Now your life's no longer empty

Capítulo 11

-Punto de vista de Dean-

Miraba el cuerpo de Sam desde la cama, posición dónde se encontraba desde que lo habíamos dejado allí, su respiración había desaparecido entre mis brazos.
Desde que era pequeño me habían mandado cuidarle, todavía podía escuchar las palabras de mi padre en mi cabeza: "cuida de Sam", "cuida de tu hermano pequeño".

Su promesa se había roto, amaba a su hermano pero en aquellos dos años desde que había ido a buscarle sus sentimientos se habían envuelto en un amasijo de hierros, pero lo había perdido me encontraba devastado, roto por dentro como si alguien me hubiese quitado una parte de mi, pero lo peor fue saber que Gwendal era la causante de toda aquella situación.

La mujer que había hecho que su corazón se llenará de emociones muy fuertes, emociones que aunque intentará evitar se habían metido muy dentro de mi corazón y de mi mente. Pero no podía era la causante de todo aquel asunto del demonio de ojos amarillos, por ella Sam le habían secuestrado.

Me levanté despacio pudiendo notar mi cuerpo cansado y roto;  en la parte de abajo de la casa de Bobby se escuchaban los gritos de Gwendal.
Bobby podía ser muy persuasivo cuando se metían con su familia, por lo que dejé que mis pies bajarán por mi y así encontrarme en el salón.

Enfrente de mi se encontraba aquella chica que una vez me hacía sonreír, ahora sólo quería ver su vida desaparecer entre mis manos.

Gwendal se encontraba en la "trampa del diablo" sus manos y pies estaban atadas en una silla - no se nada lo juro - un hilo de sangre corría por su labio, Bobby no medía su fuerza cuando quería.

Dean: ¿porqué tendría que creerte?, eres uno de ellos. Un demonio, una escoria a la que tengo ganas de matar junto con todos los de tu calaña - me acercaba poco a poco a Gwendal. Sus ojos me miraban suplicantes buscando mi perdón pero no se lo daría, me había hecho daño.

Gwendal: te lo juro Dean, no se nada, os lo he dicho todo lo que sé - pegó un grito cuando Bobby le tiró un cubo de agua bendita.
Sus ojos estaban llenos de lágrimas - ¿crees que esto es fácil para mí? , Sam también era mi amigo, maldita sea Dean, por favor suéltame - nos dijo mientras me ponía dentro del círculo y con mi pie tiré la silla, de forma que la silla y ella cayeron al suelo.

Cogí el cuchillo que había en la funda de mi cinturón y se lo acerqué al cuello y entre lloros me dijo - mátame Dean, hazlo maldita sea, ¡hazlo ahora!, yo soy la causante de todo - alcé el cuchillo pero mi corazón me decía que no lo hiciera, por lo que lo clavé en el suelo de madera al lado de su cabeza.

Dean: dime cómo puedo traer a Sam, ¡dímelo ahora! - ella empezó a negar con la cabeza.
Gwendal: no voy a decírtelo Dean - mis manos fueron hasta su cuello y empecé a apretar, notando cómo Bobby me separaba de ella.
Bobby: ¿no te acuerdas muchacho lo que nos dijo?, si la matas la verdadera Gwendal morirá, piensa con la cabeza chaval - cogí la silla y la levanté al final de cuentas la verdadera Gwendal se encontraba dentro.

Gwendal: ¿os creéis que con exorcizarme lo tenéis todo hecho?, ha diferencia de Meg, yo soy un demonio por línea de sangre de Azazel, aunque me sacarais al demonio yo seguiré siendo lo que soy, tendría poderes psíquicos como los de Sam- Bobby se acercó a mi.
Dean: ¿Qué pasa Bobby?.

Bobby: necesitamos su ayuda ella sabe los planes del demonio - al escucharle empecé a negar.
Dean: primero tengo que ayudar a Sam, vete le sonsacaré la información - Bobby se restregó los ojos del cansancio y se fue de aquella sala.

Gwendal me miraba desde aquella vieja silla- te entiendo Dean lo que harías te entiendo perfectamente, aunque me vieses como un ser al que matar, yo también tuve una familia, y os dije la verdad Azazel los mató - cogí otra silla y me senté enfrente de ella.

Dean: sólo oigo mentiras de tu boca - negaba con la cabeza mientras yo intentaba recomponer mi postura.
Gwendal: es verdad, yo viví en la Escocia del siglo V cuando Azazel entró en mi vida, era amigo de mi padre hasta que descubrí que me vendió por un trato, a cambio de 10 años de vida más daría a su hija la mayor - aunque no quisiese escucharla pude notar cierta sinceridad en su voz.

