ʟɪᴋᴇ ᴀ ᴋɪɴɢ || heewon

Like a king 04

2° paso para conquistar el corazón de JungWon antes de morir.

Tomar su mano.

Aquellas calles transitadas en su totalidad le daban a HeeSeung la sensación de que en cualquier momento un auto lo iba a atropellar o algo por el estilo, de verdad no sabía si quiera como es que aún se encontraba vivo con tantos automóviles circulando a su alrededor provocando que al pasar por su costado derecho una fuerte ráfaga de viento luchará contra su cuerpo intentando botarlo.

Regresaba de comprar medicamentos en la farmacia para el molesto dolor de cabeza que no parecía querer irse desde la mañana. Se detuvo frente a un semáforo esperando que su color cambiará al indicado para poder cruzar la calle.

—Hyung— la voz de sunoo a sus espaldas lo hizo darse la vuelta y sonreír un poco. Llevo una mano hasta el cabello de Kim desordenando lo ganándose reproches por parte de este.

—No hagas eso. Estoy camino a una cita y acabas de arruinar mi cabello— susurró intentando acomodarlo nuevamente. lee abrió sus ojos con sorpresa.

—¿Cita? ¿Quién fue el idiota que cayó?

—Niki.

—No me esperaba eso. ¿Qué clase de truco has hecho?

El menor soltó una risita. Le dió un leve golpe al mayor en el hombro a causa de esto, este soltó un suave quejido. Sunoo rodó los ojos, el semáforo cambio su color y ambos chicos comenzaron a caminar en dirección hacia su destino.

—Simplemente, no puedo responderte a eso porque ni yo mismo tengo idea de lo que pasó. Solo sé acercó a mí, me dijo que si podíamos tener una cita y eso fue todo.

—Ya veo, tal vez se le soltaron unos cuantos cables.

—¡Hyung!— exclamó molesto el menor.

—Lo lamento pero se me hace increíble el hecho que quiera tener una cita contigo, después de huir todo el tiempo.

—Las personas cambian. Puede que le guste— mencionó con las mejillas teñidas de rosa, llegaron hasta un punto en el cual ambos debían separarse.

—Está bien, siempre y cuando no te lastimé.

Los ojos del menor brillaron con gran ilusión. HeeSeung le hizo una señal para que se fuera, cosa que Kim no tardó en obedecer corriendo hacia su encuentro con Nishimura. A lo lejos el pelinegro divisó una figura bastante conocida, justo en la dirección contraria hacia Sunoo.

[...]

JungWon suspiro en cuanto su celular se apagó dándole a entender que si lo hubiese cargado está mañana tal vez ahora no estaría con un problema y muchas cargas en sus manos.

Apenas y sentía que podía caminar con aquella infinidad de bolsas que llevaba. Sintió a alguien correr atrás suyo para luego posicionarse frente a él con una sonrisa que también lo contagio.

—HeeSeung hyung, ¿Qué haces aquí?— preguntó deteniéndose y observando al mayor.

—Vine a comprar medicinas, ¿Y tú?— preguntó observando las bolsas que el menor llevaba consigo.

—Tuve que hacer las compras para mí familia.

—Ya veo— sin decir nada, quitó unas cuantas bolsas de las manos del menor en un abrir y cerrar de ojos— vamos.

—¡Hyung! No puedes hacer fuerza alguna, aún estás en recuperación— el mayor sonrió ante esto. Su mano izquierda quedaba libre, así que tomo la mano de JungWon con ella obligándolo a caminar.

Yang sintió su corazón acelerarse en cuanto la mano del mayor se entrelazó con la suya. Quiso dar un pequeño gritó de felicidad pero se detuvo al recordar que Lee no tenía ni idea de sus sentimientos hacia él.

Decidió que era mejor no quejarse, así que comenzó a apresurar el paso para ir al mismo ritmo que HeeSeung.

Además, esto ayudo a que el mayor no cayera ante los mareos que sentía en ese instante.