4. Quédate conmigo

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⚠️Advertencia: puede contener escenas de lemon no aptas para todo público. Leer bajo su propia responsabilidad.

¿Quieres salir de aquí?-preguntó Bulma con tono sugerente. Volteó a ver al saiyajin el cual la miró sin entender bien porqué le preguntaba algo tan evidente.

Permanecer encerrado contigo aquí no estaba en mis planes, así que no sería mala idea-dijo Vegeta, no comprendía bien cuál era el punto de lo que ella decía-¿No puedes contactar a tu padre al menos para que nos abra cuando vuelva?-preguntó.

Podría, aunque mi noche de San Valentín ya está arruinada-dijo la mujer dejando su celular en el escritorio. Lo dejó conectado al cargador improvisado que había hecho-Seguramente tarde algunas horas en volver-respondió.

El saiyajin miró a Bulma con cierta sospecha, aunque ese fuera el caso no entendía muy bien porqué no le enviaba un mensaje a su padre para que lo viera cuando estuviera volviendo.

Vegeta, ya no me interesa el tema del día de San Valentín y esas cosas cursis, pero si hay algo que quiero hacer hoy-dijo la peliazul acercándose a él.

¿De qué hablas?-preguntó el saiyajin confundido. La mirada de Bulma había cambiado estrepitosamente, ahora se sentía acechado como si fuera una presa que aguarda a ser atacada por su depredador.

A que no quiero salir de aquí todavía, no quiero ver a Yamcha de nuevo, así que quiero quedarme aquí contigo -dijo la peliazul con tono lascivo. Si bien no había sido adecuado, si se había deleitado algunas veces imaginando cómo sería estar con el saiyajin-Y no voy a poner excusas para decirte lo que quiero. No soy patética-advirtió.

¿Acaso estás...?-preguntó, no llegó a terminar su frase, Bulma lo había acorralado entre la pared del cuarto y su frágil cuerpo exigiendo una respuesta.

No tienes que ceder sino quieres, es tu decisión-dijo Bulma con tono seductor- Solo elige si prefieres quedarte conmigo aquí o que salgamos en cuanto mi papá vuelva- dijo con tono bajo, la avergonzaba un poco estar haciéndole esa propuesta a su huésped.

Probablemente lo hacía dada la rabia que sentía por lo que había sucedido con Yamcha. Pero no podía dejar pasar la oportunidad de tener un encuentro secreto con Vegeta ese día. Después de todo su día de San Valentín se había arruinado, ya vería qué es lo que haría cuando saliera de ese lugar.

Yo no soy igual que los humanos que conoces, no cederé solo porque te me estas insinuando-dijo Vegeta con seriedad. Bulma lo miró sorprendida, creyó que Vegeta accedería-No me agrada la idea de que quieras usarme para tu venganza-aclaró. La peliazul enmudeció al notar que había adivinado lo que ella pretendía.

No te estaba usando, solo...-dijo Bulma a modo de justificación. Vegeta no la dejó terminar ya que la tomó de la cintura y la atrajo hacia él rápidamente.

No permitiría que me compares con ese humano, no hay comparación posible entre ese insecto inservible y yo-dijo en un susurro, había acercado a la peliazul para hablarle. Bulma se sorprendió al notar los pocos centímetros que la separaban de Vegeta ahora-Si vas a estar conmigo no admito que sea por tu enojo hacia él- dijo nuevamente, Bulma sintió un cosquilleo invadir su cuerpo al escuchar la voz del saiyajin tan cerca de su oído. Su varonil voz la había atravesado, que el saiyajin le hablara en ese tono le gustaba.

La mujer pensó algunos segundos en lo que le sucedía, un intenso deseo sexual la había invadido al escuchar al saiyajin. Si bien sabía que él le atraía físicamente jamás había experimentado una sensación de deseo tan fuerte. Ni siquiera Yamcha había conseguido que tuviera ganas genuinas de tener un encuentro de ese tipo con él.

Encuentro furtivo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora