Te liberé de tus endemoniadas cadenas,
me miraste con completa gratitud.
Tal vez esos días malditos en la arena,
te hicieron bien o te alimentaron con dolor.
De seguro te quise como a nadie;
me amaste con tu temor.
El tiempo se mezcló con el aire,
y tu presencia se esfumó.
Tus preciados recuerdos,
Deleitaron e inundaron mi mente vaga.
¿Por qué nuestros encuentros,
fueron tan aterradores?
Tu labio temblaba,
mi cuerpo se erizó levemente;
de pronto todo se escapa,
de este mundo de terror.
Las ventanas abiertas de tu cara,
me miraban con compasión.
Tal vez te equivocaste de casa,
o de corazón.
Dejaste mutante tu paso;
llevaste contigo todo lo que amé.
Te empeñas con que un vaso,
mi sangre derramaré.
Tu tacto me hizo fuerte,
tus palabras retumbaron en mi oído,
pero tu zona de puentes,
convivieron con los míos.
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Mi último Refugio.
Poetry~Quienquiera que sea, cualquiera que sea su actividad o procedencia, el libro de poemas "Mi último Refugio" ha sido escrita especialmente para usted. En algunos momentos este libro, lo exhortará con suavidad, y en otros momentos lo obligará a...
