❄𝓟𝓪𝓽𝓲𝓷𝓪𝓳𝓮 𝓼𝓸𝓫𝓻𝓮 𝓗𝓲𝓮𝓵𝓸❄

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🇷🇺x🇨🇱

No entendía cómo es que había terminado en un auto sentado en el lado del copiloto y a su lado un ruso feliz de llevarlo quién sabe dónde.

Para eso hay que retroceder hace una hora aproximado donde el chileno se encontraba en una oficina completamente solo y en espera que Rusia se presentará ¿la razón? Es que Chile luego del gran incendio que sufrió en sus tierras y una vez mejorado sus lesiones se dedicó a viajar a tierras de todo aquel que le brindo apoyo y poder agradecer como corresponde, de frente y no a través de un teléfono o pantalla y esta vez se encontraba en Moscú.

-Lamento la espera, debía terminar unos pendientes- levantó su vista topándose directo con los ojos del chileno o más bien ojo ya que el otro lo ocultaba con un parche, pero de igual manera lo hizo sonrojarse -descuida, es mi culpa por no avisar antes -

-No, esta bien, toma asiento- el ruso se acercó a su escritorio quedando frente al chileno, aunque no esperaba su visita estaba feliz de tenerlos sus tierras - ¿Qué te trae por aquí Chile? y por cierto ¿cómo te encuentras? -

-Ya estoy mucho mejor gracias, la verdad es que he venido a darte las gracias personalmente por tu ayuda y de paso te traigo estos presentes, son producto de mis tierras... No es mucho, pero es forma de agradecerte tanto de mí parte como mi gente por prestarnos al luchin jajaja-

Dejó sobre la mesa variadas cosas desde comida hasta artesanías, el ruso estiró sus manos tocando de casualidad las del chileno retirándolas rápidamente de ahí un tanto avergonzado algo que le llamo la atención al de cola -No era necesario, necesitabas ayuda y yo podía dártela- en realidad sí tenía otra razón y era que hace un tiempo se sentía atraído por aquel latinoamericano y no lo dejaría solo y mucho menos en esa situación, también le hacía gracia el apodo que le había puesto a su avión.

-Si es necesario y si pudiera hacer algo para compensarlo lo haría con gusto-

-En ese caso, ten una cita conmigo-

-¡¿Qué?!-

Y así terminaron en un repentino paseo junto a un ruso, nunca creyó que le pediría una cita, ni en sus mas locos sueños o el que termino aceptando.

-¿Estás bien Chile? Vas muy callado-

-Sí, voy bien, solo pensaba dónde vamos es todo-

-Pensaba que sería buena idea ir a una pista de patinaje-

-¡¿Patinar?! Hay Ru, yo no sé patinar con suerte se esquiar y snowboard-

-Tranquilo, yo te enseño no es difícil-

-Ok, quién lo diría veré a un poste patinar jajaja- El contrario también comenzó a reír más por la contagiosa risa del chileno, le parecía perfecto que no supiera le daba la excusa perfecta para estar cerca de él.

-Oye Rusio ya me estoy arrepintiendo...- Se encontraban a solo unos pasos de entrar a la pista de patinaje o así sería si tan solo el chileno fuera capaz de ponerse de pie pero le costaba poder equilibrarse.

-¿Y si mejor te veo desde aquí? Capacitó solo haga el ridículo y terminaré como condorito patas para arriba -

-Vamos Chile, dije que te ayudaría y eso haré, además no hay nadie no harás el ridículo- ante eso es chilenos una rápida mirada a su alrededor y era cierto, pensaba que estos lugares estaban llenos de gente. Rusia estiró su mano para que la tomara cosa que el chileno acepto por lo que fue guiado por el euroasiático hasta la pista -oye en todo caso ¿Por qué no hay nadie más?-

-Por temas de seguridad mi presidente es un poco paranoico en cuanto a la seguridad, se preocupa por mi bienestar y ahora también la tuya por ser nación invitada -

-Oh- le parecía sorprendente cuánto se preocupaban del ruso y raro a la vez ya que él prefería interactuar con su gente aún en contra de la opinión del Gobierno de turno, pero lo que Rusia no dijo era que fue él quien se aseguró de estar a solas con el latino.

