Una Historia Diferente

Capítulo 8

[¡¡ADVERTENCIA!! Este capítulo contiene lemon :v si no te gusta te lo puedes saltar]

Revelaciones ante colegas

Había pasado una semana desde que Light y Riuzaki se hicieron amantes.
Light mantenía oculto a Riuzaki por precaución, aunque el azabache era más que cooperativo. Todo era color de rosa.

Kira había vuelto a matar criminales, pero esta vez sin oposiciones. Todo iba de maravilla.

Riuzaki: Light-kun, ¿estás cansado?

Light estaba sentado enfrente de un escritorio, había programado muertes todo el día, así que aún no guardaba la libreta. Sin mencionar el trabajo de medio tiempo que había conseguido.

Light: Sí, mucho. ¿Por qué?

Riuzaki: No me gusta verte de mal humor. Es todo.

Light: Ah, ya veo, bien... Iré a dormir, ¿vienes?

Riuzaki: Sí, ya voy.

La pareja fue a la habitación, en donde Light se cambió, y se preparó para dormir, pero antes de poder meterse en la cama, Riuzaki lo empujó levemente, haciendo que cayera sentado cerca del borde de la cama.

Light: ¿Qué haces?

Riuzaki: Quiero animarte un poco, mi Dios.

Riuzaki lo llamaba así últimamente, y Light ha de admitir que no le molesta en lo absoluto.

Riuzaki se arrodilló frente al castaño, sacó su miembro, y comenzó a lamer la punta, para después introducirlo casi por completo...
Light se deleitaba con el maravilloso trabajo que hacía la boquita de su amante. Se puso de pie y comenzó a embestir la boca del azabache, escuchando atentamente los gemidos que soltaba Riuzaki.
Por más excitante que le pareció ver al azabache en esa situación, no fue capaz de correrse, y fue cuestión de segundos para que Light tomase a Riuzaki y lo dejara en la cama a su merced.
El castaño arrancó bruscamente las prendas del azabache para abalanzarse sobre él y atacar sus pezones besando, mordiendo, acariciando y pellizcando.

Riuzaki: L-Light... ¡N-No me muerdas!

Como si no pudiese oír, jugó aún más bruscamente succionando y mordiendo por todo el pecho de su pareja.

Light: ¿Así es como te diriges a tu dios? Serás castigado por esto

Últimamente el castaño tenía la tendencia de ejecutar ese tipo de juegos, en los que él se hacía llamar "dios" y Riuzaki interpretaba a ya sea un esclavo o un simple juguete que sirve para complacer a su amo, sin embargo nunca dió quejas de ese trato tan vulgar que recibía de su novio.

Light volteó boca abajo al azabache y lo hizo levantar las caderas al aire con su mano derecha, mientras que con la izquierda penetraba la boca de Riuzaki con tres de sus dedos para que los lubricara.

Light: ¿Ya te estás viniendo? *Dijo al ver como un líquido blanco chorreaba desde la entrepierna del azabache* Ni siquiera ha comenzado lo divertido~.

Sin delicadeza alguna, el castaño sacó sus dedos de la boca de Riuzaki y los metió en su entrada sin previo aviso, haciendo que el azabache alzara la cabeza y diera un gran grito.
La simulación de embestida que hacía Light era brusca y veloz. Hasta que decidió que era hora de lo real.

Sacó sus dedos, apartó su mano, sujetó el cabello azabache de su pareja y comenzó a penetrar sin conocer el significado de misericordia.

Riuzaki: ¡¡P-Por favor basta, Light!!