You Only Live Once ||Piers Nivans y Tu||

Capítulo 39

ESPECIAL SAN VALENTÍN (1/3)

Miro al chico el cual estaba mirando un tanto incomodo un botiquín. La tocaba con intención de abrirla, pero después suspiraba frustrado mirando a otro lado. Volvía a repetir aquel acto varias veces hasta que se percató que lo estaba mirando un tanto confundida, sonrojándose al instante

-¿Qué sucede? -Me acercó lentamente- ¿Tienes que tomar algún medicamento? -Tomó la caja- ¿Te sientes mal? -Me acercó y tocó su frente. El sonríe cariñosamente. Toma la caja y la deja a un lado, me toma mis caderas y me acerca a el, rodeando ambos brazos por esta, abrazandome, apoyando su cabeza en mi vientre, acariciando pacíficamente mi espalda. Nos quedamos así por varios minutos, acerque mi mano a su cabeza, acariciando su suave cabellera, después bajo mi mano a su cuello, provocándole un leve cosquilleo, obligándole a que me mirara- ¿Estas bien? -Me mira con una leve preocupación reflejando en su ojo derecho, el cual lentamente comienza a llenarse de lágrimas- Hey, no… - Digo tratando de detener sus lágrimas, limpiando el recorrido que deja en sus mejillas- Piers… - Carraspea y trago saliva

- Debo cambiarme esto- Me mira a los ojos, apenado. Frunzo el ceño- El parche, debo cambiarme el parche- Baja su mirada- Siempre lo hago cuando estoy solo, en mi habitación- Me mira nuevamente- Pero ahora estoy contigo y no siempre tendré que ocultarlo, pero… - Frunze el ceño con tristeza- No quiero que me mires como si fuera un monstruo… -Susurra tratando de callar los sollozos. Quito sus brazos y me siento a su lado

-Quiero que sepas que nunca me iré, que estaré a tu lado hasta la muerte- Sonríe levemente- Tu eres mi hogar, así que ven, vamos... La pasaremos bien- Toco sus manos- Te amaré por siempre y seremos felices juntos - Acaricio su mejilla húmeda- Por favor no llores… -Susurro juntando su frente con la mía -No ahora que estamos juntos- Le sonrió tiernamente, se acerca a mi rostro y me besa con pasión.

Los chasqueos de nuestros besos hacían eco en toda la habitación, combinándose al par con los sonidos del reloj, de aquel reloj que lo tenían todas las habitaciones de la Central. Levanto una mano, acercándola a su cuello, acariciándolo con las yemas de mis dedos, mientras que el tomaba y acariciaba mi muslo, pasándola por encima de sus piernas, provocando que perdiera el equilibrio y cortara el beso. Lo observo detalladamente, recostada sobre la cama, el sobre mi, levantado, algo encorvado, con una mano en mi pierna mientras que la otra la apoyaba al lado de mi cintura. Sonrió ampliamente y me devuelve el gesto. Me ayuda a levantar, posiciona ambas manos en mi cadera

-¿Me ayudarías? -Pregunta más tranquilo, asiento gustosamente. Se acomoda nuevamente en la cama, toma el parche y comienza a quitarse lentamente y con cuidado, cabizbajo, evitando mi mirada. Abro ligeramente mis ojos al ver con más claridad cada cicatriz que rodea su ojo, totalmente vacío, sin párpado, sin iris, sin pupila, totalmente blanca. Pequeñas cicatrices rodeaban aquel hueco, paso mis dedos por sobre estas, con suavidad, sintiendo aquel áspero tacto. Clavo mi vista nuevamente en su esclerótica, tratando de encontrar algún rastro de sus hermoso color avellana, el chico frunce el ceño apenado, provocando que nuevamente volvieran las lágrimas a sus ojos, toma una parte de su bufanda y comienza a acercarla a su rostro, tratando de ocultarlo en ella, impido su acto posicionando una mano en sus mejillas y junto nuestras narices haciendo el típico beso esquimal
-Me encantas- Beso la punta de su nariz. Tomó la tela y la colocó, para después ir colocándole cinta, el me ayuda sosteniendo la tela- ¿No te duele? -Me mira- Digo… pues cuando la tela toca tu ojo-

-No, nada- Baja su vista mientras acaricia mi cintura- La herida demora mucho en cicatrizar, siempre termina la mayor parte del ojo manchado de sangre- Dice mirando un punto en la habitación