-Bien, ahora dame la otra mano y ve moviendo tus pies, te recomiendo posicionarlos como yo, así tendrás estabilidad y te podrás mover con facilidad- el chileno intentaba poner atención y vaya que lo intentaba, pero se distraía fácil y eso estaba pasando debido a que ponía más atención a ciertos detalles de Rusia en lugar de la lección. De pronto siente una mano en su cintura alarmándolo, notando que el ruso ya no estabas frente suyo, sino que a su lado con una mano sujetando la suya y la otra en su cintura haciéndolo sonrojar.

-chaa ¿oye qué onda? Andai' mano larga compadre -

-Lo lamento, pero no comprendí nada-

-¿Que para que sujetarme de la cintura?- Le miró serio le daba un poco de incomodidad y más si era sin aviso -Lo siento, es que así es más fácil guiarte, mira vas patinando bien-su vista se paseó entre el ruso, los patines y su alrededor notando que se había alejado de la entrada.

-oh la wea loca, tienes razón ¡sí estoy patinando! - El ruso esbozo una sonrisa asintiendo al parecer el chileno lo estaba disfrutando y eso lo hacía feliz a él.

En un momento el chileno creyó estar listo por lo que se soltó del ruso para intentarlo por su cuenta, pero el eslavo iba cerca suyo -cachate Rusia ¡soy entero pulento loco!-

No comprendía una sola palabra del chileno, pero al verlo tan feliz para él era suficiente, era su forma de ayudarlo a distraerse después de tanta tragedia en sus tierras -Oye Rusia patina nomas sí ya estoy bien para hacerlo sol-... ¡CTM!-

-¡Chile!- Asustado se acercó al latino que estaba tirado en el piso, se agachó un poco para ver si se había lastimado pero Chile tenía su rostro cubierto con sus manos y movía de manera leve sus piernas frotándolas contra el hielo.

-¿Chile te encuentras bien?-

-S-sí t-tranq-ui- le salía apenas un hilo de voz como si estuviera aguantando algo -pues no se te escucha igual-

De manera lenta movió sus manos hasta apoyárlas en el hielo para darse impulso y poder que quedar sentado, lo miró esbozando una sonrisa forzada -mira si estoy bien, tranquilo y disculpa si te preocupe -

El ruso se le quedó mirando ya que algo no le convencía así que se agacho al punto de quedar arrodillado a su lado quedando sus rostros a la misma altura notando sus ojos cristalinos como apunto de llorar.

-Estás mintiendo-

-¿Mentir? Naa... sí estoy bien, Amm ¿te podía alejar un poquito? Estas demasiado cerca- el contrario no hizo caso, estaba más preocupado por el bien del latino -dime qué pasa, si te lastimaste debes decirme para ayudarte-

-Rusia yo... -Bajo su vista viendo sus manos que las movía Como si estuviera jugando con ellas -Es que... Ay ya, lo que pasa es que la caída no fue tanto sino donde recibí el golpe-

-No comprendo-

-Es que me golpe donde tengo algunas de mis quemaduras, ya casi sanaron por completo, pero aún duelen jejeje pero se me va a pasar tranqui- volvió a mirar al ruso sonriendo, el contrario solo reacciono a abrazarlo a pegándole a su cuerpo- lo siento, no sabía -

-Rusia en serio está bien, estoy acostumbrado a esto- le daba leves palmadas en la espalda no entendía por qué tanta preocupación de su parte. El ruso se separó un poco teniendo mejor vista del rostro de aquel latino qué le atraía tanto al punto que no aguantó más y le dio un beso en sus labios, uno que tomó por sorpresa al chileno, para nada se imagino siendo besado por el pero por más extraño que fuera término correspondiendo.

-Será mejor volver, hare que un médico te revise-

-¡¿Qué?! No po' yo quiero seguir patinando porfis- el contrario le quedó mirando, suspirando resignado al parecer era cierto que el chileno era algo obstinado- bueno, pero si te sientes mal debes decirme- Chile asintió con la cabeza mientras miraba como el eslavo se ponía de pie para luego ofrecer la ayuda a levantarse. Seguía pensando en aquel beso y solo provocaba que se sonrojara más a pesar de que hacía frío su cara la sentía hirviendo.

-Patinarás a mi lado así podre sostenerte y evitar que caigas de nuevo-

-Uh b-bueno- por esta razón Rusia aprovechó y volvió a tomarle la mano, pero ahora se aseguró de entrelazar sus dedos con el contrario, aunque hubiera conseguido darle un beso no se sentía victorioso sabía que este era solo un pequeño avance con aquel latino.

30 ∂ιαѕ σтρ  |countryhumans| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora