¡Estoy Embarazada! - Izuku x Nejire (Español)

Capítulo 11 - No estás sola/

05 de octubre (Apartamento afiliado)

Nejire estaba harta de su fisiología, nauseas constantes, cambios en su temperamento, incomodidad y lo peor de todo, la atormentaban sus propios pensamientos, veía venir la decepción de sus padres y la caída de un sueño que forjó con esfuerzo pero se consolaba al pensar que Izuku si lo lograría, probablemente sería el mejor héroe de todos, pensar que en un futuro sería un gran héroe profesional hacía que sintiera que ocultar la verdad valiera la pena.

Había hablado con Ryuko, había sido una larga charla, Nejire evitó el punto de quién era el padre pues sabía que si le decía lo mismo que al director ella no le creería, lloraron, nunca había visto llorar a su maestra por lo que fue una conmoción pero después de eso se sintió aliviada, ella le había dado otra forma a su situación 

-(No es el fin, es un nuevo comienzo, cometiste un gran error pero no te vas a estancar por eso, eres Nejire Hado, fuerte, decidida, curiosa, lista para afrontar nuevos desafíos, puedes seguir, hazlo por tu bien)- 

En los últimos días se había tranquilizado un poco, ya lo había aceptado, de hecho a pesar de todo lo que le hacía pasar, era algo fascinante que estuviera cargando con una vida dentro de ella, estaba tratando de verlo de otra forma, tenía libros de maternidad y cada vez que había algún cambio en su cuerpo lo consultaba para saber porqué sucedía, así se entretenía, pero hay algo que si la golpeaba fuerte, la soledad.

Recovery girl la visitaba todos los días, su maestra le había visitado 3 días seguidos y cada dos horas venía una amable enfermera a controlar su situación y ayudarla, pero el tiempo que estaba sola se había vuelto insoportable, por un momento consideró llamar a su familia pero la vergüenza pudo más, extrañaba a Yuyu, a Togata, a Amajiki y por alguna razón, a pesar de su decisión, extrañaba a Midoriya, había momentos en los que su resolución flaqueaba y tenía ganas de decir que él era el padre para al menos tenerlo cerca unos momentos, para hablar con él, involucrarlo, estaba segura de que se sentiría mejor si lo tenía con ella, pero al instante se reprendía a sí misma.

El timbre sonó, Nejire se levantó de un salto de su cama, y corrió (A pesar de las recomendaciones de no gastar demasiada energía) hacia la puerta, esperaba que fuera su maestra, estar sola la estaba desesperando.

-Ya salgo- Pasó al lado de un espejo y se arregló tanto como pudo el cabello, no estaba en su mejor condición, ropa holgada bastante cómoda y cabello por todas partes, le habían dicho que lo mejor ante todo en este momento era el confort y estaba de acuerdo, presionó el botón del intercomunicador y esperó a ver quien había llegado pero se paralizó al ver dos rostros conocidos.

-Hola? Hado-san estás ahí, queremos saber como estás- Mirio y Tamaki se encontraban viendo la pequeña cámara con anticipación -Podemos...-

-Pasen...- Nejire sintió su voz más apagada, no esperaba para nada que estuvieran aquí, de hecho estaba en modo automático mientras habría la puerta para sus amigos.

Cuando se les abrió la puerta tuvo ganas de llorar, había investigado sobre sus cambios de humor y descubrió que tenía que ver con el embarazo, era sumamente extraño, nunca en su vida pensó que ver a ese par tan disparejo le pondría tan feliz, Tamaki traía en una mano una canasta con diversas frutas y Mirio algunas cartas en su mano, los dos tenían expresiones indescifrables.

-Hola... chicos, pueden poner sus cosas ahí- Nejire señaló una pequeña mesa y los guio hasta la sala de estar, los tres se sentaron, ellos en ese momento repararon en el estado de su amiga, estaba demacrada, no los había recibido con animosidad, tampoco estaba molesta, era difícil saberlo, sus ojos no estaban llenos de vida como generalmente, no estaba dando saltitos o haciendo preguntas a diestra y siniestra, se veía... frágil.