Gwendal: recuerdo esa noche como si hubiese sido ayer, Meg me sacó de la cama a rastras, me encontré a mis hermanos muertos en el suelo, y luego - su voz se quebró hasta que volvió a hablarme - Azazel mató a mi madre, la quemó como hicieron con la vuestra, de repente un humo negro entró en mi y después no podía entender que hacía cuando asesiné a mi padre en venganza por lo que me hizo, desde ese entonces vivo para ser una mercenaria de mi padre, una soldado a la que mandar, he hecho cosas de las que me arrepiento, y si quieres matarme hazlo pero yo no puedo decirte como hacerlo, porque yo.. - mis ojos se quedaron viendo los suyos y la desaté ante su mirada de sorpresa.

Dean: me vas a ayudar quieras o no, y como vea que te escapas no duraré en matarte Gwendal - se levantó, lo primero que hizo fue acercarse a la ventana más próxima y se rebuscó entre los bolsillos para encontrar su tabaco y el mechero para así encendérselo - ve aun cruce de caminos debes de enterrar en medio de este una foto tuya entre otros ingredientes, el demonio vendrá a ti, podrás hacer el trato - al terminar de escucharla me puse la chaqueta pero noté como me abrazaba por detrás.

Gwendal: Dean no lo hagas por favor, encontraremos otra manera - me suplicó pero la cogí de las manos y me separé de ella - Sam es mi única familia Gwendal, tú nunca lo entenderás porque eres un ser sin alma y sin corazón - ante mis palabras llenas de odio y frialdad se separó más de mi.

Gwendal: si es lo que quieres no te detendré pero iré contigo - acercó sus dedos hacia mi frente y desaparecimos del salón de Bobby.

-Punto de vista de Gwendal-

El frío de la noche nos envolvió a ambos no llevaba mi chaqueta encima por lo que me abracé a mi misma, detenidamente miraba a Dean como hacía los pasos a seguir.
Dean: como me hayas mentido acabaré con tu vida - una mujer vestida de negro apareció.
Demonio: vaya la jefa está ayudando a los Winchester, a tu papá no le hará mucha gracia - giré mi mano y daba gritos de dolor mientras se agarraba su estómago.

Dean: ya basta de juegos - con sus gritos me desconcentró por lo que aquella demonio de ojos rojos se rio.
Demonio: vaya parece que sí te has unido al grupo de los Winchester, los rumores eran ciertos - con un gruñido que salía de mi boca me alejé de ellos.

Al poco después de tanta charla que tuvieron se besaron, dejando que el pacto se cumpliera, dentro de 10 años se llevarían a Dean y no pude hacer nada para evitarlo.
La cara de Dean cambió cuando me vio - ¿Qué pasa Dean?, ¿Te habrán dado los 10 años, no? - le cogí del brazo para que me mirase.

Dean: 1 año Gwendal, sólo me han dado 1 año de vida - al mirarle me quedé parada en mi sitio por lo que comencé a darle en su pecho - eres un idiota Dean Winchester, ¿porqué lo hiciste?, tú no, no puedes dejarme - mis golpes se pararon poco a poco y apoyé mi frente en su pecho.

Dean: ya está hecho, nadie me echará de menos - se separó de mí - no tenemos todo el tiempo, ¿vienes? - asentí ante su frío gesto y agarrando su brazo desaparecimos en plena noche de aquella carretera solitaria y oscura.

Al llegar a casa de Bobby Dean subió rápidamente las escaleras, yo en cambio no tenía fuerzas, ¿tan poco se quería Dean que debía de dar su alma para salvar a Sam? - mi cabeza era un lío ahora mismo, por lo que me tumbé en el sofá más cercano, esperando a que Dean saliese de la habitación.

Cerré los ojos un momento pero como si de fuese un tirón desaparecí del salón de Bobby. Aparecí en una habitación oscura sin ventanas, sólo había una puerta de hierro forjado, me encontraba atada con grilletes de hierro en mis muñecas, notaba como me quemaban los grilletes por ser de hierro.

Azazel: vaya parece que mi hija quiere desobedecerme - los ojos amarillos de mi padre me miraban desde la puerta.
Azazel: tú y yo tenemos que hablar muy seriamente - se acercó a mi esperando mi castigo.

-Fin del capítulo-