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La casa de los Na se veía tranquila por fuera, dos pisos, pintada de color amarillo y con un lindo jardín en la entrada. Pero por dentro la casa siempre era todo un caos, después de todo, una casa nunca puede estar tranquila con tres hijos en ella.

Na Jaemin era un hombre de veintitrés años que era administrador de una gran empresa muy conocida, un hombre muy amable y amistoso, pero cuando se trataba de negocios el era todo un profesional, rechazando o aceptando solicitudes de otras empresas para vincularse con la suya. Gracias a eso, la empresa en la que ejercía su oficio tenía todo el éxito de hoy en día.

A los dieciocho conoció a su primer amor, una chica de su clase llamada sunhee, ambos se enamoraron con el pasar del tiempo y a la muy temprana edad de diecinueve años se casaron sin más,tuvieron tres hijos en sus cuatro años de casados. Na Jisung siendo el mayor, Na sunnie, como la hija de en medio y después a la pequeña Na hannie, pero ambos poco a poco fueron perdiendo el amor que tanto se tenían, se dieron cuenta de que su matrimonio no daba más y se divorciaron.

Esto no les afecto a los niños, puesto a que sus padres no se separaron en malos términos, al contrario, se hicieron amigos dejando atrás su relación pasada.

Jaemin tenía a los niños una semana entera y sunhee la otra semana y así sucesivamente. El pelirosa amaba más que nada a sus hijos y siempre hacia todo el trabajo de una para tener mucho tiempo libre para ellos.











Lunes por la mañana, el día que toda la familia Na odiaba con su vida, bueno, eso pensaba Jaemin ya que sus hijos desde hace un tiempo se levantaba con muy buen humor ese día cosa que extrañaba en demasía al pelirosa.

Como todos los días sus hijos venían a su cama para saltar sobre el y despertarlo.

Papá, papá, papá!

Jaemin sonrió la sentir un gran peso encima suyo, sus tres amores estaban sobre el saltando mientras gritaban para que saliera de la cama, Jisung aun con dieciséis y sunnie con catorce seguían haciendo lo mismo.

-bueno bueno, ya estoy despierto si?, vayan abajo para que les prepare desayuno

Los niños besaron la mejilla de su padre y bajaron a la cocina para ver que harían de desayunar.

El pelirosa aun somnoliento se levantó de su cama para caminar lentamente al baño quitando su ropa, dio el agua de la ducha y entró mojando su cabello, dejando que las gotas de agua recorrieran su cuerpo.

Salió ya limpio y más despierto para tomar una de sus camisas blancas y un pantalón negro de vestir junto a una chaqueta negra que le daba una imagen elegante y profesional.

Mientras se vestía escucho los gritos de sus hijos peleando sobre cual hotcake era mejor, si el original de vainilla o el de chocolate, dando argumentos como si estuvieran en un debate o un tribunal, por supuesto Jaemin sabía que al bajar sus pequeños le dirían todos esos argumentos para que el eligiera el mejor. Así era todas las mañanas con una comida diferente.

-¡te digo que el de chocolate es mejor! - decía sunnie mientras sostenía una sartén en sus manos

-¡todos saben que el de vainilla es mejor ya que un setenta por ciento de la población lo prefiere! -  Jisung como siempre usando sus estadísticas

-¡son dosh contla uño! Así papá jaimás nosh dilá cuad es mejorr, iriotas!- y hannie como siempre... Esperen

-¿hannie acaba de decirles idiotas? -  el pelirosa miro a los dos mayores esperando una explicación

-¡SE LO ENSEÑO EL TÍO DOYOUNG LOS JURAMOS! -dijeron ambos hermanos al unísono

Suspiro mientras una sonrisa ladina salía de sus labios.

















Holis! Quería decir que soy bastante nuevx en esto y espero que la historia les guste, cualquiera falta de ortografía no duden en decirla de manera amable uwu, mi nombre es lannie y ojalá puedan apoyar la historia si les gusta, byeeee~ ╥﹏╥

LANNIE~♡

padre soltero Donde viven las historias. Descúbrelo ahora