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Shuhua seguía desconcertada.
Se visualiza a ella de nuevo en el comedor con ese gran silencio entre su padre y su abuelo. Una guerra de miradas sin fin. De nuevo, la voz del director dándole una orden clara y sin oportunidad de esquivar.
ー¡Hola, Shuhua!ー No había dado ni dos pasos dentro del edificio cuando la rubia ya estaba tras de ella. ー¿Vas a clases?
De reojo veía a Minnie sonriente y observando a su amiga.
Su primer impulso fue regresar el saludo, pero como siempre. Ella no obedecía a los destellos de libertad que tenía a veces. Siempre reaccionando a órdenes.
ーNecesito que dejes el edificio. No está permitido que entren alumnas con tu vestimenta y siquiera eres de éste colegio. Debo pedirte que te retires.
Soojin más que sorprendida, se mostraba escéptica.
ー¿En serio? Da la casualidad de que no me gusta seguir órdenes.
Minnie había estado escuchándolo todo. Había cambiado su mirada a una de desconfianza hacia la azabache. Cómo si fuera su enemiga, imaginó a una mamá oso intentando proteger a su cría. Una bonita amistad para los ojos de cualquier otra persona.
ーFuera. ー Soltó Shuhua fríamente.
Soojin seguía con su positiva aura de y un rostro con el "no me importa" casi rayado en él. ー¿Te levantaste con el pie izquierdo de la cama?
ーNo volveré a repetirlo. No se les permite a las de tu clase pisar ésta escuela. Tienes que irte.
ー¿Las de mi clase?ー Preguntó la coreana con aire de burla. ー¿Chicas con el pelo teñido y orejas perforadas?
Shuhua sabía que estaba jugando sucio, pero no le importaba. Tenía que sacarla. Era una orden.
ーChicas que no tienen dónde caerse muertas. Ahora fuera.
Se había pasado.
Nadie tenía que recordárselo.
Incluso Minnie parecía dispuesta a darle un buen golpe, Soojin por su parte había dejado de sonreír. Sólo parecía un poco aturdida por todo. Se notaba que trataba de entenderla, claramente estaba confundida.
ー¿Me tengo que ir?
ーNo tienes permiso para volver a entrar.
Soojin compartió miradas con su mejor amiga.
ーSi me voy ahora, no volverás a verme. ー Sentenció segura.
La taiwanesa se alarmó por tal advertencia. Aún podía escuchar en su cabeza la orden que se le dio en la mañana.
"No te quiero ver cerca de esa chica de nuevo"
ーEso espero. ー Pronunció insegura.
Al poco rato se le unió Miyeon dispuesta a echarla de la escuela.
ーHey, Soojin. Vamos por helado. ー Habló su mejor amiga calmando la guerra entre sus miradas.
Shuhua de inmediato se adelantó a la rubia.
ーYontararak, tus clases empiezan...
ーAhórrate la charla, no soy una más de tus súbditas.
Y eso fue suficiente para que la pelinegra tomase del brazo a la rubia y la llevase con ella.
Lo que más la había desconcertado fue la forma de referirse a ella. "Las de tu clase" ¿Entonces Shuhua era una "clase distinta"?
Una chica que no tenía un lugar como tal al que llamar hogar. Pensó en lo fácil que habría sido permanecer a su lado si no le hubiera mostrado aquel sitio. "Las cosas ocurren por algo" Pensó para sí misma.
Había estado acostumbrada a que la trataran como si fuera un estorbo del mundo. Pero que Shuhua lo hiciera se había sentido distinto a como cuando un extraño lo hacía.
ーDeberías dejar de ayudarla. No le veo caso a esa chica. Un día está preocupada por ti y al otro te trata como si fueras una mierda. Dios, me recuerda tanto a mi hermana.
Soojin continuó escuchando las quejas de Minnie. Su helado no tenía un buen sabor y cuando llegó a casa su descontento sólo se hizo más evidente.
Había un lado negativo de haber tenido una extraña pelea con Shuhua.
Tenía que regresar a casa temprano.
Vio su celular y no tenía ningún mensaje, se sentía fatal a su manera. Sabía por qué Shuhua la había alejado, no era difícil de adivinar, posiblemente su abuelo le había ordenado que no se acercara más a ella. Y le pareció gracioso. Porque aunque sabía que podía pasar, se sentía peor de lo que había esperado.
Ahora tenía que encontrar algo nuevo que hacer en su tiempo libre.
Por propia voluntad, tomó su chamarra de nuevo. Miró al par de botellas vacías que estaban en la mesa y con aire resignado, volvió a salir antes de que tuviera que encontrarse con su madre.
;;;;;;;;
Shuhua había pasado toda la tarde dentro de la sala del consejo. Su abuelo le había dejado a propósito organizar los eventos del festival deportivo con la esperanza de que en su tiempo libre no volviera a encontrarse con la rubia.
ー¿Demasiado trabajo?ー Levantó la vista al escuchar esa voz tan conocida. Una pizca de decepción llegó al ver que no era quien esperaba. ーFue a casa... Ah, no, espera. Lo olvidaba. ¿Cómo te refieres al sitio donde ella duerme?
ーNo estoy para discusiones, Yontararak.
ー¿Sabes? Cuando mi hermana era presidenta del consejo era tan parecida a ti que ahora me causa escalofríos. ー Continuó la tailandesa hablando sin permiso de nadie. ーPor alguna razón ellas se llevan bastante bien, ¿Sabías? La perfecta expresidenta de ésta escuela siendo amiga de una chica desastre.
Shuhua miró a Minnie.
A veces olvidaba quién era su hermana. A veces olvidaba incluso la existencia de sus demás compañeras.
ーNo me agradas.
Sólo podía escuchar el desprecio en su voz.
ーTenía que hacer que se fuera.
ーNo, tú tenías que ignorarla. Sólo la trataste como toda la bola de idiotas que la rodean.
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