-Listo, creo que ha quedado bien- Paso mi pulgar por sobre la cinta. El chico se levanta y se observa en el pequeño espejo que está en la habitación

-Pues si- Se voltea tocándose el parche- Ha quedado mejor que las veces que lo he hecho yo mismo- Ríe levemente, se acerca y toma de mi cintura- Eres la mejor- Me acerca a su cuerpo

-Cuando me quité esta cosa podré hacerlo mejor- Sonrió -Vamos- Beso la comisura de sus labios. Tomó su mano y lo obligó a caminar, pero este me voltea bruscamente y me atrae nuevamente a su cuerpo, chocando con más fuerza, lo miro mal, sonríe.

Toma mi cabeza y me besa con fuerza, me obliga a posicionar una mano sobre su torso tratando de no tocar mi brazo roto con su cuerpo, mientras que el sostiene mi espalda para pegarme más a su cuerpo. Comienza a caminar, guiándome con torpeza, pero sin romper el beso, toma mi cintura y me sube al mueble, botando todo lo que había sobre él, me separó tratando de recomponer mi respiración, pero toma mi rostro con ambas manos y acerca sus labios a los míos. Acaricia cada parte de mi cuello, mientras que yo tomó con una mano su playera y trato de separarlo de mí, recorre toda mi mejilla con besos hasta llegar a mi cuello, en el cual empieza a depositar besos y leves mordiscos, tomó más fuerzas para separarlo, desliza suavemente su mano derecha por mi brazo, para después posicionarla sobre mi pecho, lo aprieta, quitándome toda la fuerza, dejando mi mano sobre su costilla, lo aprieta nuevamente haciéndome gemir. Detiene bruscamente lo que está haciendo para mirar mi rostro, abro más mis ojos y lo miro, el cual sonríe sonrojado

-Ya… - Pronuncio alargando la vocal. Posicionó mi mano en su pecho y lo alejo levemente de mi- Se nos hará tarde- Digo esta vez tomando nuevamente la mano del chico, verificando en su mirada algún tipo de maldad

-Solo quería escucharte- Dice para después morder sus labios, abro la puerta

-Tú sabes con exactitud que eso iba a llegar a otra cosa- Siento una mirada en mi mejilla, la ignoro

-Me hubiera encantado que llegará a esa cosa- Me río levemente

[* * * * *]

Caminando por el despejado parque, observando a todos los niños jugar con sus mascotas

-¿Podemos ser honestos? -Le preguntó apoyando mi cabeza en su hombro- ¿Seguirás conmigo a pesar de todo? -Me mira confundido- Pues… -Miro a otro lado- Tu y mi hermano no se llevaron muy bien la primera vez que se vieron, te enteraste que soy hija del mismísimo Albert Wesker y todos piensan que seguiré sus pasos -Bajo la cabeza, observando cada paso que damos- Yo no quiero hacerle daño a nadie, Nivans

-Has entrado a la B.S.A.A para exterminar esas armas biológicas que aquellos científicos locos inventan, tu jamás traicionarías a uno de los tuyos- Levanto la mirada

Wesker fue parte de S.T.A.R.S y traicionó a Chris

-Estuviste conmigo un tiempo y aún así no enviaste información a Neo-Umbrella sobre nosotros- Lo miro y me sonríe- Estos serás los requisitos para estar juntos- Lo miro confundida- ¿Podrías abrazarme toda la noche antes de dormir? -Me río alegremente y asiento

-No puedes tener miedo de presumirme o tomar mi mano- Muerdo mis labios

-Eso lo haré siempre- Toma mi mano y la besa- Me darás mucho amor- Acerca bruscamente su rostro al mío

-Nos divertiremos juntos- Comienzo a dar vueltas, haciéndolo reír

-Quiero tener mi familia contigo- Me detengo mirando un punto fijo en el atardecer, me volteo lentamente. Me sorprendo al ver aquella pequeña cajita color azul que estaba en sus manos- Quiero que seas parte de mi familia -Me sonríe levemente- Quiero que seas parte de mi- Lo miro a los ojos- ¿Qué te parece? -Asiento emocionada, se levanta y corro a abrazarlo- Cuidare de ti, siempre

-Ambos nos cuidaremos, ante todo- Me besa