que se parecía a Guren; a la izquierda del cuarto atadas a la pared de cabeza por grilletes de cristal estaban Anko y Kurenai - creí que ibas a meterla en un genjutsu- se quejo la pelimorada mientras su amiga suspiraba -como lo hago si estoy atada a la pared porque no me cubriste- y así continuaron peleando echándose la culpa la una a la otra, del techo Tayuya colgaba de cabeza atada de manos y pies -no me arrepiento de nada bruja de vidrio- dijo la molesta pelirroja.

Naruto demonio o algo más (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora