La chica nueva de la escuela

Capítulo 8

-¿Qué?- se me revolvió el estómago 

-Vamos, no te hagas la tonta, debes de conocerlo, entrena contigo.

-Emmm si

-Y bien

-Es... es...

-Habla bien que no tengo todo el tiempo.

Me aclaré la garganta

-Es mi hermano

-¿Qué dices si invito a salir a Kaitlyn he?

Habían pasado ya dos semanas desde que Kaitlyn había ingresado en la escuela, trataba de estar lo más posible lejos de ella, y mi hermano, hacía lo contrario.

-Mmmm sí- responder eso me revolvía el estómago

-Ann, ¿qué pasa?

-Nada, es sólo que me cae mal- ¿era así?

-Bueno, sólo dame una idea de a dónde la invito a salir y no vuelvo a hablar de ella- Me quede pensando unos momentos. ¿Debería hacerlo?

-¿Qué tal si la llevas a la fiesta de Cam?- Cam iba a organizar una fiesta mañana por la tarde por sus 18 años. 

-Excelente idea, ¿tu irás cierto?

-Sí, claro- dije sin darle importancia

Si ella va, iré yo? Ya le había dicho a Cam que sí iría, y a Daniel y a Bryan.

No me debería importar, es una fiesta muy muy grande, no es probable que nos encontremos, estaría todo el tiempo con Cam o Daniel.

Sí eso es, sí iré, es hora que deje de importarme esa niña mimada, es hora de renovarme y crear una nueva yo, una nueva y mejorada Ann. Pero antes, necesito ir de compras, mañana estaré diferente.

Estacioné la camioneta en el aparcamiento de la plaza. Me adentré en la masa de gente en busca de una tienda de ropa. 

-Hola buenas tardes, mi nombre es Elena, la puedo ayudar en algo?- dijo una de las empleadas de la tienda de ropa

-Sí, verá, quiero renovarme, cambiarme la imagen

-Ya veo- dijo analizando la ropa que escogí. Por un momento me sentí fuera de lugar al comparar mi atuendo y el de las demás chicas que estaban por allí- Alguna ocasión en especial?

-Sí, mañana tengo una fiesta 

-De acuerdo, sígame

Seguí a Elena por los pasillos repletos de pantalones, blusas, chamarras, zapatos, tops hasta que paramos en el área de vestidos.

Elena me echó unos cuantos vistazos mientras recorría los diferentes vestidos

-Pruébate éstos- me entregó un vestido turquesa, un dorado y un rosa con negro

-De acuerdo- tomé los vestidos y me dirigí a los probadores- Em, se puede quedar aquí por si necesito ayuda?

-Claro- me dijo con una sonrisa

Me probé el turquesa, tenía un escote en V, y de lo largo tenía un escote diagonal comenzando por la mitad del muslo derecho. Se lo devolví a Elena, estaba muy corto.

El dorado ni siquiera me lo probé, era demasiado brillante.

Me probé el rosa con negro, tenía escote redondo y una pequeña abertura en la espalda baja, salí para obtener la  opinión de Elena.

-Elena, ¿Qué opina de este?

-Se le ve excelente, favorece a su cuerpo

-No estoy muy segura